- Page 1 and 2:
Obra reproducida sin responsabilida
- Page 3 and 4:
I EL NUEVO GENERAL DE LOS JESUITAS
- Page 5 and 6:
-Es que si se divierten por cuenta
- Page 7 and 8:
-Bien. -De lo cual se deduce que, s
- Page 9 and 10:
nan, Athos y yo. Porthos nunca se v
- Page 11 and 12:
-Porque ocupa otra mi corazón, y n
- Page 13 and 14:
el partido que un hombre inteligent
- Page 15 and 16:
"Si os dignáis corresponder a mi c
- Page 17 and 18:
-Porque mi fuerza con el rey consis
- Page 19 and 20:
-No os comprendo. -Ahora me compren
- Page 21 and 22:
-¿Y no creéis aún vos, a quien t
- Page 23 and 24:
-Ya os lo he dicho y os lo repito -
- Page 25 and 26:
Aquella melancolía del cielo hiri
- Page 27 and 28:
entristecerse de ello. Sin aquella
- Page 29 and 30:
secretarios, le entregó una carter
- Page 31 and 32:
-¿Yo, Majestad? -Porque os llamo,
- Page 33 and 34:
-Creo que hago más que aceptar -di
- Page 35 and 36:
Oíanse fuera las pisadas de los ca
- Page 37 and 38:
eina, esperaba que habría vuelto a
- Page 39 and 40:
huían como flechas, entrando nueva
- Page 41 and 42:
el momento en que abrían la portez
- Page 43 and 44:
de ellos había visto a Guiche ni a
- Page 45 and 46:
-No; he pasado la noche escribiendo
- Page 47 and 48:
-¡Qué dichoso sois en tener tan b
- Page 49 and 50:
-Cedámosle entonces el puesto -dij
- Page 51 and 52:
donde estáis expuesta a la lluvia.
- Page 53 and 54:
-En efecto, señorita; más de una
- Page 55 and 56:
-Todos mis deseos están cumplidos,
- Page 57 and 58:
sentimiento que alejase a Vuestra M
- Page 59 and 60:
-Soy entonces un príncipe bien des
- Page 61 and 62:
cia; mas si así no sucede, permiti
- Page 63 and 64:
Este nombre produjo algún efecto e
- Page 65 and 66:
-¡Por favor, Majestad! Van a extra
- Page 67 and 68:
Madame subió detrás de ella. El r
- Page 69 and 70:
Dos horas después de haber partido
- Page 71 and 72:
-¿Yo? -preguntó La Valliére. -S
- Page 73 and 74:
"¡Oh! dijo para sí-. No hubiera c
- Page 75 and 76:
E, inclinándose, se retiró para i
- Page 77 and 78:
lugar? -No ha habido otro remedio.
- Page 79 and 80:
Aramis se sentó en efecto a una me
- Page 81 and 82:
-Anda -dijo-; está bien; mas tráe
- Page 83 and 84:
-Pero, en último resultado -dijo F
- Page 85 and 86:
-Pronto, que venga Tobías -ordenó
- Page 87 and 88:
- Yo estaba cierto de ello. Ahora p
- Page 89 and 90:
-Mas en alguna parte estará -dijo
- Page 91 and 92:
a hacer una vida retirada, se desco
- Page 93 and 94:
experiencia y sagacidad, le respond
- Page 95 and 96:
en la Corte, no sólo poseer, sino
- Page 97 and 98:
-Hija mía -dijo entonces Ana de Au
- Page 99 and 100:
-Indudablemente. Pero, ¿quién ser
- Page 101 and 102:
-Mucho extrañaría -replicó Ana d
- Page 103 and 104:
-¡Gracias, gracias! -exclamó Mada
- Page 105 and 106:
siempre, estaban sentadas a sus lad
- Page 107 and 108:
esto de la traílla no sigue más q
- Page 109 and 110:
an en murmurar, si Madame no viera
- Page 111 and 112:
esuelto a instalarse al lado de La
- Page 113 and 114:
La Valliére, apacible y resignada,
- Page 115 and 116:
-No -repuso Atenaida-; si ganáis,
- Page 117 and 118:
Seguidamente, todos, entendidos o n
- Page 119 and 120:
en torno suyo más que la palabra i
- Page 121 and 122:
-Os equivocáis, señorita -dijo-;
- Page 123 and 124:
donó precipitadamente la asamblea
- Page 125 and 126:
-Señor Artagnan, ¿cómo os vestí
- Page 127 and 128:
venia de nuestros lectores, lo hall
- Page 129 and 130:
azos bajo la barba, mirando a Artag
- Page 131 and 132:
-Planchet, ya sabes que no me aburr
- Page 133 and 134:
-Lo creo; más, ¿qué me dices de
- Page 135 and 136:
-Si a lo menos -repuso el abacero-
- Page 137 and 138:
-¡Cómo! -dijo Artagnan dando un b
- Page 139 and 140:
-Pero creo que nada tenga de partic
- Page 141 and 142:
-Quiero decir, en aburrirme, señor
- Page 143 and 144:
-Afirmo que tu filosofía no tiene
- Page 145 and 146:
de los comercios más variados y m
- Page 147 and 148:
-No hay necesidad de tantos: con do
- Page 149 and 150:
-Pues bien, mañana; así como así
- Page 151 and 152:
hemos puesto en conocimiento de nue
- Page 153 and 154:
partió de la Bastilla sin que Bais
- Page 155 and 156:
Aquel soldado no podía dejar el se
- Page 157 and 158:
sirvo... Atacar a ese desgraciado,
- Page 159 and 160:
"Querido señor Du-Vallón: Dignaos
- Page 161 and 162:
Porthos, ¡qué alegría volverlo a
- Page 163 and 164:
Nada había que contestar a un homb
- Page 165 and 166:
-Sí, señor -contestó el lacayo.
