13.05.2013 Views

Capítulo V. El ensayo Fernanda Aren, Teresita Vernino 1. - Taller de ...

Capítulo V. El ensayo Fernanda Aren, Teresita Vernino 1. - Taller de ...

Capítulo V. El ensayo Fernanda Aren, Teresita Vernino 1. - Taller de ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Finalmente, un caso original lo constituye un epígrafe <strong>de</strong>l mismo autor <strong>de</strong>l<br />

<strong>ensayo</strong>. Santiago, en “Buenos Aires: paraíso <strong>de</strong> la monstruosidad”, dice: “La ciudad no<br />

pi<strong>de</strong> clemencia (...) Cuando mucho recurre a un sollozo colectivo que <strong>de</strong> cuando en vez<br />

es correspondido con gotas <strong>de</strong> alivio cristalinas o piedras malintencionadas que nos<br />

encuentran siempre al <strong>de</strong>scubierto y <strong>de</strong>sprevenidos”, aporte poético y personal, cuya<br />

función es presentar la mirada o perspectiva <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la cual quien ensaya se va a<br />

aproximar a la ciudad, la que es caracterizada a lo largo <strong>de</strong>l trabajo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> distintas<br />

vertientes.<br />

Como hemos visto, el uso <strong>de</strong> los epígrafes es muy variado, como así también su<br />

origen, si bien se <strong>de</strong>stacan aquellos que proce<strong>de</strong>n <strong>de</strong> la literatura, la fotografía (Barthes,<br />

Sontag, Travnik, entre otros) o la filosofía. En general, suelen ser el impulso <strong>de</strong>l ensayar<br />

y, por eso, muchas veces, su vínculo con el <strong>ensayo</strong> es estrecho, ya que este lo retoma<br />

para parafrasearlo, reformularlo o ejemplificarlo. En el corpus analizado son pocos los<br />

epígrafes que han sido utilizados como meros “adornos” <strong>de</strong>l texto, lo que <strong>de</strong>muestra que<br />

los estudiantes son conscientes <strong>de</strong> su utilidad y funcionamiento.<br />

En todos los casos, coincidimos en señalar que el epígrafe es una impronta <strong>de</strong> la<br />

mirada <strong>de</strong>l ensayista, una suerte <strong>de</strong> surco que prepara el terreno que va a ser escrito. Es,<br />

parafraseando a Barthes 17 , lo que arrastra toda la escritura.<br />

II 3. Principios y finales: el lugar <strong>de</strong> la duda y la interpretación<br />

Según Adorno, 18 el <strong>ensayo</strong> tiene la libertad <strong>de</strong> empezar en el punto en que el<br />

escritor <strong>de</strong>ci<strong>de</strong> y terminar cuando siente llegado el final. Los alumnos muestran tener<br />

claro que no existe ninguna convención respecto <strong>de</strong> cómo <strong>de</strong>be comenzar un <strong>ensayo</strong>.<br />

Así encontramos una diversidad interesante <strong>de</strong> modos <strong>de</strong> comenzar y mucha libertad<br />

para <strong>de</strong>cidir cómo hacerlo. Enumeraremos algunos <strong>de</strong> ellos:<br />

<strong>1.</strong> Un dicho popular apócrifo 19<br />

Pablo comienza relatando lo que dicen los viejos habitantes <strong>de</strong> Valparaíso,<br />

acerca <strong>de</strong> que hay dos ciuda<strong>de</strong>s y que <strong>de</strong>scubrirlas <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l visitante. Una es la que<br />

17 “Un <strong>de</strong>talle arrastra toda mi lectura”.<br />

18 T. Adorno, “<strong>El</strong> <strong>ensayo</strong> como forma”, en Notas <strong>de</strong> Literatura, Barcelona, Ariel, 1962.<br />

19 <strong>El</strong> alumno inventa la tradicionalidad <strong>de</strong> una concepción <strong>de</strong> la ciudad.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!