YANET CERVANTES – LORENZO LUÉVANO - Volviendo a la Biblia
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Refutación: Lo interesante del caso es que tanto Hank Hanegraff, como Jorge<br />
Erdely, son miembros de una secta. Las definiciones de Hank Hanegraff, por<br />
ejemplo, encajan perfectamente con <strong>la</strong> iglesia que fundó Jorge Erdely, donde él<br />
y algunos otros “iluminados”, son los líderes que manejan y mueven <strong>la</strong>s<br />
conciencias de quienes les siguen. Conozco a varios que han sido parte de su<br />
grupo, y he notado que entre ellos, hay doctrinas anti bíblicas. Por otra parte,<br />
¿en qué le justifica <strong>la</strong>s definiciones sociológicas? En nada, pues <strong>la</strong> definición<br />
bien puede indicarle a usted que no es una secta, pero, ¿de qué vale dicho<br />
dictamen, siendo que Dios dice lo contrario? Luego, <strong>la</strong> definición sociológica, no<br />
es sino el concepto errado de los hombres, pero no el de Dios.<br />
Yanett escribió:<br />
3.- Lo que dice La <strong>Biblia</strong>.<br />
Veamos ahora el sentido que se le da a esta pa<strong>la</strong>bra de acuerdo con <strong>la</strong> <strong>Biblia</strong>:<br />
Contrario a lo que muchos creen, esta pa<strong>la</strong>bra es escritural. Se usó en algunos pasajes para<br />
definir <strong>la</strong>s diferencias entre <strong>la</strong>s diferentes posturas doctrinales que imperaban entre los<br />
seguidores de <strong>la</strong> tradición judía. Solo que en uno de estos casos, quien <strong>la</strong> usa <strong>la</strong> aplica a su<br />
propio grupo, es decir, no <strong>la</strong> usa para definir como falsa a una corriente diferente, como<br />
usted lo hace. Veamos:<br />
A los saduceos se les consideraba una secta (Hch. 5:17), lo mismo que a los fariseos (Hch.<br />
15:5; 26:5). Pero lo interesante aquí es que en este contexto histórico, el cristianismo<br />
también fue considerado como una secta (Hch. 24:5).<br />
Refutación: Desde luego que los saduceos y los fariseos eran sectas. Ambos<br />
grupos tenían grandes diferencias doctrinales muy serias, y dividía el sistema<br />
religioso judío. ¿Eran los Cristianos una secta? No, aún cuando así lo pensaban<br />
los judíos. Ellos pensaban que <strong>la</strong> iglesia que Cristo fundó era una división del<br />
judaísmo, pero tal cosa era falsa. Los judíos pensaban que <strong>la</strong> iglesia era otro<br />
grupo como los saduceos y fariseos, pero tal cosa era falsa. Luego, son los<br />
judíos, y no los Cristianos, los que l<strong>la</strong>man secta a <strong>la</strong> iglesia, lo cual no muestra<br />
otra cosa, sino otro de los muchos errores que los judíos tenían.<br />
Yanett escribió:<br />
Dialogo Yanet-Luevano sobre <strong>la</strong> salvacion, el diezmo y <strong>la</strong> iglesia bautista<br />
Bajo <strong>la</strong> definición “mundana” de <strong>la</strong> pa<strong>la</strong>bra secta, se considera una ofensa definir a un grupo<br />
religioso como tal, pero bajo el concepto y el contexto histórico que se presenta en <strong>la</strong> <strong>Biblia</strong>,<br />
pues queda c<strong>la</strong>ro que todo movimiento que se deriva de otro es en sí una secta. Si<br />
hab<strong>la</strong>mos del cristianismo, o cristiandad, para ser exactos, tanto su iglesia como todas <strong>la</strong>s<br />
demás denominaciones son sectas, es decir, “un conjunto de creyentes que se diferencian<br />
de otra”. Al diferenciarse usted de <strong>la</strong>s denominaciones “cristianas”, esta usted constituyendo<br />
una “secta” mas.<br />
Refutación: La iglesia que Cristo fundó no es una secta. No se ha “derivado” de<br />
otras, ni del judaísmo, ni del catolicismo, o de algún otro movimiento<br />
protestante. Desde luego, <strong>la</strong> definición del diccionario podrá decir que soy parte<br />
de una secta, pero, ¿qué importa? Lo importante es lo que dice <strong>la</strong> verdad, y <strong>la</strong><br />
verdad, según Dios, es que usted, mi estimada, es una secta, es parte de un<br />
grupo hereje que promueve doctrinas contrarias a <strong>la</strong> voluntad de Dios. Luego,<br />
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