Impacto economico de la Malaria

d) Caballococha
La mayor parte de la economía de la localidad está centrada en el comercio,
motivado por el tráfico de mercadería en la zona fronteriza con Colombia.
Cabe resaltar que uno de los problemas más importantes de la población es
el aumento de precio de la gasolina, cuya distribución ha sido regulada para
contrarrestar la especulación de gasolina peruana en la zona fronteriza.
Como consecuencia, han aumentado los precios del transporte y se han
restringido los servicios de educación y salud hacia las localidades más
alejadas. En las comunidades rurales la actividad económica es la producción
agropecuaria, la pesca y la crianza de animales menores. La industria
se desarrolla en la zona de Caballococha y está constituida por ladrilleras y
pequeños fundos privados de productos agroindustriales, como el aceite de
oliva.
El nivel de ingresos mensual de la zona urbana se estima entre 400 y 700
nuevos soles, de amplio contraste con el de las zonas rurales (100 nuevos
soles, aproximadamente).
Impacto Económico de la Malaria en el Perú
La localidad es sede de la red de salud Ramón Castilla, la cual administra y
supervisa las acciones preventivas de varios distritos fronterizos. El centro
de salud cuenta con una serie de establecimientos asignados: Caballococha,
Cuchillococha, Chimbote, Isla del Tigre y San Antonio. Sin embargo, al momento
del estudio se observó que existe una alta concentración de personal
médico en Caballococha pues los dos únicos médicos se encontraban en
este lugar, así como 20 de los 24 técnicos en salud presentes en la zona.
El acceso al distrito de Caballococha se realiza de dos formas: por vía fluvial
a través de deslizadores (siete horas), y por vía áerea (una hora de viaje a
un costo de 40 dólares). El acceso desde el distrito hacia las localidades del
interior se realiza empleando pequeñas embarcaciones particulares. Por
vía terrestre sólo se accede a algunas localidades cercanas a través de una
vereda peatonal —aún inconclusa— implementada por PRONAA.
Las localidades cuentan con organizaciones de base (Comedores Populares,
Comités del Vaso de Leche, Clubes de Madres), y existe una activa
participación en los trabajos comunales (construcción de veredas peatonales
y limpiado de pozos), así como frecuentes asambleas locales.
100.