Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
anime inicial tanto en personalidad como en<br />
características físicas. Su protagonista Usagi<br />
Tsukino (Bunny en la traducción española)<br />
sigue siendo, por ejemplo, una chica rubia<br />
de largas coletas y grandes ojos azules que<br />
es bastante torpe, llorona y muy inquieta.<br />
Ami Mizuno (guerrera Mercurio) tiene al igual<br />
que en la primera edición un peculiar pelo<br />
azul y es muy tranquila, inteligente y aplicada<br />
en los estudios. El Guerrero del Antifaz<br />
presenta el mismo atuendo que en la versión<br />
primigenia y continúa burlándose de Bunny<br />
de la misma manera. El resto de personajes<br />
parecen llevar el mismo camino y puede que<br />
varíen en todo caso los villanos a los que deben<br />
enfrentarse las chicas, o las situaciones<br />
en las que aparecen.<br />
Eso sí, se nota un cambio evidente en el<br />
físico de la mayoría de los personajes que<br />
tienden a ser bastante más delgados que en<br />
el dibujo original, lo cual muchos atribuyen<br />
a conseguir un mayor parecido a la versión<br />
manga pero que, en mi opinión, desmejoran<br />
a los personajes que ya antes estaban bastante<br />
estilizados. Los rostros también aparecen<br />
más delgados y los ojos, sobre todo de<br />
las chicas, parecen más grandes. Otro cambio<br />
que puede apreciarse por el momento es<br />
que Bunny ha perdido un poco su sello en lo<br />
que a expresiones faciales exageradas se refiere:<br />
recordemos que antes pasaba de estar<br />
tranquila y presentar un bello rostro a tener<br />
cascadas de lágrimas en la cara o sus ojos se<br />
transformaban en enormes corazones, sobre<br />
todo cuando veía al Guerrero del Antifaz, y<br />
nos habíamos acostumbrado a estos peculiares<br />
y divertidos gestos de la protagonista<br />
que la hacían única.<br />
Sin embargo, el primer episodio muestra de<br />
manera bastante semejante cómo Bunny<br />
encuentra a la gata Luna y ésta le explica<br />
lo que debe hacer y decir para transformarse<br />
en una guerrera y combatir el mal en su<br />
ciudad. Es precisamente en la transformación<br />
de las guerreras (unas de las escenas más<br />
especiales y características de la serie ya<br />
en su primera versión) donde se observa un<br />
cambio en el tratamiento de las imágenes,<br />
puesto que mezcla animación digital y escenas<br />
en CGI. La transformación actual es un<br />
poco más larga que la primera, se le concede<br />
más importancia y presenta bastante más<br />
dinamismo que la original. La música de la<br />
primera versión, es en opinión de muchos<br />
fans entre los que me incluyo, mucho más<br />
acertada y acorde con la escena que la actual,<br />
pero es precisamente este aspecto, el<br />
musical, el que más falla en la nueva versión,<br />
sobre todo en la canción del opening<br />
y en la que cierra el capítulo. Las canciones<br />
actuales tienen menos carga emotiva e impactan<br />
menos que sus predecesoras. El tema<br />
de inicio se titula “Moon Pride“y está interpretado<br />
por Momoiro Clover Z y compuesto<br />
por Revo de Linked Horizon, pero la mayoría<br />
de los seguidores de la serie añora el antiguo<br />
“Moonlight Densetsu” tantas veces tarareado<br />
a pesar de ser menos rítmico que el que<br />
presenta Sailor Moon Crystal. El nuevo tema<br />
de cierre viene también de la mano de Momoiro<br />
Clover Z , su nombre es “Tsuki Niki”, lo<br />
que en español significaría “Arco iris Lunar”<br />
y resulta bastante tedioso, acompañado de<br />
imágenes bellas pero tan lentas que pueden<br />
llegar a aburrir. La música parece ser lo más<br />
criticable de la nueva Sailor Moon, pero para<br />
ser justos hay que tener en cuenta que estábamos<br />
acostumbrados a los temas antiguos<br />
y les teníamos tanto cariño que es lógico<br />
que nos sintamos extraños ante canciones e<br />
imágenes que no se corresponden con lo que<br />
recordamos haber visto y cantado mil veces<br />
y en nuestra memoria estas escenas y melodías<br />
aparecen como más bellas. Asimismo,