05.01.2023 Views

Los secretos de la mente millonaria

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

1000. Luego se apuntó a uno de mis cursos y aprendió todo acerca del arte del

“apalancamiento” financiero. Entonces le di 2000 dólares, ¡y se gastó 10.000! Traté

de explicarle: “No cariño, “apalancamiento” significa que somos nosotros los que se

supone que debemos obtener los 10.000 dólares, no gastarlos”. Indudablemente había

algo que no estaba asimilando. Lo único por lo que llegamos a pelearnos fue por el

dinero. Casi nos costó nuestro matrimonio. Lo que en aquel momento no sabíamos

era que los significados que cada uno de nosotros atribuía al dinero eran radicalmente

distintos: para mi esposa significaba placer inmediato (como cuando disfrutaba de su

helado); yo, por otro lado crecí con la creencia de que el dinero era para acumularlo

como un medio de crear libertad.

En lo que a mí se refería, siempre que mi esposa gastaba dinero no estaba

gastando dinero, sino nuestra futura libertad. Por su parte, ella sentía que cada vez

que yo la contenía para que no derrochase estaba quitándole el placer de su vida.

Menos mal que aprendimos a corregir cada uno nuestros patrones de dinero y, lo

que es mas importante, a crear un tercer patrón del dinero pensado específicamente

para nuestra relación.

Todo esto ¿funciona? Permíteme expresarlo de este modo; yo he presenciado tres

milagros en mi vida:

1. El nacimiento de mi hija

2. El nacimiento de mi hijo

3. Mi esposa y yo ¡sin discutir ya más por el dinero!

Relato recibido de Deborah Chamitoff

De : Deborah Chamitoff

Para: T. Harv. Eker

Asunto: ¡Económicamente libre!

Harv:

Actualmente, dispongo de dieciocho fuentes de ingresos pasivos y ya

no necesito ningún “empleo”. Sí soy rica, pero lo más importante es que

¡es mi vida la que está enriquecida y llena de alegría y abundancia! Pero

no siempre ha sido así.

Antes el dinero era una carga para mí. Confié en extraños para que

llevasen mis asuntos económicos simplemente para no tener que tratar yo

con ellos. Lo perdí casi todo durante el último descalabro bursátil, y ni

siquiera me di cuenta hasta que fue demasiado tarde.

Y lo que es más importante, me perdí el respeto a mi misma.

Paralizada por el miedo, la vergüenza y la desesperanza, me aparté de

www.lectulandia.com - Página 31

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!