08.05.2013 Views

Las Nieblas de Avalón

Las Nieblas de Avalón

Las Nieblas de Avalón

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Marion Zimmer Bradley <strong>Las</strong> <strong>Nieblas</strong> <strong>de</strong> <strong>Avalón</strong><br />

Libro IV El Prisionero en el Roble<br />

—Tengo que acompañar a mi padre. Llora y dice que mi hermano no habría muerto <strong>de</strong> estar yo con él. Me lo<br />

reprochará eternamente. —La miraba con una sombra <strong>de</strong> inquietud en los ojos—. Fuiste tú quien me or<strong>de</strong>nó<br />

no ir. ¿Previste esto con tu magia, amada mía?<br />

Ella encontró un hilo <strong>de</strong> voz entre el dolor <strong>de</strong> su garganta.<br />

—Fue voluntad <strong>de</strong> la Diosa que Avalloch no <strong>de</strong>struyera lo que hemos hecho aquí. —Con gran dolor pudo<br />

mover un <strong>de</strong>do a lo largo <strong>de</strong> la serpiente tatuada.<br />

Accolon cambió <strong>de</strong> expresión, súbitamente asustado.<br />

—¡Morgana! ¿Tuviste algo que ver con esto?<br />

«Ah, <strong>de</strong>bí prever cómo me miraría cuando supiera...»<br />

—¿Cómo pue<strong>de</strong>s preguntarlo? —susurró—. Pasé toda la tar<strong>de</strong> tejiendo en el salón, a la vista <strong>de</strong> todos. No<br />

fue obra mía, sino <strong>de</strong> la Diosa.<br />

—Pero tú lo sabías, ¿lo sabías?<br />

Lentamente, con los ojos llenos <strong>de</strong> lágrimas, asintió. El joven se inclinó para besarla en los labios.<br />

—Sea. Fue voluntad <strong>de</strong> la Diosa —dijo.<br />

Y salió.<br />

3<br />

15

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!