- Page 167 and 168:
-¡Cuerno de buey! -dijo Porthos-.
- Page 169 and 170:
-En efecto -dijo Porthos-; he oído
- Page 171 and 172:
-Pues es raro -dijo Artagnan-, no h
- Page 173 and 174:
conviniese o no, y en consecuencia
- Page 175 and 176:
-Rompí -dijo Porthos con voz entre
- Page 177 and 178:
-Es posible -dijo Porthos con fatui
- Page 179 and 180:
interior de la cabeza, ésta se apr
- Page 181 and 182:
-¡Ca! Todo cabe en un salero. Arta
- Page 183 and 184:
-Mirad; en primer lugar os tiene se
- Page 185 and 186:
-De albañil, eso es. -¿De amasado
- Page 187 and 188:
-¿Qué? -Se incomodará Aramis. -
- Page 189 and 190:
-¿Sabéis lo que debéis hacer? -p
- Page 191 and 192:
-Iré. -¿No veréis allí al seño
- Page 193 and 194:
-Podrá resultar que el señor Fouq
- Page 195 and 196:
nal Richelieu y a Su Eminencia el c
- Page 197 and 198:
X EL RATÓN Y EL QUESO Artagnan y P
- Page 199 and 200:
Los hermosos higos de Provenza, las
- Page 201 and 202:
Y, cogiendo al mismo tiempo al manc
- Page 203 and 204:
-¡Ay, señor, qué placer!... ¡Ay
- Page 205 and 206:
Terminado el refrigerio pusiéronse
- Page 207 and 208:
-Vamos a ver, ¿cuánto es lo que a
- Page 209 and 210:
-¡Oh, oh! -exclamó Porthos con ad
- Page 211 and 212:
-No he dicho casa de campo, señor
- Page 213 and 214:
XI LA CASA DE CAMPO DE PLANCHET Lev
- Page 215 and 216:
ada respiraba aquella saludable atm
- Page 217 and 218:
Donde quiera que caía la lentejuel
- Page 219 and 220:
-El señor barón Du-Vallon de Brac
- Page 221 and 222:
calle de los Lombardos, y colocó e
- Page 223 and 224:
Era maravilloso el verlos. Cuando T
- Page 225 and 226:
-¡Diantre! Y eso que había jurado
- Page 227 and 228:
Mientras tanto se vestía Planchet,
- Page 229 and 230:
Pasaron a un corredor que conducía
- Page 231 and 232:
tento con él, y pienso en la gente
- Page 233 and 234:
-Pues yo -dijo Porthos- no me divie
- Page 235 and 236:
Volvióse al momento, y, quitándos
- Page 237 and 238:
Por el camino se iba preguntando c
- Page 239 and 240:
Trüchen, que se había familiariza
- Page 241 and 242:
econocido rivales en este encantado
- Page 243 and 244:
-¡El rey me espera! -murmuró Port
- Page 245 and 246:
-La señora Trüchen conservará mu
- Page 247 and 248:
El mismo Planchet sintióse penetra
- Page 249 and 250:
-Vos, como he tenido el honor de de
- Page 251 and 252:
te a Vuestra Majestad al señor bar
- Page 253 and 254:
-¡Cómo! -dijo el rey-. ¿El seño
- Page 255 and 256:
Estas palabras fueron escuchadas po
- Page 257 and 258:
Aramis había efectuado una hábil
- Page 259 and 260:
tán, ¿queréis tener la amabilida
- Page 261 and 262:
Aramis estremecióse y se volvió p
- Page 263 and 264:
-¡Oh! Yo me había encargado de ha
- Page 265 and 266:
posta; cuando un prelado gotoso (di
- Page 267 and 268:
quién venís. ¿Sois amigo del se
- Page 269 and 270:
-Ya os habrá dicho Porthos cómo s
- Page 271 and 272:
