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VII. CRITERIOS BÁSICOS
VII.1.
CRITERIOS PARA LA ELABORACIÓN DEL PLAN DE RESIDUOS DE LA REGIÓN DE
MURCIA
En la elaboración del PRRM, se han tenido en cuenta una serie de criterios básicos, tanto a nivel normativo
como estratégico, que han inspirado el marco general de la planificación derivados de la Directiva
Marco de Residuos, a saber:
De protección de la salud humana y el medio ambiente
Este principio es básico en cualquier política medio ambiental, y las actuaciones en materia de residuos
deben evitar la afección a la salud humana por una parte, y a la calidad del agua, el aire, el suelo,
la fauna, la flora o el paisaje por la otra. Además estas actuaciones deben ser coherentes con la estrategia
de lucha contra el cambio climático.
De jerarquía de gestión de residuos
La prevención y la preparación para la reutilización constituyen los pilares fundamentales para evitar
la generación de residuos, mientras que el reciclado, el resto de valorizaciones, incluida la valorización
energética y finalmente la eliminación conforman, en este orden de prioridad, las diversas opciones
existentes para intentar que un residuo ya generado pueda seguir constituyendo un recurso. El mejor
residuo es el que no se genera y si ya se ha generado hay que intentar que reciba un tratamiento
que le permita incorporarse de nuevo al ciclo productivo.
De autosuficiencia, proximidad y universalidad
Los residuos deben ser tratados en unas instalaciones adecuadas y lo más próximas a los principales
puntos donde se generan estos. De esta manera se intenta minimizar el riesgo y el posible impacto negativo
sobre el medio ambiente, lo que exige el establecimiento de una red integrada y adecuada de
instalaciones de eliminación de residuos y de instalaciones para la valorización de residuos municipales
mezclados recogidos de hogares privados, incluso cuando dicha recogida también abarque tales residuos
procedentes de otros productores.
De responsabilidad ampliada del productor y de corresponsabilidad de todos los agentes
En la dinámica de generación y gestión de residuos los fabricantes tienen un papel muy importante,
así la posibilidad de aplicar la jerarquía de gestión sobre un residuo va a depender directamente de las
condiciones de diseño del producto que lo genera y hay que considerar por tanto el ciclo de vida de
cualquier producto, y aplicar criterios de ecodiseño en su fabricación. Así reducir la presencia de sustancias
peligrosas, aumentar la cantidad de materiales reciclados y/o reciclables o facilitar el mantenimiento,
la reparación y el desmontaje de un producto son medidas que pueden alargar la vida útil de
un producto a la vez que facilitan su gestión al término de la misma.
El reto de la prevención y la reutilización es corresponsabilidad de toda la sociedad, únicamente el
trabajo conjunto y coordinado de todos los agentes implicados permitirá avanzar de manera significativa.
Esto incluye al productor del residuo, a la administración, que debe velar por la existencia de las infraestructuras
de gestión adecuadas, y a los consumidores que deben usarlos y darles un fin de vida
adecuado, y finalmente a los tratadores o gestores que deben darles el tratamiento óptimo para minimizar
su impacto.
De transparencia y participación
Aumentar la transparencia y la trazabilidad en la gestión de residuos favorece la aplicación de la jerarquía
de residuos. Por un lado, la plena identificación de las fuentes de producción va a permitir
adoptar medidas de prevención en origen. Por otro lado, el conocimiento del circuito de tratamiento
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