08.05.2013 Views

Untitled - Libr@rsi

Untitled - Libr@rsi

Untitled - Libr@rsi

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

o<br />

— 34:<br />

dio con bravísimas palabras, y no bastando csíc medio para reprimir<br />

el atrevimiento de una de ellas, ó mas apasionada ó mas desenvuelta,<br />

la apartó de sí con un golpe. Otro mas feliz, solicitado de una donce-<br />

lla de noble nacimiento, no solo resistió al doble atractivo de la espe-<br />

ranza V la hermosura, sino que extraordinariamente favorecido de la<br />

gracia, hizo delante de ella al Señor voto de perpetua virginidad, y á<br />

ella le persuadió ([iie imitase un acto tan heroico tomando por es-<br />

poso á Jesucristo en un religiosísimo monasterio.<br />

Esta fortaleza es mucho mas admirable en personas del sexo, y m"- Ejemplos do<br />

'<br />

.<br />

.<br />

virtud en los<br />

, ,<br />

,.<br />

,<br />

,.<br />

cho en la pusilannmdad y flaqueza de las indias, especialmente soh- indios de San<br />

citadas de los españoles, á quienes la reverencia y el temor á que se a- Gregorio de<br />

-^<br />

' '<br />

costumbraron desde los principios de laconquista les hace mirar siempre<br />

como los arbitros de su fortuna. Sin embargo, sostenidas de la divina<br />

_<br />

. . Icpotzoilan.<br />

gracia las indias débiles han conseguido gloriosísimas victorias. Diez<br />

y nueve años resistió una que frecuentaba los sacramentos en S. Gregorio<br />

de México á las dádivas, á los ruegos y á las amenazas de una<br />

persona de grande autoridad, que pudiera atraerle mucho mal, y que<br />

por las obligaciones de su estado, debiera darle ejemplos muy contra-<br />

rios. Otra, hallándose sola en despoblado, y acometida de un lascivo,<br />

no bastando sus razones y sus ruegos para apagar el fuego de aquella<br />

brutal pasión, se quitó el rosario que traia al cuello con una medalla<br />

de la reina de las vírgenes, y poniéndosela á los ojos, le dijo con vehe-<br />

mentísimo afecto: For amor de la Virgen Sanlísima, cuyo<br />

rosarlo es<br />

este, te suplico, ScTior, que me dejes y no quieras hacerme tan grave in-<br />

juria. Esta tierna súplica fue un rayo que<br />

hizo hacer volver en sí á<br />

aquel malvado. No solo dejó libre á la virtuosa doncella, sino que dan-<br />

dolé cuanto llevaba por el respeto y, reverencia al augusto nombre de<br />

que se había valido, él, tocado de la reina del cielo, á quien había hecho<br />

aquel pequeño obsequio después de veinte años de una vida desar-<br />

regladísima, se entró por un monte pidiendo al Señor misericordia, y á<br />

la Virgen madre que lo sacase de aquel estado infeliz, aunque fuese á<br />

costa de una enfermedad ó de algún trabajo. Oyó la piadosa Virgen<br />

sus ruegos, y quitándole la vista del cuerpo le dio la del alma, trayéndole,<br />

después de muchas inquietudes á nuestro coleoío, donde hizo una<br />

confesión general. Pasó este fervoroso penitente, después de grande<br />

pobreza y penalidades; pero con una tranquilidad y una alegría que<br />

causaba admiración, recibiéndolas todas, y principahnente la cegucdi.d,<br />

como otras tantas prendas de la remisión de sus culpas y de la gloría

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!