-Es natural que tengáis una ambici
- Page 273 and 274:
más hermosa joya de la corona real
- Page 275 and 276:
Madame no había pasado; pero por f
- Page 277 and 278:
Montalais, más alarmada aún, salu
- Page 279 and 280:
-El rey sabe que Bragelonne está c
- Page 281 and 282:
hablar de esa manera, si viesen vue
- Page 283 and 284:
Arrancóle el acero de las manos, y
- Page 285 and 286:
-¿Creéis, según eso -repuso la p
- Page 287 and 288:
una mujer, dando a ésta la certeza
- Page 289 and 290:
-¡Oh! -murmuró el conde, cayendo
- Page 291 and 292:
Y era que Guiche podía decir, como
- Page 293 and 294:
-Gracias -contestó Malicorne-. ¿Y
- Page 295 and 296:
-Y vos me haréis perder la cabeza
- Page 297 and 298:
-Y yo, antes bien, creo que lo más
- Page 299 and 300:
-Esas cartas era yo quien las recib
- Page 301 and 302:
La ventana que acababa de abrirse e
- Page 303 and 304:
“Ya sabéis a lo que eso hace rel
- Page 305 and 306:
El señor de Wardes llegará dentro
- Page 307 and 308:
Hecha esta promesa, pasó Guiche re
- Page 309 and 310:
El caballero de Lorena, que temía
- Page 311 and 312:
Madame fue la única que no cambió
- Page 313 and 314:
des quiere decir que el duque de Bu
- Page 315 and 316:
Mostróle así el deseo que tenía
- Page 317 and 318:
-La Valliére... ¿Qué es ello? ¿
- Page 319 and 320:
-Será como gustéis, Wardes; pero,
- Page 321 and 322:
-Sí, una vez terminada su misión.
- Page 323 and 324:
contrásteis con aquella princesa,
- Page 325 and 326:
dad, de los rumores de que os habé
- Page 327 and 328:
-¡Ca! -dijo Saint-Aignan-. ¡No! .
- Page 329 and 330:
-Sí, los brazos se mantienen bien,
- Page 331 and 332:
-¿Qué? -Montaremos los dos a caba
- Page 333 and 334:
que Guiche le había visto matar go
- Page 335 and 336:
Guiche reflexionó por un instante,
- Page 337 and 338:
-Echaremos pie a tierra en una buen
- Page 339 and 340:
-Me parece bien, si os place. Pero
- Page 341 and 342:
Guiche bajó la cabeza. -Ahora, dec
- Page 343 and 344:
jada que daba frente a aquel donde
- Page 345 and 346:
Afortunadamente, el animal hizo en
- Page 347 and 348:
correr para acercarse a él antes d
- Page 349 and 350:
había ocupado de averiguar si Guic
- Page 351 and 352:
-¡Señor Manicamp! -¡Señor de Wa
- Page 353 and 354:
hecho muy mal en traerme aquí; tod
- Page 355 and 356:
-Así es -dijo con angustia el heri
- Page 357 and 358:
que IV, y que el carácter receloso
- Page 359 and 360:
-No vayáis a estaros sin comer -re
- Page 361 and 362:
-¡Exquisito! -dijo Porthos tranqui
- Page 363 and 364:
-¿Y residís ... ? -preguntó el r
- Page 365 and 366:
lugar que considero demasiado preci
- Page 367 and 368:
tado seguirles por emulación, pero
- Page 369 and 370:
ido pagar al rey en la misma moneda
- Page 371 and 372:
-No ha dicho eso la señorita de La
- Page 373 and 374:
-¿Quiere Vuestra Majestad que me e
- Page 375 and 376:
-Bien. Llama al señor de Artagnan.
