de este escrito de Bakunin y, fortalecidos por la experiencia <strong>del</strong>movimiento anarquista, por sus avatares, por su suerte confrecuencia trágica, por el miedo que siempre suscitó entre losposeedores y los amos de este mundo, y por la violenta represiónque le opusieron, nosotros, los anarquistas de hoy, orgullososde la vivacidad de nuestras ideas, podemos continuarafirmando la anarquía como una proposición para el futuro,como un camino para las generaciones que vendrán.Diremos entonces que la anarquía designa un régimen socialbasado en la libertad individual y colectiva, régimen <strong>del</strong>cual queda desterrada toda forma institucionalizada de coercióny, en consecuencia, toda forma instituida de poder político(o de dominación).La libertad anarquista, en tanto principio positivo de organizaciónpolítica de la sociedad, es la otra faz de la negación<strong>del</strong> principio de autoridad, negación constitutiva <strong>del</strong> conceptode anarquía que suscita el acuerdo general de todos los que sereconocen en el anarquismo, en todas sus variantes, desde elindividualismo hasta el comunismo (se dejará de lado aquí esemonstruo híbrido y contranatura llamado anarquismo de derechao anarcocapitalismo).Si hablamos de libertad anarquista, es porque dos elementosdan su especificidad a esta libertad propia de una sociedadanarquista. Uno es la ruptura radical con la continuidadsociohistórica <strong>del</strong> principio de mando-obediencia constitutivode todo poder político, de todo “Estado” (paradigma tradicionalde la dominación justa). El otro es que la libertad, para losanarquistas, no puede ser separada de una sinergia de los valoresen la cual la igualdad es condición necesaria.Así, la libertad es una creación social históricamente determinada–como lo es por otra parte la dominación–, sólo lanegación escapa a este determinismo de la acción cumplida, yse convierte en la fuerza creadora, la voluntad de innovación.Proudhon escribe: “La negación en filosofía, en política, enteología, en historia, es la condición previa a la afirmación.Todo progreso comienza por una abolición, toda reforma seapoya sobre la denuncia de un abuso, toda nueva idea reposasobre la insuficiencia demostrada de la antigua”.De la negación <strong>del</strong> gobierno surge la idea positiva “que debe34 / EDUARDO COLOMBO
conducir a la civilización hacia su nueva forma 3 ”. Dicho conlas palabras de Bakunin: “La voluntad –o la pasión– por destruires al mismo tiempo una voluntad creadora 4 ”.Se sigue de ello la crítica sin concesiones al contrato socialde los liberales, tanto en el linaje de Locke como en el deRousseau. Los “doctrinarios liberales” pretenden que la libertadindividual es anterior a la sociedad política y que cada individuola aliena en el “pacto social” en virtud de la ficción deuna unidad colectiva abstracta depositaria de la soberanía. Porel contrario, para los anarquistas, la libertad adviene en la historia.La idea liberal que presupone a los hombres como “todosnaturalmente libres, iguales e independientes” 5 antes de lasociedad política sirve para legitimar la existencia <strong>del</strong> Estado.A partir de un pacto o contrato primitivo teorizado como unacto de fundación <strong>del</strong> poder político “que supone al menos poruna vez la unanimidad”, los liberales justifican el deber de obedecera aquellos que mandan y de aceptar las leyes que losdiferentes regímenes imponen. “En efecto, si no hubiera ningunaconvención anterior” 6 , ¿dónde estaría la obligación de someterseal gobierno y de obedecer a la ley? ¿De dónde vendríael derecho de coacción <strong>del</strong> Estado?