Dr. Dagoberto Flores Olvera - Instituto Internacional de Investigacion ...

LaResiliencia en un mejor ambiente.
familiar. Los niveles más bajos que encuentres en ti mismo funcionarán como una
resistencia que llevará al resto de ti para atrás. Pero también hallarás niveles
superiores en tu vida. Puedes estar en el nivel de la aceptación y leer un libro del
nivel de la razón y sentirte realmente inspirado. Piensa en las influencias más
fuertes en tu vida en este momento. ¿Cuáles elevan tu conciencia? ¿Cuáles las
disminuyen?
Una de las cosas que te pueden gustar de estos niveles de conciencia es que
puedes rastrear sobre tu propia vida y ver cómo te has estado moviendo a través
de ellos. También es recomendable pensar en las dimensiones de Maslow. ¿Estás
en la etapa primitiva de solo recibir o ya has avanzado a las etapas de
autorrealización y espirituales, donde te motiva buscar el bien de los demás?
Sabes fortalecer tu intelecto, emociones y cuerpo, pero ¿sabes cómo fortalecer
tu espiritualidad? Es ya muy sabido que para mejorar tu vida debes dedicarle
tiempo a cuidarte y ejercitarte integralmente. Esto es tu cuerpo, espíritu, mente y
emociones.
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• Metacogniciones – El reto de la introspección
Entendemos por Metacognición la capacidad que tenemos de autorregular el
propio aprendizaje, es decir de planificar qué estrategias se han de utilizar en
cada situación, aplicarlas, controlar el proceso, evaluarlo para detectar posibles
fallos, y como consecuencia... transferir todo ello a una nueva actuación.
Hacia 1976, John Flavell acuña el concepto de "metacognición" para referirse al
conocimiento que tenemos acerca de los procesos y productos cognitivos. En el
planteo de Flavell, la metacognición implica el conocimiento de la propia
actividad cognitiva y el control sobre dicha actividad. Es decir, conocer y
controlar. Conocer la propia cognición quiere decir tomar conciencia del
funcionamiento de nuestra manera de aprender. Por ejemplo: saber que extraer
las ideas principales de un texto favorece la comprensión. Controlar las
actividades cognitivas implica planificarlas, controlar el proceso intelectual y
evaluarlos resultados.
Nos referimos a la metacognición como producto cuando la vinculamos con el
conocimiento que tenemos sobre nuestro funcionamiento cognitivo. Éste es un
conocimiento declarativo, “el saber qué”. Por ejemplo, saber que la organización
de la información en un esquema facilita la comprensión. Al referirnos a la
metacognición como proceso, aludimos al conocimiento de los procedimientos
de supervisión y de regulación que implementamos sobre nuestra actividad
cognitiva al enfrentar una tarea de aprendizaje. Éste es un conocimiento
procedimental: “saber cómo”. Por ejemplo, saber seleccionar una estrategia para
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