Tema 2: La posibilidad del conocimiento - inicio
Tema 2: La posibilidad del conocimiento - inicio
Tema 2: La posibilidad del conocimiento - inicio
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Filosofía y Ciudadanía<br />
Epistemología<br />
3. El escepticismo.<br />
El escepticismo, también conocido como pirronismo en<br />
referencia a su fundador, Pirrón de Elis (360-270 a.c.), es una<br />
reacción al objetivismo de los racionalistas, y consiste en un<br />
rechazo de la <strong>posibilidad</strong> <strong>del</strong> <strong>conocimiento</strong> más radical <strong>del</strong> que<br />
supuso el relativismo de Protágoras. Pirrón niega que sea posible<br />
el <strong>conocimiento</strong> de ningún tipo. Según los escépticos, lo único<br />
que conocemos son apariencias, y puesto que estas son distintas<br />
para los diferentes individuos, no es posible determinar qué<br />
opiniones son más correctas, puesto que no hay ningún punto de<br />
vista objetivo con el que compararlas. En consecuencia, no tiene<br />
Pirrón<br />
sentido discutir acerca de esas opiniones, con lo cual lo que<br />
recomiendan los escépticos es, simplemente, dejar de hablar de ellas. Y eso es precisamente lo<br />
que hizo Pirrón, que no escribió ningún libro ni se conoce que defendiera doctrina alguna.<br />
Otros pensadores escépticos, por el contrario, argumentaron por qué no era posible conocer<br />
nada con seguridad (en realidad, el escepticismo antiguo no negaba que existiera la verdad,<br />
sino que pudiéramos distinguir esta de la falsedad, y por tanto que pudiéramos estar seguros<br />
de nada. Según los escépticos, quizás yo conozca algunas verdades, pero no sé que lo son.). En<br />
el siglo III d.c Sexto Empírico recopiló esos argumentos (conocidos como “tropos”) que<br />
utilizaban los escépticos para justificar su rechazo de la verdad objetiva. Son los siguientes:<br />
1.- Sobre cualquier cuestión siempre existe una diversidad insuperable de opiniones,<br />
tanto entre la gente corriente como entre los filósofos.<br />
2.- Cualquier demostración se hace a partir de premisas que tienen a su vez que ser<br />
demostradas a partir de otras premisas, que tienen que ser demostradas, y así hasta<br />
el infinito.<br />
3.- Los objetos parecen diferentes según quien los percibe y según el momento,<br />
pues la percepción depende <strong>del</strong> estado de ánimo, la edad, etc.<br />
4.- Los principios que los filósofos dogmáticos asumen como punto de partida de sus<br />
razonamientos, para evitar el regreso ad infinitud, no están demostrados y son<br />
completamente arbitrarios.<br />
5.- Cuando se toman esos principios como base para demostrar otras cosas se está<br />
incurriendo en un círculo vicioso, ya que son dichos principios los que deben ser<br />
demostrados.<br />
“Nosotros no suprimimos las impresiones que producen emociones y nos empujan involuntariamente al<br />
asentimiento: éstas son precisamente las apariencias. Así pues, cuando ponemos en cuestión si la<br />
realidad es tan cual aparece, aceptamos que aparece y no ponemos en tela de juicio la apariencia, sino<br />
las explicaciones dadas acerca de ella, lo cual dista mucho de poner en tela de juicio la apariencia<br />
misma. Por ejemplo, la miel nos aparece como dulce y estamos de acuerdo con ello, ya que percibimos<br />
sensiblemente el dulzor. Lo que cuestionamos es si la miel es dulce en sí misma: pero esto no es ya la<br />
apariencia, sino una teoría acerca de la apariencia.”<br />
Sexto Empírico, “Esbozos pirrónicos”<br />
40