tesis. texto - Pagína para probar la instalación de Apache

La revolución industrial, del siglo XIX, acabateniendo su consecuencia arquitectónica, aunque tarde,en la primera mitad del siglo XX. El llamado MovimientoModerno, viene a suponer en principio una granliberación para la arquitectura, férreamente anclada porentonces a unos códigos formales y unas tipologías degran rigidez, especialmente crueles y estériles, puestoque ya el uso de las nuevas posibilidades, materiales ytécnicas constructivas se había asentado en la sociedad;aunque sin encontrar su expresión propia. Pero como entantas ocasiones a lo largo de la historia, el nuevo ideal,el mensaje liberador, acabó instalándose como autoridadindiscutible y finalmente tiranía insoportable para muchos.Cuando se consolida el Movimiento Moderno, laarquitectura cree haber encontrado un campo deobjetividad, en el que más allá de la proposición de unasformas concretas, parece que se esté fundando unlenguaje universal, en el que la forma viene ligada a lafunción, a la aceptación de la realidad en la que seinscribe la arquitectura, y de la materialidad con la que sela construye, potenciándolas y enalteciéndolas, en lugarde luchar contra ellas, como preconizaría un sentido másromántico de la artisticidad. Es la arquitectura de lacoherencia y de la necesidad. (Entre otras cosas lecorresponde reconstruir el mundo destruido por lasguerras mundiales). Se establecen unas normas éticas,más que estéticas, ligadas a la utilidad y la construcción.La verdad es bella. La mentira no lo es. La arquitecturase torna rigurosa y exigente. Pura . Ascética: Menos esmás, es el eslogan más ascético de la historia. Ni SantaTeresa y San Francisco llegaron a tanto. Estas reglas dejuego, al fin y al cabo búsqueda de la excelencia, pordeterminadas vías, son particularmente duras. Elarquitecto no juega, la arquitectura pierde su componentelúdica, la exigencia continuada es dura y sólo al alcancede los elegidos. Y después de un periodo de granfertilidad, que realmente supone uno de los instantesapoteósicos de la historia de la arquitectura, empiezan asurgir otras alternativas de conducta (Sí, de conducta,porque la coherencia total hace que la norma deconducta vital y el credo arquitectónico corran paralelos.)La artisticidad libre, lúdica, subvertidora de lanaturaleza y de la racionalidad, se siente sojuzgada,excluida, o al menos no protagonista. Durante un tiempola cultura arquitectónica se desenvuelve en actitudes denegación y liberación, sin alcanzar a proponer39