humanos en Guatemala Diversidad desigualdad y exclusión
22enofV
22enofV
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
200 | Situación de los derechos <strong>humanos</strong> <strong>en</strong> <strong>Guatemala</strong>: diversidad, <strong>desigualdad</strong> y <strong>exclusión</strong><br />
registrado. De este modo, las decisiones judiciales suel<strong>en</strong> estar basadas <strong>en</strong> la<br />
exist<strong>en</strong>cia de un título registrado a favor de qui<strong>en</strong> reclama la propiedad, aplicando<br />
una lógica civilista y formalista. De esta manera, si una comunidad indíg<strong>en</strong>a carece<br />
de un título que reconozca su propiedad, a pesar de haberla ocupado<br />
históricam<strong>en</strong>te – como es común <strong>en</strong> <strong>Guatemala</strong>- no verá reconocido su derecho, lo<br />
que es contrario a la normativa internacional <strong>en</strong> la materia.<br />
465. La CIDH recibe con satisfacción que se habrían emitido decisiones judiciales que,<br />
recogi<strong>en</strong>do estándares internacionales, amparan derechos de propiedad indíg<strong>en</strong>a.<br />
En concreto, un avance al<strong>en</strong>tador se dio <strong>en</strong> el caso de la comunidad maya kaqchikel<br />
de Chuatutuy o Chuarrancho, la cual interpuso <strong>en</strong> el 2012 un amparo solicitando el<br />
reconocimi<strong>en</strong>to de sus tierras ancestrales, despojadas <strong>en</strong> el 2001 por el RGP a<br />
través de su inscripción a nombre de la Municipalidad, a pesar de que la<br />
comunidad contaba con un título otorgado <strong>en</strong> 1897. La misma Sala habría<br />
amparado un recurso pres<strong>en</strong>tado por ocho comunidades q’eqchíes de Sierra Santa<br />
Cruz <strong>en</strong> El Estor, Izabal, <strong>en</strong> contra del RGP fr<strong>en</strong>te a una inscripción anómala que<br />
impedía el otorgami<strong>en</strong>to del título de propiedad 758 .<br />
466. La jurisprud<strong>en</strong>cia interamericana ha determinado que la propiedad indíg<strong>en</strong>a se<br />
fundam<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> el uso y posesión históricos de las tierras y recursos, y no <strong>en</strong> el<br />
reconocimi<strong>en</strong>to oficial del Estado. En palabras de la Corte Interamericana, “[c]omo<br />
producto de la costumbre, la posesión de la tierra debería bastar para que las<br />
comunidades indíg<strong>en</strong>as que carezcan de un título real sobre la propiedad de la<br />
tierra obt<strong>en</strong>gan el reconocimi<strong>en</strong>to oficial de dicha propiedad y el consigui<strong>en</strong>te<br />
registro” 759 . Asimismo, la Comisión desea <strong>en</strong>fatizar que exist<strong>en</strong> <strong>en</strong> <strong>Guatemala</strong><br />
difer<strong>en</strong>tes sistemas de t<strong>en</strong><strong>en</strong>cia colectiva sobre la tierra y el territorio, que son<br />
producto de los impactos difer<strong>en</strong>ciados e historias particulares por los que han<br />
atravesado <strong>en</strong> el transcurso de los siglos, dando lugar a estructuras distintivas. Así<br />
por ejemplo, las tierras comunales compr<strong>en</strong>d<strong>en</strong> aquellas que pert<strong>en</strong>ec<strong>en</strong><br />
propiam<strong>en</strong>te a comunidades indíg<strong>en</strong>as; las que utilizan las comunidades pero<br />
están inscritas como ejido municipal 760 ; las que <strong>en</strong> forma indivisa ti<strong>en</strong><strong>en</strong> algunas<br />
comunidades formadas a través de lazos de par<strong>en</strong>tesco conocidas como<br />
parcialidades; las que se han formado como condición para acceder a la tierra y al<br />
manejo de recursos naturales, como cooperativas, concesiones forestales<br />
comunitarias, patrimonios agrarios colectivos y empresas campesinas asociativas;<br />
<strong>en</strong>tre otros 761 . En cada región, son muy variables también las formas de<br />
758<br />
759<br />
760<br />
761<br />
GAMAZO, Carolina. La batalla por la tierra. La registradora de la propiedad y la certeza de que nadie pueda<br />
reclamar Tikal. Plaza Pública. 2 de diciembre de 2013.<br />
Corte IDH. Caso de la Comunidad Mayagna (Sumo) Awas Tingni Vs. Nicaragua. Fondo, Reparaciones y<br />
Costas. S<strong>en</strong>t<strong>en</strong>cia de 31 de agosto de 2001. Serie C No. 79, párr. 151. Corte IDH. Caso Comunidad Indíg<strong>en</strong>a<br />
Sawhoyamaxa Vs. Paraguay. Fondo, Reparaciones y Costas. S<strong>en</strong>t<strong>en</strong>cia de 29 de marzo de 2006. Serie C No.<br />
146, párr. 127.<br />
Por ejemplo, según la información recibida, <strong>en</strong> el área Ixil -conformada por Nebaj, Chajul y Cotzal- son<br />
sumam<strong>en</strong>te escasas las comunidades con títulos colectivos, sino que la mayoría de las tierras son ejidos<br />
municipales. Información recibida <strong>en</strong> reunión con FONTIERRAS y SAA el 25 de agosto de 2013 <strong>en</strong> Nebaj,<br />
Quiché.<br />
Grupo Promotor de Tierras Comunales. Resum<strong>en</strong> del Diagnóstico y Estrategia Nacional para el Manejo y<br />
Conservación de Recursos Naturales <strong>en</strong> Tierras Comunales. 5 de octubre de 2006. Información recibida <strong>en</strong><br />
reunión con líderes, lideresas y organizaciones indíg<strong>en</strong>as el 26 de agosto de 2013 <strong>en</strong> Huehuet<strong>en</strong>ango,<br />
Organización de los Estados Americanos | OEA