YANET CERVANTES – LORENZO LUÉVANO - Volviendo a la Biblia
YANET CERVANTES – LORENZO LUÉVANO - Volviendo a la Biblia
YANET CERVANTES – LORENZO LUÉVANO - Volviendo a la Biblia
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
¿Insistirá en seguir cambiando el orden?<br />
5.- Termino mis comentarios a este tema haciendo una última reflexión. De acuerdo a lo<br />
que usted ha escrito, uno de los dos separa <strong>la</strong> fe y <strong>la</strong> gracia de <strong>la</strong>s obras. Según usted,<br />
soy yo. Pero yo veo que quien lo hace en es apóstol Pablo, ya que c<strong>la</strong>ramente dice que <strong>la</strong><br />
salvación:<br />
Es pos medio de <strong>la</strong> fe<br />
No por obras.<br />
¿No <strong>la</strong>s está separando? Ahora bien, no estoy diciendo que no debemos hacer buenas<br />
obras ni obedecer, pero esto lo hacemos no para ser salvos, pues ya vimos que no es por<br />
obras que somos salvos, sino porque ya somos salvos es que podemos ser obedientes.<br />
Si fuera como usted dice:<br />
• La fe nos hace obedecer.<br />
• La salvación se obtiene por se obedientes.<br />
¿Dónde quedó <strong>la</strong> Gracia? Recuerde que <strong>la</strong> Gracia es <strong>la</strong> obra de Dios en Jesucristo. Le<br />
recuerdo también que Ef. 2:8 dice que “Por gracia sois salvos...” Según usted, no<br />
podremos alcanzar <strong>la</strong> Gracia y <strong>la</strong> Salvación sin antes ser obedientes. ¿Es eso correcto?<br />
Vea una vez más este cuadro:<br />
La salvación, que es por gracia, es gratuita. Nada dice de obediencia para ser salvos.<br />
Solo dice “por gracia”. Pero Dios no nos obliga. Por eso es necesaria <strong>la</strong> fe. Pero aún así,<br />
<strong>la</strong> Obediencia (o buenas obras) sigue bril<strong>la</strong>ndo por su ausencia hasta el versículo 10 y<br />
nunca se presenta como “condicionante” para <strong>la</strong> salvación, sino como resultado de <strong>la</strong><br />
misma.<br />
Así como un árbol muerto no puede dar fruto, del mismo modo, una fe muerta no puede<br />
dar o producir buenas obras. Una vez que hemos ejercido fe, una fe no fingida, sino<br />
genuina, podremos andar en buenas obras. Pero que quede c<strong>la</strong>ro que lo que nos hizo<br />
salvos fue <strong>la</strong> gracia y <strong>la</strong> fe genuina, no <strong>la</strong>s obras.<br />
Conclusión.<br />
Santiago dice que no es posible mostrar <strong>la</strong> fe sin <strong>la</strong>s obras (aquí esa donde entra el<br />
ejemplo de Abraham), pero al mismo tiempo está diciendo que es imposible tener fe y<br />
no tener obras, ya que es con <strong>la</strong>s obras con <strong>la</strong>s que mostramos nuestra fe (ver: Stgo.<br />
2:18). Pero dejó bien c<strong>la</strong>ro que es <strong>la</strong> fe <strong>la</strong> que nos hace salvos, siempre y cuando no sea<br />
una fe muerta, ya que es por medio de <strong>la</strong> fe tenemos acceso a <strong>la</strong> Gracia de Dios.<br />
Yanet Cervantes.<br />
Dialogo Yanet-Luevano sobre <strong>la</strong> salvacion, el diezmo y <strong>la</strong> iglesia bautista<br />
69