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hombros, por miedo a caerme. Sin embargo, cuando intentó meter su lengua en<br />
mi boca, no titubeé en morderlo.<br />
El idiota aulló.<br />
Toma eso.<br />
Tan pronto como me abrazó, también me soltó. Mi cabeza dio vueltas.<br />
Puse una mano en la pared para evitar tropezar. Restregué mi boca, tratando de<br />
sacarme su sabor, mientras Mal me lanzaba una mirada herida.<br />
—Maldición. Eso dolió. —Cuidadosamente tocó su lengua buscando<br />
daños—. ¡Estoy sangrando!<br />
—Bien.<br />
Pam y Tyler rieron entre dientes, sumamente divertidos.<br />
Unos brazos se envolvieron alrededor de mí desde atrás y David susurró<br />
en mi oído—: Buen trabajo.<br />
—¿Sabías que iba a hacer eso? —pregunté, sonando claramente cabreada.<br />
—Joder, no. —Frotó su cara contra un lado de mi cabeza, desordenando<br />
mi cabello aplastado—. No quiero a nadie más tocándote.<br />
Era la respuesta correcta. Mi enojo se desvaneció. Puse mis manos sobre<br />
las suyas y su agarré en mí se apretó.<br />
—¿Quieres que le patee el culo? —preguntó David—. Sólo di las<br />
palabras.<br />
Pretendí considerarlo por un momento mientras Mal nos observaba con<br />
interés. Obviamente nos veíamos mucho más amigables que cuando estábamos<br />
en LA. Pero no era el asunto de nadie. No de sus amigos, no de la prensa, ni de<br />
nadie.<br />
—No —Le susurré de vuelta, mi vientre haciendo volteretas. Estaba<br />
enamorándome de él tanto que me asustaba—. Creo que mejor no.<br />
David me giró en sus brazos y me acomodé en él, envolviendo mis<br />
brazos alrededor de su cintura. Se sentía natural y correcto. La esencia de su<br />
piel me drogaba. Podía estar de pie ahí, oliéndolo por horas. Se sentía como si<br />
estuviéramos juntos, pero ya no confiaba en mi propio juicio.<br />
—¿Malcom se va a unir a ustedes en su luna de miel? —La voz de Pam<br />
era con desconfianza.<br />
David se rio entre dientes. —No, esta no es nuestra luna de miel. Si<br />
tenemos una luna de miel será en algún lugar muy lejos de todos. Seguro como<br />
el infierno que él no estará allí.<br />
—¿Sí? —preguntó ella.<br />
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