Descargar - Club Suizo de Madrid

especial
Escuela Suiza de Barcelona
Con los nuevos tiempos
La reforma de la Escuela Suiza de Barcelona se presenta como un reto
necesario para mantener la calidad docente que la caracteriza.
Por TERESA RYF-ESBERT
Maqueta del anteproyecto
de la nueva Escuela Suiza
de Barcelona, obra de los
arquitectos Robert y Esteve
Terradas, en cuyo edificio
también estarán las
dependencias del
Club Suizo de la
Ciudad Condal.
las casas son más que paredes,
puertas, ventanas. Las
casas ofrecen protección y seguridad.
En las casas nos retiramos
y también convivimos con
otros. Los habitantes diseñan sus
casas, y al mismo tiempo las casas
marcan a sus habitantes. Los edificios
escolares son lugares de intercambio
de opiniones sobre
temas actuales de ámbito mundial
y de la vida en comunidad. Son
lugares de soledad, de juegos en
grupo, de conversaciones entre generaciones.
De esta manera, nuestra
nueva casa será un lugar donde
todos, grandes y pequeños, viviremos
y trabajaremos a gusto». Así
se expresa Toni Wunderlin, director
de la Escuela Suiza de Barcelona,
al hablar del proyecto de
reforma de esta institución.
La remodelación de esta escuela
no está concebida exclusivamente
para adecuar su infraestructura
a la alta calidad de enseñanza
que la caracteriza, sino que responde
a un deseo que va más allá
de lo material, ya que gracias al
nuevo edificio, se recuperará un
centro de encuentro muy significativo.
Un centro de encuentro
de la cultura hispanosuiza creado
con la idea de fomentar el
intercambio no sólo entre los
miembros de nacionalidad mixta
de la escuela, sino también entre
los suizos y los ciudadanos de
la Ciudad Condal. De esta manera,
la reforma permitirá materializar
el deseo de integración de
estas dos culturas, ya que proporcionará
un lugar físico que
dará lugar al enriquecimiento derivado
de todo intercambio.
Ese deseo de integración impregna
por completo el carácter de
la escuela, ya que junto a padres y
educadores, que participan de diferentes
maneras en el proyecto,
también los alumnos se verán involucrados
en la reforma de
su colegio, pues las clases van a continuar
regularmente durante el
tiempo que duren las obras; el hecho
de ser testigos directos les permitirá
vivir el proceso desde su
identificación personal con la escuela,
ese lugar donde habitan durante
tantos y tan importantes
años de su existencia. No resulta
difícil imaginar que será una experiencia
inolvidable, que seguramente
dará lugar a curiosas y
divertidas anécdotas, experiencia
que jamás podrán obtener de libro
alguno...
En consecuencia con este funcionamiento,
la mediateca y la
cafetería previstas han sido concebidas
como lugares públicos, accesibles
también a los usuarios
externos. La mediateca contará
con sectores dedicados a los cinco
idiomas incluidos en el programa
de enseñanza (alemán,
español, catalán, inglés y francés)
y estará dotada con un anexo dedicado
a revistas y un portal de internet.
La cafetería ofrecerá la
posibilidad de ser alquilada para
actos privados.
El enfoque de este proyecto como
centro de encuentro se desarrolla
desde varios puntos de vista
al mismo tiempo: desde un ángulo
filosófico, como hemos visto, fomentará
la integración de las dos
culturas; desde un punto de vista
arquitectónico responde igualmente
al ideal de vincular, ya que
los arquitectos autores del mismo,
los hermanos Terradas, han presentado
un elemento de unión
entre los dos edificios existentes que
consiste en una plataforma-puente
acristalada.
La función de esta plataformapuente
será la de unir la Escuela
Suiza y el Club Suizo, situado hasta
ahora a dos números de distancia
en la misma calle de Alfonso
XII. La nueva sede del Club se
ubicará en la planta baja, junto a
crónicas helvéticas + nexos hispanosuizos / nº 8 / junio 2005 19