- Page 377 and 378:
El médico obedeció sin replicar,
- Page 379 and 380:
-¡Hola, señor! -le dijo-. ¿Me tr
- Page 381 and 382:
a colocarse primero enfrente de su
- Page 383 and 384:
de debajo del caballo. La espuela,
- Page 385 and 386:
-No es más que efecto de la observ
- Page 387 and 388:
-De mucha, puesto que cayó casi en
- Page 389 and 390:
Luego, después de un momento de re
- Page 391 and 392:
-Señor de Artagnan -dijo-, sois en
- Page 393 and 394:
mo soldado, a un rincón del despac
- Page 395 and 396:
-Sí, en las cacerías; quiero deci
- Page 397 and 398:
-Y pistolas de lujo, excelentes par
- Page 399 and 400:
-Majestad, lo que está escrito, es
- Page 401 and 402:
-Pero un caballo se defiende con la
- Page 403 and 404:
XXIV EL MÉDICO Y miró a Artagnan,
- Page 405 and 406:
-¡Una bala!... ¿Estáis seguro de
- Page 407 and 408:
-¡Mentido, Majestad! La palabra es
- Page 409 and 410:
-¡Oh, oh! -murmuró Artagnan-. ¿E
- Page 411 and 412:
añadió dirigiéndose al rey-, cua
- Page 413 and 414:
-No le falta presencia de ánimo a
- Page 415 and 416:
-Pero que el señor de Saint-Aignan
- Page 417 and 418:
-Se diría tal vez que amaba a algu
- Page 419 and 420:
-Y luego -añadió el rey-, sabéis
- Page 421 and 422:
gracias en nombre de todas las dama
- Page 423 and 424:
-¿De suerte que ahora veis clarame
- Page 425 and 426:
-Ahora que permanecemos solos -dijo
- Page 427 and 428:
tante; y si fuese necesario... ¡Oh
- Page 429 and 430:
herido el señor de Guiche por un j
- Page 431 and 432:
-Entonces, permitid que os diga, se
- Page 433 and 434:
-¡Decidla! -Que no comprendo una p
- Page 435 and 436:
dernos. Vos me hacéis el honor de
- Page 437 and 438:
llevará a bien que el señor de Gu
- Page 439 and 440:
pobre Guiche, sobre quien van a rec
- Page 441 and 442:
vuestros intereses. No cabe mayor h
- Page 443 and 444:
Las últimas palabras de Manicamp b
- Page 445 and 446:
-Según eso, ¿puede morir? -¡Oh!
- Page 447 and 448:
-Entonces desearía que me hiciéra
- Page 449 and 450:
Manicamp se volvió, saludó y sali
- Page 451 and 452:
En el suelo veíanse dos o tres man
- Page 453 and 454:
Un suspiro profundo brotó de la bo
- Page 455 and 456:
morir, puesto que ha tenido la bond
- Page 457 and 458:
-Vámonos -dijo la dama a su compa
- Page 459 and 460:
Cogió el antifaz por la mejilla de
- Page 461 and 462:
Al día siguiente, el señalado par
- Page 463 and 464:
¿Pues no comprendéis, señora, qu
- Page 465 and 466:
olvidando la etiqueta real, le prod
- Page 467 and 468:
y caminó largo trecho con ella, mi
- Page 469 and 470:
Malicorne hizo un movimiento, para
- Page 471 and 472:
concluir el rey su última frase se
- Page 473 and 474:
-¡Ay, señorita! -dijo al fin el r
- Page 475 and 476:
-¡Oh señor! Os equivocáis -dijo
- Page 477 and 478:
proximidad de la rueda, arrancóla
- Page 479 and 480:
-Ésa es la razón por la que no me
- Page 481 and 482:
plan, cuya ejecución se trae entre
- Page 483 and 484:
-En nuestra casa -murmuró en espa
- Page 485 and 486:
La reina joven cogió un cañamazo
- Page 487 and 488:
Madame contestó con un gesto que n
- Page 489 and 490:
-Perdón -prosiguió Ana de Austria
- Page 491 and 492:
Adelantóse, pues, hacia la reina m
- Page 493 and 494:
desgracia de incurrir en el desagra
- Page 495 and 496:
humillaréis de tal suerte, que nos
- Page 497 and 498:
-Señora, soy inocente de todo cuan
- Page 499 and 500:
Saint-Aignan, y le mandó que le co
- Page 501 and 502:
princesas, con tres mujeres de vali
- Page 503 and 504:
-Nada, señor, y estoy pronta a dem
- Page 505 and 506:
Recordaba la intimidad de ambos jó
- Page 507 and 508:
cabeza, sin pronunciar más palabra
- Page 509 and 510:
-Sobre todo. Subió, en efecto, la
- Page 511 and 512:
XXXI DESESPERACIÓN Luego que se ma
- Page 513 and 514:
-No quiero -continuó Madame- que m
- Page 515 and 516:
portezuela de su carroza, diciéndo
- Page 517 and 518:
todo lo habría comprendido y adivi
- Page 519 and 520:
¡Las doce, las doce! La última, l
- Page 521 and 522:
que apareciesen en los vidrios los
- Page 523 and 524:
Siguió la calle del Gallo, y, no p
- Page 525 and 526:
Cuando llegó a la plaza de la Gré
- Page 527 and 528:
que acababa de pasar, y sorprendida
- Page 529 and 530:
-Andaré esa legua. Artagnan no rep
- Page 531 and 532:
Artagnan hizo un movimiento. -El re
- Page 533 and 534:
-Sea como gustéis -dijo-. Estad tr
- Page 535 and 536:
de mosqueteros, y, en vez de un cab
- Page 537 and 538:
No era su solución fácil para un
- Page 539 and 540:
-¡Ah! ¿quién no tiene defectos,
- Page 541 and 542:
-¿A las once? -Demasiado tarde...
