Número 282 - Bicentenario

DOCTJMENTOS I'ARA LA UISTORIA
Monarquia la Biguieron reconociendo toda las no con tumultoø sino con entusiasmo; no en conpotencias
dcl continente; como Monarquia hizo fusion, discordia ni partidos, ama con union y
sus tratados y alianzaa, y en l\Ionarquia vivicron noble desprendimiento; no con miras ni intereses
los Espafloles de todas clases, sin quo nadie ha- particulares que es el carácter do ins combustiobieso
dudado un moinento do Ia oxiatoncia de nea tumnituarias, aino con el sagmado y inico ohaquel
Gobierno, ann cuando se hicieron altera- jeto de In defensa dcl Rey y de lii pKtria, coma
ciones accidentalca, que nunca variaron la base t poner en accion todos los resortes que podian
dcl sistema moMrquico. C6mo, pues, so sosten- sorvir t tin fin tan aublime. Lo consiguieron; y
drt Ia pretendicla disolucion do Ia Monarquia he aqui quo tan pronto coino el triunfo memora-
Espaflola?
ble de Bailn alej6 al enemigo casi al pie de los
96. Pero podra. favorceerlos Ia cautividad del Pirineos, todos aquellos Gobiernos resignaron su
Rey? No podrán apoyarso en este funeato acci- podcr individual en una Junta general pie medonte?
Tampoco. La deagraciada prision del present6 a! Monarca, y desdo ontonces las suce-
Monarca ni varió, ni podrt variar Ia Monarquia. sivas formas quo tom6 aquella misma representa.
Esta estrira en la clae, en los principios, en los cion, so reomplazaron sin tumulto ni alteracionos,
fundamentos y mtodos del Gobierno; y asi es y segun quo las ostrechas y dificiles circunstanquo
sustancialmente ci Monarca no dej6 do exis- ems do la Monarquia las iban exigiendo.
tir entre los Espafloles; ya porque Ba amor no lo 100. Destruidas, pues,. Ins infames asercionea
permitit$, ya porcue Ins Supremas Potestades do los rebeldes, permitasonos excitar tt todos los
que ejorcicron ci Poder Real desdo aquolla fatal hornbrcs do bien dcl universo (i reflexionar sobre
poca no hicieron sino reprosentar In persona de la negra ingratitud de estos monstruos. Cuando
un Rey cantivo, no desronado como impiamento In Metrópoli, Ia Ptria de sus padres a quien to
dicen los rebeides. do lo doben, cducacion, opulencia, virtudes, ilus-
97. Cuando los Eapailoles no peleaban por tracion, padecia In agresion mas injusta y bthbaotra
cosa quo por Ia conservacion del Trono y del ra, cuando empeltada en nun lucha tan noble
Trono pam Fernando ha podido nadie, smo es- como desigual, cuando liona do ontusiasmo y fuetos
foragidos, considerar al Monarea Espallol des- go patritico necositaba mas de In union do auxi-
&onado, confandiendo una prision prfida y via- lios tie sus hermanos do Ultramar, entonccs es
lenta, nun privacion moral y precaria con un cuando estos dosnaturalizados creen quo estaba
despojo real y permancnte? indicada Ia independcncia do las Amricas, al
98. Ni los gobicrnos parciales que inmediata- mismo tiempo quo los atribulados Peninsulares
mente despues de In agrosion francosa to erigie. lea daban lugar expresamente en Ia primema meron
en las provincias do Ia antigua Espafla so presentacion Soberana, coma siguieron ejecutánlovantaron
turnuleuarzamente y unos despues do dolo despues hasta la feliz recuperacion dcl Sootros,
como afirtnan los rcboldes. Con malicia berano. Pero los quo asi piensan y hablan no
perversa inton tan confunclir In noble procipita- son, pueblos dcl mundo, los Arnericanos: son Ia
don do aquellas en concurrir inomentaneamente espuria gente quo yn hemos caracterizado y re•
In ausencia del Rey y In dofensa do sus do- tratado al natural: gonte inmunda, perdida, y
rechos y Ia poca de osta necesaria inedida, con aventurema en an propio pais: gente inmoral, es-
Ia sucesion posterior do gobiernos, quo aunque t1pida y baja: gente en fin quo detesta ci pueblo
diversos en los nombres con quo ostentaban In Americano, pie Is persiguo y que Ia extermirepresentacion
del Poder Supremo, fueron taos nara.
en el sistema do fines. 101. Segundo.... "El puello Mexicano ob-
99. Todo el mundo es testigo de quo las Jan- 8ervó las ventajas'poltzeas que le ofreda €1 drden
tas Provinciales se erigieron instantaneamente, y do los sucesos. Llegd d entender quo en uso y
y quo por un impulso milagroso do fideidad to- desagravio de ens d.reo1os naturales podia em
do los territorios procedieron casi un tiempo, aquellos mo'inentos do tra8on:o aizar la voz do su