11.02.2017 Views

He aquí yo estoy a la puerta y llamo - Robert J. Wieland

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

amor, y por lo tanto, no podemos tener verdadera<br />

fe. ¿Es posible que "el ángel" de <strong>la</strong> Iglesia esté<br />

destituido de "un amor tal como el que moraba en<br />

el corazón de Cristo"?<br />

Sí. Así es, según <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras del Testigo fiel y<br />

verdadero. Es cierto que cuesta creerlo, pero<br />

veamos más de cerca el asunto. Hay dos nociones<br />

opuestas sobre el "amor". Una proviene del<br />

helenismo, y es el tipo de "amor" sobre el que está<br />

basado el cristianismo evangélico popu<strong>la</strong>r. La otra<br />

es totalmente distinta, y es el tipo de amor que sólo<br />

puede tener su origen en el ministerio del<br />

verdadero Sumo Sacerdote, en su obra de<br />

purificación del santuario celestial. (Primeros<br />

Escritos, p. 55,56).<br />

La amonestación de nuestro Señor resulta<br />

desconcertante e incomprensible cuando ignoramos<br />

lo que es realmente el amor. ‘¿Por qué dice "amor",<br />

si ese es precisamente mi punto fuerte? Sé<br />

positivamente que quiero a mis seres amados y a<br />

mis hermanos. ¿Qué más me falta?’ Los corazones<br />

pagados de sí mismos no sentirán <strong>la</strong> necesidad, y<br />

116

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!