Revista Central

NOTA DE TAPA
vienen a pedir un consejo y yo estoy convencido
de algo, no estoy para que no me escuchen,
porque ahí ya directamente siento que pierdo mi
tiempo y siento que hoy tengo menos tiempo
para perder. Entonces, si me escuchan estoy, si
no me escuchan, no. Generalmente la gente que
trabaja conmigo escucha y aporta mucho. Eso
me encanta. No me siento tanto el padre de ellos,
sino alguien más grande con experiencia. Cumplí
50 años de trabajo. Entonces tengo un camino
recorrido y me gusta hacer docencia, traspasarlo.
Me gusta que otros puedan tener esa suerte
que tuve yo, que tuve a una persona que quiero y
respeto mucho, Carlos Montero, que me enseñó
mucho del trabajo, pero más de la vida, y eso es
lo más importante. Yo trato de hacerles llegar
eso a todos los que trabajan conmigo. Que
tengan la posibilidad de escuchar a alguien que
tiene ganas de que les vaya bien.
. . . . .
“Yo a esta altura de
mi vida necesito
buenos momentos y
pasarla bien. Y
cuando digo “divertir”,
dentro del
paraguas de la palabra
está entretener,
pasarla bien, tener
una buena relación
con el grupo y los
actores que te llene,
que te haga sentir
bien. Y esto es lo que
hoy pasa con el
teatro”
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