EN LO PRINCIPAL; Demanda por atentado a la Libre Competencia ...

situación, estableciendo una preferencia y acceso de los usuarios de los Terminales
de Líquidos del Molo Sur por Espigon, lo que es perfectamente viable, con lo que
cierra una solución favorable para todos.
20. De esta manera si hoy una nave porta líquidos necesita ser atendida, aún
cuando haya arribado antes que una porta contenedores, deberá negociar y pagar en
el hecho más allá de la tarifa máxima por el servicio básico, ya que el Manual de los
Servicios con la regla de preferencia que se aplica no le da otra alternativa.
Este hecho ya ocurrió con la empresa estatal Codelco División El Teniente, que
tuvo que llegar a un acuerdo privado, pagando a STI para asegurarse el atraque de
las naves que transportan su Acido Sulfúrico, todo ello en condiciones que se han
mantenido en reserva, pero que sin duda este Tribunal debe conocer.
Este acuerdo pone de manifiesto que en realidad las preferencias no obedecen
a ningún criterio técnico objetivo de eficiencia , sino que se determinan en el solo
beneficio del concesionario , quien frente a un pago especial transgredí su propio
sistema de prioridades establecido en su Manual de los Servicios, y sencillamente
vende tales prioridades al mejor postor.
El Manual de los Servicios de este modo, en lo que guarda relación con las
tarifas máximas para servicios básicos y las preferencias en atraque de naves , pasa
a ser un mero documento aparente para cumplir disposiciones legales, pero que en la
practica se aplica a la sola conveniencia del concesionario. Esto es justamente el
punto que debe resolver este Tribunal, y declarar si es legítimo y aceptable al tenor de
los principios Constitucionales y legales citados
21. A través de la aplicación de esta practica en el Molo Sur, el concesionario
del frente de atraque aumenta sus ingresos, y en particular protege el interés de sus
accionistas vinculados directamente al tráfico de contenedores, con evidente abuso
de una posición dominante, y en directo perjuicio de los demás usuarios del frente de
atraque, a quienes se obliga a pagar los mayores costos asociados a la existencia de
un número limitado de sitios de atraque. Este mayor costo, está en definitiva gravando
a la carga que no se transporta por contenedores, ya que es la que en definitiva
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