21.03.2017 Views

II ORAR EN CUARESMA

ORAR-EN-CUARESMA

ORAR-EN-CUARESMA

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

–«Os aseguro que ningún profeta es bien mirado<br />

en su tierra. Os garantizo que en Israel había<br />

muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo<br />

cerrado el cielo tres años y seis meses, y hubo una<br />

gran hambre en todo el país; sin embargo, a<br />

ninguna de ellas fue enviado Elías, más que a una<br />

viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y<br />

muchos leprosos había en Israel en tiempos del<br />

profeta Eliseo; sin embargo, ninguno de ellos fue<br />

curado, más que Naamán, el sirio.»<br />

Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron<br />

furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del<br />

pueblo hasta un barranco del monte en donde se<br />

alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo.<br />

Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.<br />

(Lucas 4, 24-30)<br />

Ora<br />

—Ningún profeta es bien mirado en su<br />

tierra.<br />

Las apariencias y las rutinas de la vida me<br />

engañan muchas veces, Señor. Pienso, por ejemplo,<br />

que no puede ser profeta, ni santo el que convive<br />

conmigo. Veo que es un hombre como yo, sujeto a<br />

mis mismas necesidades, y no quiero concederle superioridad<br />

ninguna sobre mí. La envidia y la<br />

soberbia cierran muchas veces mi corazón.<br />

Pero Tú, Señor, inspiras donde quieres y escoges<br />

tus instrumentos según tu voluntad, sin atender a<br />

circunstancias de la tierra.<br />

105

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!