LIAHONA 1989-01.pdf - Cumorah.org
LIAHONA 1989-01.pdf - Cumorah.org
LIAHONA 1989-01.pdf - Cumorah.org
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
EL ELDER GERALD E.<br />
MELCHIN<br />
del Primer Quórum de los Setenta<br />
1 punto decisivo en la vida<br />
espiritual de Gerald E. Melchin<br />
'fue su bendición patriarcal, la<br />
que lo indujo a prometer que serviría<br />
al Señor de cualquier manera que le<br />
fuera posible. "Había regresado de la<br />
misión, me había casado y mi negocio<br />
de transporte de automóviles no<br />
estaba marchando bien," explica el<br />
élder Melchin, "pero mi bendición<br />
patriarcal me dio la plena seguridad<br />
de que el Señor me protegería si<br />
pagaba el diezmo íntegro, de manera<br />
que continué sirviendo como<br />
misionero de estaca, sin pasar noches<br />
de insomnio por temor a lo que<br />
pudiera sucederle al negocio". Desde<br />
ese entonces, su firme devoción al<br />
Señor ha continuado en todo aspecto<br />
de su vida.<br />
Cuando en 1971 fue llamado a<br />
presidir la Misión California Arcadia,<br />
él y su esposa, Evelyn, vendieron el<br />
negocio que tenían en sociedad con<br />
uno de los hermanos del élder<br />
Melchin, Howard. Tres de sus siete<br />
hijos los acompañaron a la misión en<br />
California: Brook, Wade, Barbara, y<br />
Tina, una hija lamanita. Para ese<br />
tiempo, los cuatro hijos mayores,<br />
Richard, Shauna, Robyn y Gregory,<br />
ya se habían casado.<br />
La obra misional ha tenido un papel<br />
muy importante en su matrimonio. En<br />
realidad, Gerald Melchin y Evelyn<br />
Knowles se vieron por primera vez<br />
mientras servían en la Misión Canadá<br />
Este. El élder Melchin recuerda: "Yo<br />
terminé la misión antes que Evelyn,<br />
en el año 1944, de modo que, como<br />
la guerra aún continuaba, entré a la<br />
Fuerza Aérea Real Canadiense, donde<br />
llegué a ser piloto oficial un año antes<br />
de que finalizara la Segunda Guerra<br />
Mundial. Mientras tanto, Evelyn y yo<br />
continuamos escribiéndonos".<br />
Una vez exonerado del servicio<br />
militar, el hermano Melchin estaba<br />
ansioso por visitar a la familia<br />
Knowles que residía en Ogden, Utah,<br />
con el fin de pedir la mano de Evelyn<br />
en matrimonio. Para ese entonces, los<br />
padres de ella ya estaban<br />
favorablemente impresionados con el<br />
pretendiente de su hija, a causa de<br />
una carta que habían recibido de la<br />
oficina de la misión; la carta provenía<br />
de la esposa del presidente de la<br />
misión. En ella citaba las expresiones<br />
de alabanza que el presidente Heber J.<br />
Grant había utilizado refiriéndose a<br />
Hugh B. Brown: "Con todo gusto<br />
colocaría a mis hijas en línea y<br />
permitiría que Gerald Melchin<br />
escogiera".<br />
Con ese tipo de recomendación, los<br />
novios no tardaron mucho en hacer<br />
los arreglos para casarse en el Templo<br />
de Logan. Recordando los años que<br />
han pasado juntos, la hermana<br />
Melchin comenta: "Mi esposo es el<br />
hombre más bondadoso que<br />
conozco".<br />
Después de trece años, se mudaron<br />
de Raymond a Calgary, donde el<br />
hermano Melchin recuerda haber<br />
pasado por una de las grandes pruebas<br />
de su vida, la cual ahora parece más<br />
graciosa que difícil: El presidente de<br />
estaca, N.'Eldon Tanner, le dio el<br />
llamamiento de director de baile.<br />
"Realmente lo necesitan", le había<br />
dicho el presidente Tanner. El élder<br />
Melchin comenta: "En realidad, no<br />
deseaba hacerlo; no sabía bailar, ni<br />
tampoco me gustaba el baile, pero<br />
como le había prometido al Señor que<br />
haría lo que él requiriera de mí, lo<br />
acepté". Más tarde, el presidente<br />
Tanner comentó que él sabía la clase<br />
de hombre que Gerald Melchin era<br />
cuando aceptó ese llamamiento.<br />
Calgary fue también donde el élder<br />
Melchin sirvió siendo obispo y más<br />
tarde presidente de estaca. La<br />
hermana Melchin sirvió en la •<br />
<strong>org</strong>anización de las Mujeres Jóvenes y<br />
como presidenta de la Sociedad de<br />
Socorro de barrio y luego de estaca;<br />
también cantaba solos con su hermosa<br />
voz de soprano. Además, fue ahí que<br />
el élder Melchin fue llamado para ser<br />
Representante Regional. El recuerda:<br />
"Me había jubilado y tenía tiempo de<br />
sobra. Un día, fui a las montañas para<br />
orar a fin de saber en qué forma<br />
deseaba el Señor que lo sirviéramos y<br />
al volver, el élder Loren C. Dunn me<br />
llamó para darme el llamamiento de<br />
Representante, Regional''.<br />
Con toda la experiencia que tienen<br />
en prestar servicio en la Iglesia, los<br />
hermanos Melchin ahora han aceptado<br />
un llamamiento que los mantendrá<br />
separados de sus siete hijos y<br />
veintiséis nietos (el número veintisiete<br />
está en camino). Ambos están de<br />
acuedo con que el estar separados de<br />
sus hijos es un gran sacrificio. El<br />
perderse una parte de los años de<br />
crecimiento de los nietos y los<br />
acontecimientos que puedan ocurrirles<br />
requiere devoción al evangelio y una<br />
perspectiva eterna de los lazos<br />
familiares. "Tenemos fe en que el<br />
Señor los acompañará'', agrega el<br />
élder Melchin. "Nuestros ayunos y<br />
oraciones mantienen unida a toda la<br />
familia, pese a las tribulaciones que<br />
tengamos que afrontar''.<br />
Las palabras del presidente N.<br />
Eldon Tanner parecieron resonar<br />
nuevamente, sólo que esta vez se<br />
aplicaban tanto al élder Melchin como<br />
a su esposa: Uno fácilmente puede ver<br />
qué clase de personas aceptarían un<br />
llamamiento como ése.<br />
115