ciberactivismo de los movimientos politicos y ... - FES Ecuador

Feminista Casa Rosa, por la cual se llegó a Mujeres de Frente), el blog está
abandonado desde hace dos años, pues el colectivo Casa Rosa, integrado por otras
agrupaciones de mujeres, dejó de funcionar.
3. Esta diferencia entre carácter y tiempo de creación de las organizaciones
consultadas, alude sutilmente a una de las causas de la poca presencia de los
colectivos de mujeres en el ciberespacio, como son las diferencias generacionales.
Aunque no sea la única razón, permite deducir que cuando gente joven forma parte de
un colectivo, trae conocimientos y prácticas propias de su tiempo, como en este caso
el uso de herramientas de la web 2.0.
4. El factor generacional, que divide las facilidades de acceso y uso de las TIC
según los años de nacimiento de las personas (Sinclair y Cerboni, citados
anteriormente), pesa más que la brecha de género, pues las organizaciones no usan
ni aprovechan las nuevas herramientas que ofrece el Internet porque están integradas
por mujeres, sino por falta de recursos económicos y de tiempo personal e
institucional.
5. Las causas aparecen combinadas: la generación, en las organizaciones
institucionales, se combina con la falta se recursos económicos para pagar a una
persona que pueda crear y actualizar una página web y/o un blog, y/o con la falta de
tiempo para actualizar una red social, porque el trabajo institucional desborda. Sin
embargo, el factor tiempo está relacionado estrechamente con la condición de género:
“las mujeres somos pobres de tiempo”, interpretan, desde su profesión de economistas
y su militancia feminista, las integrantes de Cí-Género, el más reciente entre los seis
colectivos de la muestra, quienes resumen uno de los principales argumentos de las
otras agrupaciones.
6. Surgen también otras razones posibles, como la inseguridad que puede
resultar de la información de datos personales por las redes sociales, así como el
miedo a la tecnología o tecnofobia, relacionado particularmente con la generación;
pero no pesan para analizar la ausencia en la web, aunque habría que considerarlas
las dos, porque la inseguridad es también una forma de miedo, producto del
desconocimiento, y con la generación “inmigrante digital”, a la que pertenece quien
mencionó esta razón.
7. Ninguna de las organizaciones deja de reconocer la importancia de la
presencia institucional en la web y el uso y manejo de sus herramientas. Y aunque no
saben con precisión lo que es el ciberactivismo, se acercan bastante a la definición o
lo intuyen acertadamente. Aceptan que permitirían mayor contacto con la ciudadanía,
aunque para el tipo de actividad política que realizan y con los sectores sociales con
los que trabajan, optan por los contactos personales y más directos. Los colectivos
que sostienen este criterio son los que trabajan con organizaciones populares,
independientemente el tiempo de su agrupación. Así lo creen, por ejemplo, Luna
Creciente y Mujeres de Frente, la una institucional y la otra de carácter informal –si
cabe el término-, las cuales no utilización la web 2.0 para el activismo político, porque
las mujeres de los sectores populares con los que ellas trabajan, no conocen ni usan
estas herramientas; a lo sumo, sus líderes manejan el correo electrónico. Este hecho
lleva a pensar que el uso mayor o menor de las redes sociales y otras herramientas de
la web 2.0 para el ciberactivismo, está condicionado por los grupos destinatarios del
activismo político de las organizaciones, lo cual obedece a factores socioeconómicos
de carácter estructural.
8. Frente a estos factores que nos aproximan a una explicación multicausal de la
casi total ausencia de las organizaciones de mujeres en la red, hay que pensar en
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