- Page 543 and 544:
ey de Francia puede dar fuertes gol
- Page 545 and 546:
-¡A fe mía, Majestad, no lo sé b
- Page 547 and 548:
-¿Los ministros? -dijo Colbert. -E
- Page 549 and 550:
Supo, pues, la entrevista con Colbe
- Page 551 and 552:
aquellos dos corredores de aventura
- Page 553 and 554:
Saint-Aignan le seguía, abanicánd
- Page 555 and 556:
Los embajadores eran tres por Holan
- Page 557 and 558:
-¡Majestad! Holanda -prosiguió el
- Page 559 and 560:
-¡En mi presencia detúvose el sol
- Page 561 and 562:
-¿Sabéis la noticia del día, con
- Page 563 and 564:
-Todavía añadísteis otra cosa, s
- Page 565 and 566:
El rey contestó a su servidor con
- Page 567 and 568:
sa, no arrodillada, sino acostada a
- Page 569 and 570:
Al volver en sí, lo primero que vi
- Page 571 and 572:
-Majestad, no es posible que améis
- Page 573 and 574:
-Ignominiosamente, Majestad; y ya l
- Page 575 and 576:
ge mi dolor; decid que el rey de Fr
- Page 577 and 578:
-¡Luisa, Luisa! ¡Te lo suplico en
- Page 579 and 580:
-¡Oh, no! ¡Di que tu vida comienz
- Page 581 and 582:
-No lograréis aplacar a ninguna de
- Page 583 and 584:
pa mía que el rey lo oyese. ¿No e
- Page 585 and 586:
Los mismos embajadores, poco entera
- Page 587 and 588:
pronto, y menos sobre todo, una ges
- Page 589 and 590:
que todo el valor de Madame pudo ap
- Page 591 and 592:
de mi casa a cualquiera de mi servi
- Page 593 and 594:
a nadie. Os aseguro que no tenéis
- Page 595 and 596:
-Vamos, vamos, Enriqueta; dejad hab
- Page 597 and 598:
-No tengo ya hermano, cuando me veo
- Page 599 and 600:
"¡Pardiez! ¡Ay de aquellos que ha
- Page 601 and 602:
Entonces el rey declaró que era mu
- Page 603 and 604:
De suerte que La Valliére deslizó
- Page 605 and 606:
Malicorne pasó junto al rey, le tr
- Page 607 and 608:
aquel que coge por sí mismo y saca
- Page 609 and 610:
-Me agaché, y vi que era un pañue
- Page 611 and 612:
la lluvia o de la encina real, ten
- Page 613 and 614:
Así, por ejemplo, una tarde en que
- Page 615 and 616:
-Mirad la brillante claridad que sa
- Page 617 and 618:
-Sí, de una escalera de diecinueve
- Page 619 and 620:
-Es verdad. -Pues bien, poniendo la
- Page 621 and 622:
Mientras esto sucedía, Malicorne h
- Page 623 and 624:
Mas, el pobre amante, no teniendo y
- Page 625 and 626:
-Pero, ¿qué sucederá entonces? -
- Page 627 and 628:
Señalóse a esta última un cuarto
- Page 629 and 630:
ella en estado de devolverle lo que
- Page 631 and 632:
Y, al decir esto, dirigió a Malico
- Page 633 and 634:
En el momento en que hacemos menci
- Page 635 and 636:
Esto es, creyó que estaba loco. -S
- Page 637 and 638:
-Escucho. -Ya sabéis que Madame vi
- Page 639 and 640:
-Y qué, ¿iría el rey al cuarto d
- Page 641 and 642:
-Pero se verá esa escalera. -No, p
- Page 643 and 644:
-Y yo a buscar al obrero que necesi
- Page 645 and 646:
Entusiasmado Saint-Aignan con lo qu
- Page 647 and 648:
-¿Conque tú también me abandonas
- Page 649 and 650:
-A fin de serviros mejor. -¿Y en q
- Page 651 and 652:
-Majestad, es necesario. -¡No, no!
- Page 653 and 654:
-Esa es la hora que más conviene.
