Enero - LiahonaSud
Enero - LiahonaSud
Enero - LiahonaSud
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
as de vida eterna; debemos<br />
razonar tan inteligentemente como<br />
nuestra capacidad nos lo permita;<br />
debemos hacer uso de cada una de<br />
las facultades y aptitudes con que<br />
se nos ha investido para proclamar<br />
el mensaje de salvación, y hacerlo<br />
comprensible para nosotros mismos<br />
y para los demás hijos de nuestro<br />
Padre Celestial. Pero además, después<br />
de haber cumplido con todo.<br />
estoe incluso en el proceso de cumplirlo,<br />
tenemos la obligación de<br />
dar testimonio—de hacer saber al<br />
mundo y a nuestros compañeros<br />
en la Iglesia—que en nuestro corazón<br />
y por revelación del Espíritu<br />
Santo a nuestra alma, conocemos<br />
la verdad y la divinidad de la obra<br />
y la doctrina que enseñamos.<br />
Ahora permitidme tomar de los<br />
registros antiguos una clásica ilustración<br />
de cómo se logra esto. Pedro<br />
y sus compañeros tenían la misma<br />
obligación, en su época, que nosotros<br />
tenemos en la nuestra: llevar<br />
el mensaje de salvación hasta los<br />
cabos de la tierra. Supongo que él<br />
leería y enseñaría las revelaciones<br />
que hicieron Isaías y los otros<br />
profetas sobre Cristo y su evangelio;<br />
razonó con la gente sobre ellas<br />
siguiendo el divino consejo, "Venid<br />
pues, dice Jehová, y arguyamos<br />
juntos. . ."; obedeció el decreto<br />
divino, "presentad vuestras pruebas.<br />
. ." (Isaías 41:21) Pero también<br />
hizo algo más: después de haber<br />
enseñado la doctrina y haber razonado<br />
con la gente, dio su testimonio<br />
personal de la verdad y<br />
divinidad de lo que había presentado;<br />
y el Señor lo preparó para<br />
hacerlo dándole la oportunidad de<br />
pasar por experiencias espirituales,<br />
y dejando que el poder del Espíritu<br />
Santo descansara sobre él.<br />
Recordaréis, por ejemplo, que<br />
Pedro y algunos otros de los Doce,<br />
junto con un grupo de santos, se<br />
encontraban en un cuarto cuando<br />
el Señor Jesús se les apareció. Todos<br />
los que allí se encontraban<br />
reunidos se quedaron asombrados<br />
y espantados. El Señor les dijo:<br />
"¿Por qué estáis turbados, y vienen<br />
a vuestro corazón estos pensamientos?<br />
Mirad mis manos y mis<br />
pies, que yo mismo soy; palpad, y<br />
ved; porque un espíritu no tiene<br />
carne ni huesos, como veis que<br />
yo tengo." (Lucas 24:38-39) Entonces<br />
ellos extendieron las manos y lo<br />
tocaron, y palparon las heridas que<br />
marcaban su cuerpo. Y El pidió<br />
carne y la comió delante de ellos.<br />
Pero Tomás no se encontraba entre<br />
ellos y no pudo creer el testimonio<br />
de sus compañeros; ocho días más<br />
tarde, el Señor hizo otra aparición,<br />
esta vez ante todo el grupo, y le<br />
dijo: "Pon aquí tu dedo, y mira<br />
mis manos; y acerca tu mano, y<br />
métela en mi costado; y no seas<br />
incrédulo, sino creyente." Y Tomás<br />
exlamó: "¡Señor mío, y Dios mío!"<br />
(Ver Juan 20:24-28)<br />
Todo esto fue hecho para mostrar<br />
que Jesús había salido de la<br />
tumba con un cuerpo tangible; en<br />
esta forma el Señor les dio a Pedro<br />
y sus compañeros un testimonio<br />
de la veracidad y divinidad de su<br />
gloriosa filiación. El se había levantado<br />
de los muertos porque era el<br />
Hijo de Dios; y si El era el Hijo de<br />
Dios, el evangelio de salvación que<br />
ellos proclamaban era verdadero...<br />
Por lo tanto, tenían la responsabilidad<br />
de convencer a los hombres de<br />
que El se había levantado de los<br />
muertos. Ahora bien, como ya lo<br />
mencioné, habrían de tratar de<br />
hacerlo citando a Isaías o razonando<br />
sobre las revelaciones, y así lo<br />
hicieron. Pero después tuvieron que<br />
ofrecer su testimonio personal; y<br />
ahora deseo leer una muestra de<br />
tal testimonio, ofrecido por Pedro,<br />
cuando dijo ante un grupo de gentiles:<br />
"Dios envió mensaje a los hijos<br />
de Israel, anunciando el evangelio<br />
de la paz por medio de Jesucristo;<br />
éste es Señor de todos. . .<br />
"Vosotros sabéis lo que se divulgó<br />
por toda Judea, comenzando<br />
desde Galilea, después del bautismo<br />
que predicó Juan:<br />
"Cómo Dios ungió con el Espíritu<br />
Santo y con poder a Jesús<br />
de Nazaret, y cómo éste anduvo<br />
haciendo bienes y sanando a todos<br />
los oprimidos por el diablo, porque<br />
Dios estaba con él.<br />
"Y nosotros somos testigos de<br />
todas las cosas que Jesús hizo en<br />
la tierra de Judea y en Jerusalén;<br />
a quien mataron colgándole en un<br />
madero.<br />
"A éste levantó Dios al tercer<br />
día, e hizo que se manifestase;<br />
"r^o a todo el pueblo, sino a los<br />
testigos que Dios había ordenado<br />
de antemano, a nosotros que comimos<br />
y bebimos con él después<br />
que resucitó de los muertos.<br />
"Y nos mandó que predicásemos<br />
al pueblo, y testificásemos que él<br />
es el que Dios ha puesto por Juez<br />
de vivos y muertos. . . ." (Hechos<br />
10:36-42)<br />
Y a continuación, esta categórica<br />
declaración: "De éste dan testimonio<br />
todos los profetas, que todos<br />
los que en él creyeren, recibirán<br />
perdón de pecados por su nombre."<br />
(Hechos 10:43)<br />
Permitidme leer otro testimonio<br />
más que ofreció Pedro:<br />
"Porque no os hemos dado a<br />
conocer el poder y la venida de<br />
nuestro Señor Jesucristo siguiendo<br />
fábulas artificiosas, sino como<br />
Liahona <strong>Enero</strong> de 1974 37