El Vértigo de los Aires - Asociación de escritores de México

2.- Ocupar el espacio tecnológico para desarticularlo
Por otro lado, atendemos la prolongación –deterioro o mejora– de los sentidos mediante
una serie de dispositivos neomediales 4 con los cuales el creador de entidades
poéticas puede presentar una cierta realización de su palabra. Éstos, querámoslo
o no, son espacios que están siendo territorializados por el mercado, sistemas de
hipervigilancia y metodologías predeterminadas, pero también lugares en los que
algo está pasando. Es ahí donde la discusión se aviva, y en la que el poeta debe
intervenir, pues posee el conocimiento contrario para presentar una postura diferente.
Porque es acá donde cabe el esclarecimiento de la incidencia o falta de ella
en determinados territorios públicos. Es decir; el conocimiento que se requiere
para ocuparlos no es menor, pues dichos espacios están regulados mediante una
serie de normas que les hacen particulares y no necesariamente democráticos.
En ellos se define la nueva realidad global, en ellos también la vida concreta y sin
sentido del ser, es decir; su situación política. Si la poesía posee hegemonía –en
los mejores casos– en los territorios de la publicación en papel, vinculados evidentemente
al ejercicio de un poder centralizado que se basa en el documento y
en su archivación –las bibliotecas son un ejemplo evidente de ello–, hoy el panorama
se amplía según la desclasificación de la información y su decodificación en
elementos transmisibles. Porque si bien la desestructuración de este territorio de
hegemonía cultural respecto a la escritura no ha sido superado, la mediación de
los dispositivos apunta a un nuevo horizonte; una fase en la que el problema de
la presencia histórica –que es una relación espacio-temporal de ubicación– será
documentado de una manera distinta.
Cabe para esto hacerse la pregunta de si el espacio virtual será el nuevo filtro de
supremacía mediante el cual se debata la reasignación de espacios físicos. Si bien
hoy nuestros pininos con la tecnología están inundados de candidez y futurología
respecto al control que se avecina y que implica un nuevo tipo de sensibilidad, se
4 Dice José Luis Brea en el libro La era postmedia; acción comunicativa, prácticas (post) artísticas y dispositivos
neomediales: “Finalmente, una cuarta emergencia determinante de las transformaciones contemporáneas del campo
de la imagen, que tiene que ver con el desarrollo actual de sus tecnologías de difusión, de distribución pública. Creo que
puede hablarse de una proliferación sin precedentes de las posibilidades de distribución pública, medial, de la imagen, en la
expansión creciente de nuevos sistemas de “reproducción técnica” que permiten el desarrollo expansivo y efectivo de nuevos
media, como tales.” Consorcio Salamanca. España, 2002.
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