84 - Revista Personae

GLORIA PéREZ jáCoME
Periodista predestinada
- No sólo lee noticias, forma el noticiero y sale a la calle a reportear
- Periodista que no sale a la calle, no es periodista, se vuelve de estudio
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Simplemente era otra forma
de hacer las cosas.
Si yo hubiera estado en ese
instante, habría dicho ¡No!
No habría conocido la otra
parte, la de ahora.
Ahora me gusta mucho más.
Pero, ¿eh?, hay mucho más
compromiso.
Antes era mucho más fácil
porque no tenías la oportuni-
dad de la confrontación
Por PAtrICIo Cortés | fotografía ENrIqUE hUErtA LArA
n punto de las tres irrumpe en los hogares para dar las noticias de la
tarde. Bella e inteligente como pocas, selecciona, junto con su compañero
Jorge Zarza, la información que dará a conocer en Hechos
Meridiano.
Gloria Pérez-Jácome llegó, según cuenta, por casualidad a la
televisión. Estar frente a las cámaras no le atraía. Egresada de la carrera de Administración
de Empresas Turísticas, ocupaba un puesto de administración pública
cuando hermana Lorena la invitó a conocer la infraestructura de TV Azteca de
cuyos noticieros era reportera. Ahí conoció algunos reporteros y comentaristas
deportivos a quienes sorprendió gratamente charlar con una mujer bella conocedora
del tema. Debido a ello le insistieron integrarse a Azteca Deportes. Inició su
vibrante, dinámica, carrera.
Empero, es menester subrayar que los medios de comunicación no le eran
ajenos, debido a la actividad de su padre, el destacado político Dionisio Pérez-
Jácome, a quien acompañaba frecuentemente testificando cotidianamente las
entrevistas fortuitas y en conferencia de medios que los reporteros le hacían a su
padre. Desde entonces, el periodismo era para ella cosa familiar.
Por supuesto, ahora, del otro lado, su percepción del trabajo periodístico ha
cambiado: -“Cuando veía las entrevistas que les hacían a mi papá o a un amigo yo
decía: ‘Ese periodista, qué mala onda’. ‘¿Por qué preguntan eso?’,
claro, estaba del otro lado. Ahora que estoy de este, pues… ni modo. No me gusta
ser agresiva, pero una tiene que ser incisiva. Tú vas, buscas la nota y la verdad. No
buscas quedar bien con nadie. Cuando estás del otro lado esperas que te echen
la mano, que queden bien contigo; pero de este lado, no puedes quedar bien con
nadie. No puedes tener intereses, ni de un lado, ni del otro. Entonces, pues, a veces
no caes bien a la gente”.
No obstante, aclara, percibe un gran cambio entre aquella prensa que
conoció en los círculos políticos de su padre y esta prensa a la que pertenece:
-“Era una prensa muy diferente. Cuando yo viví toda esta parte de la política con mi
papá, no había la apertura que hay ahora. Era una prensa con censura, no había la
libertad de expresión que tenemos hoy en México.
“Entonces, yo me acuerdo de las primeras veces que yo vi a mi papá en la tele,
que lo llegué a acompañar a entrevistas con don Jacobo Zabludovsky, era
otra cosa. Yo no juzgaría nunca ese tipo de periodismo, pero sí creo que la situación
política del país era muy diferente. Entonces la gente no se atrevía, los medios no se
atrevían hablar de la oposición, no se atrevían a criticar al gobierno. ¡Jamás!”
-¿Habrías sido periodista si las cosas siguieran igual?: -“Yo creo que si, porque
ahorita veo cómo cambiaron. Muchos que empezaron en esa época son grandes,