Super Memoria Alfa - Super Aprendizaje Alfa

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ESTRUCTURA DE LA MEMORIA
El cerebro es la “máquina” más perfecta y compleja. Está formado por más
de un billón de neuronas conectadas entre sí, cada una de las cuales
posee miles de receptores y transmisores, lo cual permite llegar a los
recuerdos en forma rápida por distintos caminos.
Todas las neuronas están interconectadas y pueden intercambiar en forma
instantánea toda la información que contienen; lo cual nos da idea del
poder inmenso que tiene el cerebro para aprender, para crear y para
recordar. Teniendo en cuenta que cada neurona tiene aproximadamente
una cantidad de conexiones igual a la unidad seguida de veinticinco ceros,
podemos inferir que el cerebro tiene un potencial de conexiones igual a la
unidad seguida de 10 millones de kilómetros de ceros.
El descubrimiento del código genético ha dejado boquiabiertos y
estupefactos a los científicos; pero mucho mayor será el asombro, el día en
que el ser humano descubra los poderes del cerebro. Por tanto, el reto del
futuro es el descubrimiento de los secretos del cerebro.
El cerebro puede procesar datos a la velocidad de la luz. Sólo necesita ¼
de segundo para percibir todas las características de un objeto. La
capacidad del cerebro es inmensa, pero está condicionado por hábitos muy
lentos, por la pobreza de sus contenidos y por temores.
El cerebro es una “máquina perfecta”. Percibe el mundo a partir de las
grabaciones internas que tiene como resultado de las experiencias vividas.
Jamás se equivoca en el procesamiento de los datos, las fallas se deben a
errores en la información inicial.; de aquí la importancia de establecer
premisas verdaderas, lógicas y valiosas; pues una vez establecidas se
desencadena el proceso en forma automática. Esta realidad exige ser más
objetivos, analíticos y selectivos, sobre todo, cuando se trata de
información que nos atañe en forma directa.
El cerebro procesa al día billones de mensajes. La mayoría de estos
mensajes son inconscientes pero el cerebro toma cuenta de ellos porque
son necesarios para la adaptación y para el desarrollo.
Nuestro cerebro procesa en un solo día más información que la que
procesó el cerebro de nuestros abuelos en toda su vida.
Pero la clave del éxito no está únicamente en la velocidad de procesar sino
en la selección de los datos procesados.
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