- Page 655 and 656:
-Así, señora, ¿esta noche estoy
- Page 657 and 658:
señorita de La Valliére que me re
- Page 659 and 660:
yectos. Me parece que quiere realiz
- Page 661 and 662:
Muy viva fue, sin embargo, su alegr
- Page 663 and 664:
Luego que estuvo allí, aserró el
- Page 665 and 666:
habían provenido de tener la escal
- Page 667 and 668:
Pero, viendo que lo que principalme
- Page 669 and 670:
camaristas, pobres criaturas, a qui
- Page 671 and 672:
-Pero, Majestad -prosiguió La Vall
- Page 673 and 674:
-Vamos, acabad de traspasarme el co
- Page 675 and 676:
el rey tuvo lugar para levantar la
- Page 677 and 678:
-¡Ay! ¡Ay de mí! -murmuró La Va
- Page 679 and 680:
-¿Te pareció leer? -Quizá me hay
- Page 681 and 682:
-¿Sabes que me pones en situación
- Page 683 and 684:
quién y contra quién te he de ayu
- Page 685 and 686:
EL RETRATO En esa enfermedad que ll
- Page 687 and 688:
everencia del mejor gusto, dio las
- Page 689 and 690:
de ojos negros y largos cabellos ca
- Page 691 and 692:
O bien La Valliére mostraba hallar
- Page 693 and 694:
amente la escalera, y desapareció
- Page 695 and 696:
advirtió al primer golpe de vista
- Page 697 and 698:
-¿Y había citado Su Majestad tamb
- Page 699 and 700:
-Tengo el honor de ser vuestro resp
- Page 701 and 702:
de esmeralda y oro, corta como bala
- Page 703 and 704:
Carlos II en su hermoso palacio de
- Page 705 and 706:
Castelmaine, su querida de nombre,
- Page 707 and 708:
-Al contrario, sigamos adelante, y
- Page 709 and 710:
ñor de Bragelonne, y dirigida a Su
- Page 711 and 712:
-Os equivocáis, miss Lucy -replic
- Page 713 and 714:
que me mandó que os hiciese sentar
- Page 715 and 716:
Raúl miró a la joven, sorprendido
- Page 717 and 718:
-No puedo. -Entonces, me toca a mí
- Page 719 and 720:
Entonces, el rey Carlos me hizo duq
- Page 721 and 722:
"Amigo mío, estoy herido y enfermo
- Page 723 and 724:
Y sonrió. -Si queréis decir -repu
- Page 725 and 726:
-¿Pero a quién ama? -exclamó la
- Page 727 and 728:
en consecuencia, le prometió un am
- Page 729 and 730:
-Sí lo será, si yo quiero, ya que
- Page 731 and 732:
diciendo no es nada galante para la
- Page 733 and 734:
habéis elogiado a miss Graffton, c
- Page 735 and 736:
-Se os recompensará ese celo -dijo
- Page 737 and 738:
-¡Pero ese francés no es más que
- Page 739 and 740:
-Señor, figuraos que ese joven es
- Page 741 and 742:
El duque deshizo el doblez donde es
- Page 743 and 744:
-Pues bien, he reflexionado, señor
- Page 745 and 746:
-Decidle que se quede, señorita -
- Page 747 and 748:
cada. -¿Pensáis, entonces, que no
- Page 749 and 750:
preñados de expresión, que confun
- Page 751 and 752:
No tardó en revelarse ese deseo, p
- Page 753 and 754:
Saint-Aignan no estaba en su cuarto
- Page 755 and 756:
Luis se dejó caer vacilante de rod
- Page 757 and 758:
-Sí, sí -repitió la joven asoman
- Page 759 and 760:
Pero en el instante en que el rey s
- Page 761 and 762:
misma puerta, que una sirvienta anc
- Page 763 and 764:
-Ahora, señora, no tenemos el mism
- Page 765 and 766:
-Algún trabajo os habrá costado h
- Page 767 and 768:
-Entonces ... Ya sabéis que no pue
- Page 769 and 770:
-Más allá todavía -dijo la dama-
- Page 771 and 772:
-Pues bien, ésa es la regla -añad
- Page 773 and 774:
-Lo conocí de una manera muy natur
- Page 775 and 776:
-Amigo Aramis; pero hay otra cosa,
- Page 777 and 778:
-Pedid, duquesa, pedid. -¡Pedir! .
- Page 779 and 780:
ecuerdo la poca estima en que tení
- Page 781 and 782:
-No hablemos más, pues, del asunto
- Page 783 and 784:
-Indudablemente. -Y, como está en
- Page 785 and 786:
Y, no obstante la obscuridad profun
- Page 787 and 788:
ío. ¡Sea vuestra la victoria! ¡P
- Page 789 and 790:
"¡Bueno! -pensó Aramis-. ¡Canta,
- Page 791 and 792:
Aramis no se había engañado; así
- Page 793 and 794:
No hay que decir que el ministro de
- Page 795 and 796:
-¿Y aspiráis a ser superintendent
- Page 797 and 798:
gran talento, y le hubiese dicho so
- Page 799 and 800:
-Perdonadme, señora duquesa; es ca
- Page 801 and 802:
