12.05.2013 Views

Untitled - Concursos de Cuentos

Untitled - Concursos de Cuentos

Untitled - Concursos de Cuentos

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Al otro día, aparecía un señor saludando muy atento y diciendo que venía por la invitación que<br />

le habían hecho el día anterior. Para qué les cuento el sustito que se llevaban ante esta inesperada<br />

visita. Esta creencia aún persiste no sólo en el campo, sino también en la ciudad.<br />

Ajenos a lo que había sucedido, empezamos a conversar con don Rosa, preguntándole qué se había<br />

hecho que tanto tiempo no nos visitaba. Él nos regaló unos dulces que para nosotros eran un tesoro<br />

y empezamos a comerlos mientras él nos empezó a contar el motivo <strong>de</strong> su alejamiento. Y así empezó<br />

la conversación con nosotros: “Miren, chiquillos, dijo en forma pausada, resulta que yo no estuve<br />

por aquí ya que me llevaron a Melipilla por algo que yo hice y que fue algo que nos favorece a todos,<br />

porque nos libramos <strong>de</strong> algo malo que había por aquí. Con esta respuesta nosotros quedamos más<br />

interesados en la conversación que sosteníamos. ¿Qué sería lo que había hecho nuestro amigo?<br />

Bueno, él prosiguió su relato. Miren, pa’llá tras, pa’l lado <strong>de</strong>recho don<strong>de</strong> se ve la tercera casa, resulta<br />

que ahí vive una bruja que a muchos le ha hecho males. A mí me había echado un mal que<br />

me mantenía enfermo, en todo me iba mal y alcanzó hasta los animales y las aves, los que se me<br />

empezaron a morir. Mi mamita también se enfermó y no había manera <strong>de</strong> curarla. La bruja le<br />

había echao un mal malo y la tenía postrada en cama, lo mismo me sucedía a mí; toíta mi familia<br />

estaba enferma y en la ruina por culpa <strong>de</strong> esta maldita vieja bruja”.<br />

Con este relato, nosotros quedamos perplejos y empezamos a preguntarnos quién sería esa bruja<br />

que <strong>de</strong>cía nuestro amigo Rosa. Sabíamos que en la tercera casa vivía una señora ya <strong>de</strong> edad, que<br />

permanentemente andaba vestida con faldas largas, casi siempre <strong>de</strong> color plomo, con unas largas<br />

trenzas y caminaba afirmándose en un palo que utilizaba como bastón. Ella vivía al otro lado y<br />

como que le agradaba nuestra presencia. ¿Sería esa la bruja <strong>de</strong> la que hablaba don Rosa?<br />

Volviendo a la conversación con don Rosa, le preguntamos si esa señora sería la vieja bruja <strong>de</strong> la que nos<br />

hablaba. Gran<strong>de</strong> fue nuestra sorpresa al confirmarnos que sí, que esa era la vieja bruja, pero que ya no<br />

tuviéramos miedo ni cuidado, pues él había hecho un buen trabajito para que se le fueran los po<strong>de</strong>res.<br />

La pregunta surgió <strong>de</strong> inmediato por parte <strong>de</strong> nosotros ¿Y cuál fue ese trabajito, don Rosa?<br />

Gran<strong>de</strong> fue la sorpresa que nos llevamos, cuando don Rosa se da vuelta y empieza a hurgar, buscando<br />

algo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> su carretela para mostrarnos y convencernos <strong>de</strong> que lo que él <strong>de</strong>cía era verdad.<br />

Sacó un diario <strong>de</strong> la época medio doblado y lo estiró. Era el Diario o Periódico “Las Noticias<br />

Gráfica”, en don<strong>de</strong> aparecía toda la historia <strong>de</strong> lo que había sucedido, incluidas fotos <strong>de</strong> él y <strong>de</strong> lo<br />

que había hecho.<br />

8

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!