“El hombre llega muy difícilmente a la conciencia de suhumanidad y a la realización de su libertad.”En el seno de la sociedad, con los otros seres humanos, surgela idea de la libertad y se desarrolla como un valor a conquistar.La libertad es “la gran meta, el fin supremo de la historia 7 ”.De esta proposición se desprende que la libertad es obra <strong>del</strong>colectivo humano, es una creación sociohistórica. Nada, nipersona, ni dioses, ni naturaleza, dan al hombre su libertad. Élse la da a sí mismo, él instituye su nomos, su regla, su “ley”. Laanarquía establece, de entrada, un corte total con todaheteronomía.La anarquía es, entonces, la figura de un espacio políticono jerarquizado, organizado para y a través de la autonomía<strong>del</strong> sujeto de la acción (la autonomía <strong>del</strong> sujeto humano, sujetoconstruido como forma individual o colectiva). La construcciónde este espacio público y de las instituciones que lo haránposible es una tarea siempre inacabada. Incluso en la sociedadmás abierta y libre que nos sea dada pensar, el anarquista seráLA VOLUNTAD DEL PUEBLO / 35
- Page 3: LA VOLUNTAD DEL PUEBLOTUPAC EDICION
- Page 6: Colombo, EduardoLa voluntad del pue
- Page 10 and 11: momentos de reinstitucionalización
- Page 12 and 13: gran cantidad de gente, “democrac
- Page 15 and 16: ¡YO SOY ANARQUISTA!REFLEXIÓN INOP
- Page 17 and 18: “es siempre garantía de libertad
- Page 19 and 20: Veamos, entonces. ¿Qué interés t
- Page 21 and 22: A partir del siglo XVI, a la herej
- Page 23 and 24: muestra el mismo Montesquieu: “Ha
- Page 25 and 26: manidad es un todo colectivo, en el
- Page 27: cha ciencia es definida como un “
- Page 31 and 32: ANARQUÍA Y ANARQUISMO“No imagina
- Page 33: sencia o de una carencia de autorid
- Page 37 and 38: dad, ni va necesariamente de la man
- Page 39 and 40: “Los principios que debemos esfor
- Page 41 and 42: equivalencia de las obligaciones y
- Page 43 and 44: DEL PODER POLÍTICO“Es esta fuerz
- Page 45 and 46: hasta llegar a la gente del pueblo
- Page 47 and 48: “constreñir, cuando lo requiera,
- Page 49 and 50: Desde ese punto de vista, el poder
- Page 51 and 52: LO POLÍTICO Y EL PODERLa acción p
- Page 53 and 54: política” una invención histór
- Page 55 and 56: do exigirá el deber de obediencia.
- Page 57: 12Quentin Skinner, Les Fondements d
- Page 60 and 61: del gendarme que asegura bienes y p
- Page 62 and 63: libre. El pueblo reina allí; (…)
- Page 64 and 65: La heteronomía de lo social instit
- Page 66 and 67: enero de 1789 e incluso a partir de
- Page 68 and 69: da”. En el debate acerca de la re
- Page 70 and 71: No obstante, la Gran Revolución, a
- Page 72 and 73: La revolución de 1848 terminará d
- Page 74 and 75: delegable ni representable, pertene
- Page 76 and 77: crítico nos alerta: ¿cómo puede
- Page 78 and 79: de la tarde y las diez de la noche.
- Page 80 and 81: defendidos, y que sin embargo no ti
- Page 83 and 84: EL VOTO Y EL SUFRAGIO UNIVERSAL“
- Page 85 and 86:
EL VOTO SECRETO¿El voto debe ser p
- Page 87 and 88:
El anarquista se niega a valerse de
- Page 89 and 90:
tantes del pueblo”, y son ellos q
- Page 91 and 92:
APÉNDICELA SÍNTESIS REVISIONISTA
- Page 93 and 94:
la causa de mi adhesión al anarqui
- Page 95 and 96:
fedeli alla tradizione” 10 , y se
- Page 97 and 98:
hechas más que por los ricos y par
- Page 99 and 100:
Terror, y en un instrumento, la gui
- Page 101 and 102:
algunos lo pretenden; separar un
- Page 103 and 104:
ve la historiografía liberal: prim
- Page 105 and 106:
prácticas discursivas que posibili
- Page 107:
Glencoe, 1957. [Edición en españo