apareció luego ante el señor Colb
- Page 803 and 804:
-Es que yo no he hablado de suplant
- Page 805 and 806:
-Por tanto, ¿consentís en reempla
- Page 807 and 808:
-Preciso es que la ocasión sea bue
- Page 809 and 810:
-Hay una cosa en que ni uno ni otro
- Page 811 and 812:
La duquesa se rió y repuso al inst
- Page 813 and 814:
-Verdad es. -Pues las flamencas no
- Page 815 and 816:
-¿Cómo es eso, señora duquesa? -
- Page 817 and 818:
-¿A la reina? -¿Lo habíais ya ol
- Page 819 and 820:
Palacio que he sido vuestro introdu
- Page 821 and 822:
Colbert se aproximó a las lámpara
- Page 823 and 824:
nel hojeaba impasiblemente su volum
- Page 825 and 826:
-Es que yo creo que dentro de poco
- Page 827 and 828:
-El señor de Gourville... Él señ
- Page 829 and 830:
-Tened presente el proverbio, monse
- Page 831 and 832:
-Conozco bastante al señor de La F
- Page 833 and 834:
-Sed fácil en concesiones. -Sí. -
- Page 835 and 836:
siguientes palabras, propias de su
- Page 837 and 838:
-El trabajo, Motteville, el trabajo
- Page 839 and 840:
¿Era aquello recuerdo, meditación
- Page 841 and 842:
sus lágrimas, a la señora de Mott
- Page 843 and 844:
ojos brillantes a través de los ag
- Page 845 and 846:
que el Cielo les envía. Hablad, se
- Page 847 and 848:
si os sentís inspirada de Dios, co
- Page 849 and 850:
-El alumbramiento de Vuestra Majest
- Page 851 and 852:
vió a Laporte para avisar al rey q
- Page 853 and 854:
-Se sabe -continuó con viveza la b
- Page 855 and 856:
Y la reina, apoyando la cabeza en e
- Page 857 and 858:
-¿Sabéis -dijo que ha sido mal he
- Page 859 and 860:
la eternidad, se cuenta el de poner
- Page 861 and 862:
-Muerto de consunción, muerto olvi
- Page 863 and 864:
-Al siguiente día, ayo y niño hab
- Page 865 and 866:
-Señora, me abrumáis con esas dul
- Page 867 and 868:
-Lo tendré en cuenta, señora. - L
- Page 869 and 870:
-¿Y nadie quiere prestároslos? -N
- Page 871 and 872:
De algún tiempo a esta parte, el d
- Page 873 and 874:
-Mi tía me ha prestado veinticinco
- Page 875 and 876:
-¿Descansado? ¡Ah, sí! Buen desc
- Page 877 and 878:
componer un poemita extremadamente
- Page 879 and 880:
Todavía resonaban los escudos cuan
- Page 881 and 882:
-¡Ea -exclamaron de todos lados-,
- Page 883 and 884:
-Al contrario -dijo Loret-, de la t
- Page 885 and 886:
uno: "Mucho calor debéis tener en
- Page 887 and 888:
-Pero el señor superintendente no
- Page 889 and 890:
fiscala general, y que se perece to
- Page 891 and 892:
-No lo creo -dijo La Fontaine. -¡Q
- Page 893 and 894:
Un cuarto de hora después fue intr
- Page 895 and 896:
-Si no fuese por la molestia de ten
- Page 897 and 898:
Y mostraba con el dedo la puerta se
- Page 899 and 900:
otro modo; pero queda el interés d
- Page 901 and 902:
las fiestas ministeriales hacia el
- Page 903 and 904:
e, con toda esa masa de joyas agrup
- Page 905 and 906:
Fouquet aplicó el oído, y despué
- Page 907 and 908:
to, donde la dejó confiada a los m
- Page 909 and 910:
-¿No habéis oído hablar jamás d
- Page 911 and 912:
-No; el cardenal los hizo colocar a
- Page 913 and 914:
-¿Y qué deducís de eso? -pregunt
- Page 915 and 916:
-Porque el proceso contra esos mini
- Page 917 and 918:
como había creído corresponder a
- Page 919 and 920:
más riesgos que beneficios puede r
- Page 921 and 922:
na. -Que se llama Vanel. Aramis se
- Page 923 and 924:
-El señor Vanel -dijo Gourville ap
- Page 925 and 926:
Fouquet hizo cierta inclinación de
- Page 927 and 928:
-¡Oh, monseñor! -Tranquilizaos, s
- Page 929 and 930:
Fouquet se detuvo. La frase os rueg
- Page 931 and 932:
sus intereses están en abierta opo
- Page 933 and 934:
¡Oh! El dinero es lo de menos; sí
- Page 935 and 936:
-No puedo -respondió Vanel sordame
- Page 937 and 938:
Vanel, aterrado, parecía buscar un
- Page 939 and 940:
un arma de que se sirven con frecue
- Page 941 and 942:
mo; hoy voy a ser ya el hombre de l
- Page 943 and 944:
ien, sea! ... Pero la razón es cla
- Page 945 and 946:
El lector ha visto desarrollarse pa
- Page 947 and 948:
corazón noble, orgulloso de hacer
