REFLEXIONSLA MÚSICAJAUME ALBÀAmb la finalitat d’escriure i reflexionar, he posat en una bossa una sèrie <strong>de</strong> paraules, n’he estirat una i hasortit la música.El valor <strong>de</strong> la música és àmpliament reconegut, a través <strong>de</strong>ls temps, els estils, les preferències, semblaperdurable.Anem lligats al ritme, encara que sigui al <strong>de</strong>ls batecs <strong>de</strong>l cor. Cantem cançons als nadons, invocant elsesperits <strong>de</strong> la son. Cantem en colla a l’adolescència cercant alguna mena d’intersecció. Triem melodiesque acompanyin certs moments <strong>de</strong> la nostra vida, a cops són les mateixes cançons que ens atrapen i ens<strong>de</strong>ixen enganxats a un temps, a una persona, a un moment.Reconeguda terapèuticament, la música ajuda les persones amb discapacitats psíquiques, relaxa neguits,i guareix feri<strong>de</strong>s <strong>de</strong> variada procedència.M’envaeix una certa preocupació quan veig com s’acostuma actualment a escoltar la música, el jovent es“baixa”, d’una manera força <strong>de</strong>spreocupada, un bon grapat <strong>de</strong> diverses cançons <strong>de</strong> diferents autors, ambbarreges d’estils, etc. Tot seguit, les “esborren”, em pregunto si només <strong>de</strong>ls seus aparells o també <strong>de</strong>lsseus cervells i se’n tornen a “baixar” unes altres 25 o 30. Les novetats van a un ritme tan vertiginós queunes aixafen les altres.Diuen que a la meva edat ja no es pensa, només es recorda, doncs jo recordo que, fa molts anys, es pensavenels LP com una obra al complet i així els escoltàvem, <strong>de</strong> la primera a la darrera cançó i ens apreníemels compassos, les lletres, els ritmes, tot <strong>de</strong> memòria. Aquest exercici, està clar que, moltes vega<strong>de</strong>s, requeriaun petit esforç que, posteriorment, ha estat àmpliament recompensat. Escoltar una música diversesvega<strong>de</strong>s fins <strong>de</strong>scobrir què t’agradava d’ella obria les portes al refinament i el refinament al plaer.Menció especial per als concerts en directe, plens <strong>de</strong> vida, d’emoció, <strong>de</strong> força.És probable que sigui indiferent <strong>de</strong> quina manera ens acostem a ELLA, el que té rellevància és saber estarhia prop.Si els déus <strong>de</strong> la música ens atrapen estem d’una gran sort, la seva companyia ens és grata <strong>de</strong> per vida,ens vénen al rescat en els moments foscos, ens enlairen en la gresca, ens milloren la nostra plasticitatcerebral i ens eixamplen el ventall <strong>de</strong> colors existents.“Tout doit sur Terre, Mourir un jour. Mais la musique, Mais la musique, Mais la musique,Vivra toujours”.Cançoneta francesa.38KANDINSKYA<strong>de</strong>más <strong>de</strong> enseñar, enseña a dudar <strong>de</strong> lo que enseñas. (Ortega i Gasset)
REFLEXIONSDEL VIEJO EL CONSEJOELENA REVILLAHay quien dice que hay refranes para todo, ésto es, para apoyar con tanta firmeza una afirmación como lacontraria. Así, po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r con la misma vehemencia que al que madruga Dios le ayuda y que no pormucho madrugar amanece más temprano. Siempre he pensado que, bajo esta aparente contradicción, seguíaocultándose una sabiduría ancestral algo indómita y <strong>de</strong>svergonzada, nacida <strong>de</strong> la pura observación y<strong>de</strong>l tiempo. Des<strong>de</strong> esa óptica, la existencia <strong>de</strong> refranes contradictorios para un mismo suceso no hace másque <strong>de</strong>mostrar que cada situación pue<strong>de</strong> ser analizada <strong>de</strong>s<strong>de</strong> diferentes ángulos con conclusiones que, lejos<strong>de</strong> ser opuestas, <strong>de</strong>vienen complementarias, mostrándonos así el peligro <strong>de</strong> simplificar nuestra percepción<strong>de</strong> la realidad. Pero basta ya <strong>de</strong> ro<strong>de</strong>os y centrémonos en el refrán que nos ocupa. “Del viejo el consejo”.Creo que nadie en su sano juicio se atrevería a discutir que la experiencia es, en sí misma, una fuente<strong>de</strong> conocimiento. Hoy, por ejemplo, conocemos al senado como un órgano <strong>de</strong> representación <strong>de</strong>l puebloconstituido por hombres y mujeres elegidos <strong>de</strong>mocráticamente. Pero, a pesar <strong>de</strong> su larga transformaciónhistórica, en el nombre oculta su auténtico origen. “Senātus” comparte su etimología con senil, senectud,sénior, es <strong>de</strong>cir, sen, “viejo” y, en su sentido más ancestral, correspondía al consejo <strong>de</strong> los ancianos. Delos que más saben. De los que han logrado sobrevivir y, por tanto, han <strong>de</strong>mostrado sus capacida<strong>de</strong>s. Delos mejores. De la memoria viva <strong>de</strong> un pueblo. ¿Pero, a quién le interesa éso ahora? Cuando senectud seha convertido en un sinónimo <strong>de</strong> <strong>de</strong>crepitud, un viejo no es más que un problema. En la calle, es una piezapoco propensa a caer en el consumo <strong>de</strong>senfrenado, que parece ser una parte esencial <strong>de</strong> nuestra manera<strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r el mundo, y en las instituciones ¿qué pasa en las instituciones? ¿Está bien consi<strong>de</strong>rado unprofesor mayor que ya no se maneja con you tube? ¿Y un trabajador <strong>de</strong> más <strong>de</strong> 50 años? ¿Y un médico?¿Qué pasa con un médico? Por supuesto, no tengo respuesta pero me atrevería a aventurar que variaríamucho en función <strong>de</strong>l encuestado. Tengo la sensación <strong>de</strong> que el paciente sabe apreciar en las actuaciones<strong>de</strong> su médico la impronta que <strong>de</strong>jan muchos años <strong>de</strong> vuelo. De haber vivido diferentes enfoques, <strong>de</strong> losmuchos planes sanitarios <strong>de</strong>jados atrás, <strong>de</strong> las modas, <strong>de</strong> los nuevos fármacos, <strong>de</strong> los viejos, <strong>de</strong> los quefuncionaron, <strong>de</strong> los que prometían soluciones y no <strong>de</strong>jaron nada, <strong>de</strong> un jefe, <strong>de</strong>l otro, <strong>de</strong> un gobierno, <strong>de</strong>una política sanitaria, <strong>de</strong> la otra, <strong>de</strong> una ilusión realizada, <strong>de</strong> otras tantas frustradas, <strong>de</strong> una vida vivida. Detanto como pue<strong>de</strong> concentrarse en un momento, en una <strong>de</strong>cisión, entre un paciente y su médico. Pero notengo nada claro lo que significa todo ello para la institución y, a tenor <strong>de</strong> lo que observo en nuestros hospitales,más bien me atrevería a <strong>de</strong>cir que constituye un estorbo. La memoria acumulada, la experiencia, lavisión crítica, a la par que comprometida, <strong>de</strong> muchos <strong>de</strong> nuestros profesionales más mayores es vivida aAl amigo seguro, se le conoce en la ocasión insegura. (Fedro)39