Revista YOGA + 74

y lentamente, con el paso de los años, como usted continuó
haciendo una “vida aparentemente normal”, esa vieja
herida fue silenciosamente empeorando, sin que usted se
haya dado cuenta, hasta llegar a ser realmente dolorosa e
insoportable. Junto con la ignorancia del dolor, están los
tradicionales medicamentos analgésicos, anti-inflamatorios
e incluso la cirugía, que en muchos casos producen
sólo un alivio temporal, sin corregir la verdadera causa
de su problema, lo que explica por qué usted continúa sufriendo.
¿Desaparecerá el dolor de espalda por sí mismo?
Hasta ahora los investigadores creían que el dolor de espalda
se “curaba” solo.
Hemos comprobado, sin embargo, que esto no es verdad.
Un estudio reciente demostró que cuando el dolor lumbar
no se trata, puede irse temporalmente, pero la mayoría de
las veces vuelve.
El estudio reveló que en más del 33% de las personas que
padecen de dolor lumbar, éste dura más de 30 días. El 9%
de las personas que tuvo dolor lumbar durante más de 30
días tardó cinco años en librarse de él.
Otro estudio analizó toda la investigación disponible en
la historia del dolor de espalda. Los resultados mostraron
que cuando es ignorado, el dolor no se va por sí mismo.
Estos estudios demuestran que ese dolor de espalda continúa
afectando a las personas durante períodos largos,
desde que surgió por primera vez.
Cuando investigamos un poco
sobre los signos y síntomas
que genera un dolor de espalda
baja, puede sorprender
al paciente que varios
de los padecimientos que
sufre tienen su origen en
este dolor lumbar. Así
es que dolores propios
del período en las mujeres
generan problemas
lumbares, problemas intestinales,
renales… todos pueden
generar dolor bajo. Claro está que las
causas y orígenes de este tipo de dolencia
pueden ser variadas.
No obstante coincide que la calidad de
vida se deterioró, el descanso no es bueno
y el factor recuperador que el sueño genera
no se suele llevar a cabo. Paulatinamente
iremos creciendo en nuestras disfunciones,
tanto físicas como orgánicas, para así llegar a
una disfunción estresante en donde el factor
mental también se verá afectado; es que si los
enfoques aplicados para solucionar el padecimiento
no dan resultados, realmente se torna
angustiante, así es entonces que un dolor lumbar
tendrá tanto causas físicas como mentales.
Una alternativa puede ser la búsqueda de un
enfoque natural para esta condición, ya que se
entiende que sólo corrigiendo la compresión
sobre el nervio que genera dolor -pero también
disfunción del órgano y/o sistema- se podrá
ser efectivo con el cuidado quiropráctico.
No nos podemos acostumbrar a un dolor crónico, no lo
podemos padecer para siempre.
Los movimientos sanadores
Movimiento de cervicales: llevar el cuello hacia atrás lentamente,
10 repeticiones (si marea, hacerlo sentado). Realizar
círculos con la cabeza, 10 repeticiones.
Llevar el mentón al hombro. 1º repeticiones para cada lado.
Juntar las palmas por delante y contraer la espalda, glúteos
y piernas. 10 repeticiones.
Movimiento de tronco: sentado. Brazos extendidos a los lados.
Hacer pequeños círculos, 10 repeticiones hacia delante.
10 repeticiones hacia atrás.
Elevación de brazos por sobre la espalda recta. Flexionar el
tronco hacia adelante. Tomarse de los pies, y tirar suavemente.
10 repeticiones.
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