Retos y Dilemas de la Representación Política - Informe sobre ...

a las ideología marxista de décadas anteriores, que, en cierta medida, desplazan a las viejas
corporaciones del pasado, no debe ser visto como una negación de nuestra democracia. Al
contrario, la diversificación de actores no es algo que hiera a la democracia, más bien la
enriquece El despliegue de la pluralidad es también un signo básico del enriquecimiento
democrático.
¿Será un problema que los partidos se fortalezcan en Bolivia? Quizás lo es si se
convierten en los únicos actores de la política, pero no lo será si al mismo tiempo se fortalece
la sociedad civil, no siempre bajo códigos corporativos, sino con dimensiones que rescaten
la presencia ciudadana. Todavía no se conocen democracias avanzadas que operen sin la
presencia de partidos, por ello, el desarrollo y fortalecimiento de los partidos es una
necesidad, pero también lo es su modernización y democratización.
En el desarrollo de una sociedad plural, con una diversificación de los actores
sociales, es cada vez más difícil exigirle a un partido que exprese de forma exclusiva a un
grupo organizado o a una identidad. En el pasado, bajo la óptica clasista de comprensión,
ése era el reto partidario. Hoy la representación es más compleja. Por un lado, el partido
debe cubrir el desafío de representar a muchas y diversas identidades y, por otro, tiene el
reto de representar al ciudadano, a ese sujeto difuso, que es el centro de la democracia.
Uno de los enfoques más frecuentes de quienes analizan los problemas de
representación en Bolivia es que, remitiéndose a esta historia política, descubren que antes
la representación política estaba muy ligada a la representación social. Así sucedía con el
movimiento sindical que, no cabe duda, era una modalidad de representación social. Gracias
al déficit de democracia representativa y la debilidad de los partidos, el sindicato también
actuaba cumpliendo funciones de representación política, más aún si recordamos que éste
se entendía a sí mismo como partido político e instrumento revolucionario. Ahora que los
sindicatos se vinieron abajo y los partidos son más importantes, no deja de haber quienes
rescatan el pasado con nostalgia y desean que los movimientos sociales organizados, en
especial los sindicatos, sigan siendo la forma de representación política de las identidades
populares. Pero la historia política de hoy parece dificultar la reedición de esto que fue
dominante en el pasado. Por tanto, la representación, con todas las deficiencias de las
organizaciones políticas, parece cargarse hacia el lado partidario.
Bases de la Participación popular
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Si en Bolivia algún proceso se dirige a romper lo que antes eran sólo los códigos
corporativos y centralistas que marcaron nuestra política, es el de la Participación Popular.34
34 Sobre este tema, ver: Secretaría Nacional de Participación Popular, El Pulso de la Democracia. Editorial
Nueva Sociedad, Caracas, 1997. También Rojas, Gonzalo; Verdesoto, Luis. La Participación Popular como
Reforma política. Secretaría Nacional de Participación Popular. La Paz, 1997. También, Rojas, Gonzalo (Ed.)
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