LA CLÍNICA Y LA MEDICINA INTERNA APUNTES HISTÓRICOS Y PROYECCIONES ...
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RESUMEN<br />
La clínica y su práctica, como aspectos que se incluyen en la propia esencia de nuestra profesión, continúan<br />
acaparando en buena medida la atención de los médicos.<br />
No se intenta presentar aquí una historia detallada ni acabada de la clínica desde la antigüedad, sino llamar la<br />
atención y estimular el debate, sobre cómo se han ido entrelazando acontecimientos y personas -los que<br />
consideramos principales, imposible abordarlos todos-, que conforman la práctica de la medicina clínica, en el tiempo,<br />
con ejemplos que ilustran los avances que se han producido de manera más o menos coherente en las diferentes<br />
sociedades a lo largo de los años, en la consecución de un propósito principal: la atención médica individual de las<br />
personas.<br />
Se combina el método histórico, aportando gran cantidad de elementos que han caracterizado los principales jalones<br />
del desarrollo de la Clínica y la Medicina Interna, con una serie de enfoques, opiniones y comentarios propios, frutos<br />
tanto de la profundización en el tema por el autor, como de su larga experiencia en la práctica de la Medicina Interna.<br />
La medicina individual moderna comienza en el siglo XIX. Sin embargo, durante muchos años sólo se concebía la<br />
práctica clínica total: la medicina general. El médico debía “saber de todo”, sin fronteras, pues se enfrentaba a los más<br />
variados problemas de salud que pudieran presentar sus enfermos. Además, la mayoría de las veces solamente<br />
“acompañaba” a sus pacientes –lo que siempre ha sido muy valorado por los enfermos y sus familiares-, pues las<br />
terapéuticas realmente eficaces eran muy escasas.<br />
A fines del siglo XIX se inició el desgajamiento de la clínica –y de la cirugía- con la aparición de nuevas<br />
especialidades médicas. A diferencia de otras especialidades, bien definidas para todos desde sus inicios, tanto en lo<br />
conceptual como en la esfera de su actuación, no ha sucedido lo mismo con la Medicina Interna, a pesar del papel<br />
destacado que la misma siempre ha jugado en los éxitos alcanzados en el incremento de los niveles de salud de la<br />
población. Incluso, su propia existencia como “especialidad” tal parece que siempre ha estado en peligro.<br />
La Medicina Interna es la única especialidad que ha acogido la tradición clínica más “pura” e incluso la ha mantenido<br />
y desarrollado al máximo. El clínico ha sido considerado el médico por excelencia y el internista, el ejemplo vivo del<br />
clínico.<br />
En los países, como Cuba, donde los internistas y el "internismo" se han mantenido contra viento y marea, los<br />
internistas han jugado un papel importantísimo en el desarrollo del Sistema Nacional de Salud. La Medicina Interna no<br />
ha abandonado la primera línea del combate asistencial-docente cotidiano y los que la practican han estado<br />
sometidos, durante las cuatro décadas pasadas, al peso de una excesiva presión y responsabilidad.<br />
Metodológicamente, los internistas también han encabezado la atención integral del adulto.<br />
Pero la Medicina Interna ha tenido, además, como ninguna otra especialidad, una extraordinaria responsabilidad en la<br />
formación de nuevas generaciones de médicos. No sólo en cuanto a los problemas relacionados con la educación<br />
científico-técnica, sino en la formación laboral, moral, patriótica, es decir, integral de los futuros profesionales de la<br />
salud.<br />
Sin embargo, se ha llegado a una crisis del método clínico, que tiene consecuencias preocupantes en nuestra profesión.<br />
La crisis gira, sobre todo, alrededor de los siguientes aspectos: deterioro de la relación médico-paciente, menosprecio de<br />
valor del interrogatorio y del examen físico, sobrevalorando de la función de la tecnología y desinterés creciente por las<br />
especialidades de Medicina Interna y de atención primaria. Se exalta la enseñanza especialmente útil para los<br />
estudiantes de medicina y médicos jóvenes, grupos principales a los que va dirigido el trabajo y que contrasta con la<br />
lamentable gran cantidad de embates que han sufrido en nuestros días, la clínica, la medicina y, concretamente, la<br />
relación médico-paciente.<br />
PA<strong>LA</strong>BRAS INICIALES<br />
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