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MAYO’07 Sociedad ■ 75
◗
lo que promete Jesús a los
por su sufrimiento que no llo-
lenio se persigue, desde el 2000,
mos capaces de convertirnos
que llama bienaventurados
ren por él, sino por sus hijos.
el acabar con la pobreza, con el
en hombres y mujeres nue-
(yo no tenía muy claro qué
Aquellas mujeres, lo tengo
hambre, asistimos tan campan-
vos. No nos faltan ni una cua-
llevaría consigo serlo) es al-
hoy claro, eran todas las ma-
tes a que se retrase la puesta
sireceta para lo primero ni el
go así como el premio gordo.
dres (y también los padres, los
en marcha de algunas de las
modelo para lo segundo.
Y ¡qué cosas tiene este Je-
abuelos y las demás personas
medidas necesarias, entre ellas
Me atrevo a recomendar el
sús!, porque ¿hemos pensa-
de bien) del mundo, del de en-
la aportación por parte de los
libro. En su brevedad y bajo la
do bien a quienes convoca a
tonces, del de hoy y del de
países desarrollados del tan ba-
óptica del programa de Jesús,
recibirlo?
mañana. Y todos (madres, pa-
queteado 0,70%, hasta, en el
considera casi todo lo que hoy
Jesús tiene “debilidad” por
dres y abuelos, hombres de
mejor de los casos, el 2015 (o
es de una actualidad rabiosa,
los débiles, y entre ellos por las
buena voluntad) tenemos,
hasta el 2012 en España), co-
está lleno de sorpresas (o, co-
mujeres y los niños, a juzgar,
ciertamente, razones para llo-
mo si el hambre y las muertes
mo antes señalé, de cuestiones
entre otras expresiones suyas,
rar por nuestros hijos y nietos,
que provoca pudieran aparcar-
inquietantes), ilumina espa-
por las terribles amenazas con-
a causa del mundo que cada
se. ¿No podría ser nuestra acti-
cios en sombra que casi to-
tra los que pegan a los niños y
generación ha preparado pa-
tud una forma de cooperación,
dos podemos tener y, a la vez,
les hacen violencia y contra los
ra que vivan las siguientes y
al menos, con el ejercicio de la
deja en penumbra lugares que
que usan ésta contra la mujer.
que hemos llevado a la situa-
violencia que supone mante-
antes de su lectura podían es-
No hay nada peor para los que
ción actual.
ner esta situación de flagrante
tar iluminados; y nos descubre
se creen fuertes que el despre-
Pero también los niños –di-
injusticia? Y si lo es, ¿cómo que-
a un Jesús seductor, casi irre-
cio, la humillación y la viola-
ce Alt- tendrán muchas razo-
damos frente a los anatemas
sistible. Un Jesús que, como
ción de los débiles, concluye
nes para llorar cuando piensen
de Jesús contra los maltrata-
decía mi maestro D. Antonio
Alt cuando considera esta cues-
en el futuro que les dejamos.
dores de la infancia?
Prior, si no era Dios, merecía
tión en su libro.
Me queda una duda, nada
Al principio del último ca-
serlo. Un Jesús, en definitiva,
Insisto con lo que respecta
tranquilizadora. A Jesús lo ma-
pítulo, Alt describe la situa-
que dice a los creyentes y a
a los niños (aún más débiles
taron por oponerse, no por
ción del mundo. Calificarla só-
los que no los son que ya no
que el más débil de los adul-
adaptarse a la situación. Noso-
lo como muy preocupante se-
es tiempo de seguir conside-
tos), los limpios de corazón, a
tros quizás no nos opongamos
ría pecar de un optimismo
rando el camino, sino de em-
los que Jesús equiparó con
demasiado a la presente, en la
ingenuo, pero tampoco cabe
prenderlo.
Dios y a los tiene presentes
que, por ejemplo, mueren todos
un pesimismo que nos lleve a
hasta en los momentos más
los días miles de seres huma-
pensar y sentir que todo está
críticos de su vida. Así, cami-
nos, entre ellos niños, ¡de ham-
perdido. Era posible transfor-
no del Gólgota, cuando dice a
las mujeres que se acongojan
bre¡ A pesar de que entre los
Objetivos de Desarrollo del Mi-
mar el mundo hace 2000 años
y también lo es ahora, si so-
✒ Juan López Pérez