Escuelas de Tiempo Completo desde la perspectiva del Derecho a la Educación

ESCUELAS DE TIEMPO COMPLETO DESDE LA PERSPECTIVA DEL DERECHO A LA EDUCACIÓN
Los testimonios de las maestras sobre la mayor
exigencia de tiempo que sobrepasa a otros ámbitos de
la vida social de ellas y los alumnos se contrapone con
el criterio de adaptabilidad postulado en la Convención
sobre los Derechos del Niño, pues éste indica el
requerimiento de las escuelas para adaptarse a los niños
y en consecuencia revoca la tradición de forzar a los
niños a adaptarse a cualquier condición que la escuela
hubiera previsto para ellos. “Dado que los derechos humanos son indivisibles, deben
establecerse salvaguardas para garantizar todos los derechos humanos en la educación, para
adaptar progresivamente la educación a todos los derechos humanos.” (Tomasevski: 350)
En cuanto al principio de aceptabilidad que engloba una serie de criterios de calidad en la
educación va mucho más allá de la seguridad, la salud y las cualidades profesionales de los
docentes, pues un hecho significativo dentro de este criterio es el haber tomado en cuenta a
la niñez como titular al derecho a la educación y en la educación. Las fronteras de la
aceptabilidad se han extendido hasta los programas educativos y los libros de texto, así como
a los métodos de enseñanza y aprendizaje, que son examinados y modificados con el objeto
de volver a la educación aceptable para todos.
Retomamos dos objetivos y el artículo 31 referentes a los derechos del niño que sustentan
nuestro argumento respecto a la violación de los mismos en el PETC:
El interés superior del niño: cualquier decisión, ley, o política que pueda afectar a la
infancia tiene que tener en cuenta qué es lo mejor para el niño.
La participación: los menores de edad tienen derecho a ser consultados sobre las
situaciones que les afecten y a que sus opiniones sean tenidas en cuenta.
Artículo 31
1. Los Estados Partes reconocen el derecho del niño al descanso y el esparcimiento, al juego
y a las actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural
y en las artes.
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