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66 ■ Sociedad MAYO’07
SANTOMERA CONTRA EL CÁNCER
Oncoprevención (y IV)
Junta Local de la aecc
En los tres números anteriores
hemos hablado de la prevención
del cáncer desde la nutrición,
los estilos de vida y el
medio ambiente; el último pilar
de la oncoprevención, que
vamos a tratar en esta ocasión,
es la quimioprevención (los
medicamentos).
¿Puede una pastilla evitar
el cáncer?
Ésta es la pregunta que se
planteó tras observar la aparente
protección frente al desarrollo
de tumores colorrectales
de ancianos que habían tenido
por costumbre a lo largo
de su vida tomarse una aspirina
al día. El papel quimiopreventivo
de la aspirina se ha estudiado
después en numerosos
estudios que han
propuesto varios mecanismos
por los que el ácido acetilsalicílico
ejercería ese efecto. Sin
embargo, ni la dosis idónea ni
el tiempo necesario de tratamiento
para que empezara a
hacer efecto están establecidos.
Algo que también ocurre
con el resto de fármacos con
potencial oncopreventivo.
A casi todos los miembros
de la familia de la aspirina, los
antiinflamatorios, se les ha intentado
demostrar un papel en
la protección del cáncer. Así,
los AINE (antiinflamatorios no
esteroideos) se han evaluado
en diferentes estudios en poliposis
adenomatosa familiar y
los últimos en incorporarse, los
selectivos Coxib, se evalúan actualmente
para este fin en un
ensayo clínico que lleva a cabo
el Instituto Nacional del Cáncer
de Estados Unidos.
Otro de los tumores donde
está más desarrollada la quimioprevención
primaria es en
el de mama hormonodependiente.
En este caso, la estrategia
se basa en la manipulación
estrogénica de los distintos fármacos
desarrollados originariamente
para controlar el riesgo
de recaída: tamoxifeno y los
más recientes raloxifeno e inhibidores
de la aromatasa.
Aunque la capacidad preventiva
está clara, en este caso, como
en el de los antiinflamtorios, la
duda se plantea frente a la balanza
riesgo-beneficio, no sólo por
el precio, sino porque el tamoxifeno,
por ejemplo, se ha asociado
a cáncer de endometrio (útero)
y tromboembolismo.
La experiencia en tumor mamario
ha hecho que se evalúe la
capacidad profiláctica del tratamiento
hormonal, en este caso
antiandrogénico, empleado en
el otro tumor hormonodependiente,
el de próstata.
Aparte de los que hemos hablado
hasta ahora, existen otras