- Page 949 and 950:
-Sí. Por vuestra salud, primero. -
- Page 951 and 952:
-¡Pronunciadla! ¡Tengo corazón,
- Page 953 and 954:
juro que no se trata de cosa alguna
- Page 955 and 956:
-Pues avistaos con él. Sabrá daro
- Page 957 and 958:
BRAGELONNE CONTINUA SUS INTER- ROGA
- Page 959 and 960:
No tengo entendimiento ni brazo; no
- Page 961 and 962:
-Imposible, repito... Tú eres como
- Page 963 and 964:
pués de haberme esforzado en ense
- Page 965 and 966:
-Parece que el rey ha mandado hacer
- Page 967 and 968:
-¡Tanto peor! Mira, Raúl, si se m
- Page 969 and 970:
-¡O muerto! -repuso Montalais con
- Page 971 and 972:
Raúl fue introducido inmediatament
- Page 973 and 974:
Madame se había visto en extremo l
- Page 975 and 976:
Pero, recobrándose al punto: -¿Cr
- Page 977 and 978:
-¡He ahí lo que los amigos llaman
- Page 979 and 980:
-En tal concepto, debo daros un avi
- Page 981 and 982:
escalera que había subido Raúl en
- Page 983 and 984:
-Pero, me permitiréis observar que
- Page 985 and 986:
-Pues bien, obtuvo del rey permiso
- Page 987 and 988:
conductora más que como el reo sig
- Page 989 and 990:
No sólo el retrato de La Valliére
- Page 991 and 992:
Una mirada clara y penetrante de Ra
- Page 993 and 994:
pegar mis labios, la vergüenza que
- Page 995 and 996:
En seguida se separaron los dos: Ra
- Page 997 and 998:
cias que acompaña a la fortuna y a
- Page 999 and 1000:
-¡Eh! ¿Cómo es eso? ¡Qué horri
- Page 1001 and 1002:
-No lo creáis. Figuraos que en lo
- Page 1003 and 1004:
Porthos es blando: nadie quiere arr
- Page 1005 and 1006:
to ciento y un amigos, al frente de
- Page 1007 and 1008:
-Y luego: "Señor, el caballo está
- Page 1009 and 1010:
-Comprendo -dijo Porthos-; una tram
- Page 1011 and 1012:
tal como lo soléis vos preparar. P
- Page 1013 and 1014:
Contestáronle que el conde de Sain
- Page 1015 and 1016:
Este madrigal, por ingenioso que fu
- Page 1017 and 1018:
prenderán los demás. Lo más tris
- Page 1019 and 1020:
-Eso es precisamente lo que voy a t
- Page 1021 and 1022:
eso no es posible; porque el señor
- Page 1023 and 1024:
Porthos que se hallaba de espaldas
- Page 1025 and 1026:
-Me parece comprenderlo ya por este
- Page 1027 and 1028:
-Señor -dijo gravemente-, ese es e
- Page 1029 and 1030:
-¡Conciencia culpable, señor. ¡O
- Page 1031 and 1032:
-Y me lo habéis hecho entender - c
- Page 1033 and 1034:
infeliz niña... ¡y sobre quien…
- Page 1035 and 1036:
Saint-Aignan se aproximó a Porthos
- Page 1037 and 1038: -Eso es otra cosa -dijo Porthos-; e
- Page 1039 and 1040: Por otra parte, Colbert, que no só
- Page 1041 and 1042: -Vuestra Majestad se dignó hacerme
- Page 1043 and 1044: fulminada por Fouquet, detuvo la pa
- Page 1045 and 1046: timo golpe, un golpe terrible a su
- Page 1047 and 1048: -¿Vanel? -Un amigo del señor inte
- Page 1049 and 1050: cuando Luis no veía a La Valliére
- Page 1051 and 1052: -¿Conoce Vuestra Majestad al baró
- Page 1053 and 1054: -¿Qué? -Tendrá razón. -¿Y es a
- Page 1055 and 1056: -Cuando Vuestra Majestad haya leíd
- Page 1057 and 1058: -¿Quién te ha dicho que el señor
- Page 1059 and 1060: Madame, que dispone de las llaves d
- Page 1061 and 1062: sagacidad, indicando que Madame hab
- Page 1063 and 1064: -¡Basta! Sabré separar lo justo d
- Page 1065 and 1066: que, esta vez, en lugar de defender
- Page 1067 and 1068: Semejante respuesta, dada en aquel
- Page 1069 and 1070: -¿Y qué? -replicó el rey. -El re
- Page 1071 and 1072: -Vuestra Majestad dijo que difería
- Page 1073 and 1074: -Habéis olvidado los usos de la Co
- Page 1075 and 1076: -Bien veis, señor, que me estáis
- Page 1077 and 1078: -¿Quién habla del honor del rey,
- Page 1079 and 1080: -No tenéis ese derecho como rey m
- Page 1081 and 1082: Y, diciendo esto, rompió Athos su
- Page 1083 and 1084: formalmente, instalándose, por el
- Page 1085 and 1086: ey hizo lo que ya saben nuestros le
- Page 1087: -¡Oh señor! El amor… tal vez al
- Page 1091 and 1092: -Señor -dijo Raúl-, perdonad; per
- Page 1093: -¡Qué sé yo! -dijo Athos. -Sí;