mientras no se demuestre claramente, en cada caso, lo que es apropiado o conveniente y lo queno lo es; y en cuanto a la cuarta, si se la reduce a último análisis, resulta simplemente unaapelación a las nociones subjetivas que uno posea. A estas consideraciones debe añadirse elhecho de que el Jesús que los evangelios nos describen es sumamente distinto del concepto judíode su época, acerca del Mesías. Es demasiado perfecto y maravilloso para ser el producto de lafantasía humana. Los mitos sólo surgen en épocas no históricas y eso, largo tiempo después de lapersona o acontecimiento que representan; en tanto que Jesús vivió T realizó sus maravillosasobras en el período más crítico de la civilización griega y de la romana. Por otra parte los escritosdel N. Testamento se publicaron demasiado pronto, después de la aparición actual de Jesús, loque impide la incorporación de semejante desarrollo mítico <strong>com</strong>o Strauss pretende. Esforzándosepor demostrar de qué manera la Iglesia, espontáneamente, originó al Cristo de los evangelios,toda esta teoría nos deja a obscuras, sin mostrarnos causa o explicación suficiente del origen dela Iglesia y del Cristianismo mismo. <strong>La</strong> interpretación mítica no ha tenido aceptación entre losestudiantes cristianos y tiene muy pocos adeptos en la época actual.Los cuatro métodos de interpretación últimamente mencionados pueden, a una, serdesignados <strong>com</strong>o racionalistas; pero bajo este nombre caben también otros que armonizan con lateoría naturalista, la mítica, la moral y la a<strong>com</strong>odativa, en cuanto a negar el elemento sobre.natural de la Biblia. Los métodos peculiares por medio de los cuales los señores F. C. Baur,Renán, Schenkel y otros críticos racionalistas, han tratado de retratar la vida de Jesús y deexplicar el origen de los evangelios, de los Actos y de las Epístolas, frecuentemente envuelvenprincipios igualmente peculiares de interpretación. Siga embargo, todos estos escritores procedencon suposiciones que, de hecho, dan por sentado lo que está en discusión entre naturalistas ysuper-naturalistas. Pero todos difieren entre sí notablemente. Baur rechaza la teoría mítica deStrauss y halla en los partidos petrino y paulino de la Iglesia Primitiva el origen de muchos de losescritos neotestamentarios. Estos partidos o facciones surgieron con motivo de la abolición deceremoniales del A. Testamento y del rito de la circuncisión. A los Actos de los Apóstoles losconsidera <strong>com</strong>o el monumento de pacificación entre estos partidos rivales, efectuada en laprimera parte del siglo segundo. Representa al libro, en su mayor parte, <strong>com</strong>o una ficción, en lacual su autor, discípulo de Pablo, representa a Pedro <strong>com</strong>o el primero en predicar a los gentiles, ya Pablo <strong>com</strong>o conformándose a diversas costumbres judías, asegurándose, en tal forma, unareconciliación entre los cristianos petrinos y paulinos. Por su parte, Renán sostiene una teoríalegendaria acerca del origen de los evangelios y atribuye los milagros de Jesús, al igual que lasmaravillas de los santos medioevales, en parte a la ciega adoración y al entusiasmo de susadeptos y, en parte, al fraude piadoso. Schenkel trata de hacer inteligibles la vida y el carácter deCristo despojándolo de lo divino y milagroso y presentándonos simplemente a un hombre.Es justo hacer notar que todas estas teorías racionalistas se destruyen una a la otra.Strauss le pinchó el parche al método naturalista de Paulus y Baur demostró que la teoría míticade Strauss es insostenible. Renán se pronuncia contra las teorías de Baur y demuestra lo manifiestodel fraude de pretender que las facciones petrina y paulina sean la explicación del origende los libros del N. Testamento, a la vez que esos libros expliquen lo de las facciones. El propiométodo de crítica, de Renán, parece ser <strong>com</strong>pletamente sin ley, y sus observaciones llenas deligereza y capciosas han hecho que muchos de sus lectores le consideren falto de toda convicciónseria o sagrada y <strong>com</strong>o hombre listo para emplear cualquiera clase de medios con tal de lograr sufin. Lo vemos continuamente introduciendo en las Escrituras sus propias ideas y haciendo decir asus escritores lo que, probablemente, jamás soñaron. Por ejemplo, supone que el hombre rico fueal lugar de sufrimiento porque era rico y que Lázaro fue glorificado a causa de su extrema
pobreza. Muchas de sus interpretaciones se basan en las suposiciones más insostenibles y sonindignas de tomarlas en serio para refutarlas. El resultado lógico está mucho más allá de suexégesis, en las cuestiones fundamentales de un Dios personal y de' una providenciapredominante.El desarrollo de la filos<strong>of</strong>ía especulativa por medio de Kant, Jacobi, Herbart, Fichte,Schelling y Hegel ha ejercido un influjo pr<strong>of</strong>undo sobre las mentes críticas de Alemania y haafectado el estilo y métodos exegéticos de muchos de los grandes estudiantes bíblicos del sigloXIX. Esta filos<strong>of</strong>ía ha tendido a hacer intensamente subjetiva la mente alemana y ha impulsado ano pocos teólogos a mirar tanto la Historia <strong>com</strong>o las doctrinas en relación con alguna teoríapreconcebida, más bien que en sus aspectos prácticos sobre la vida humana. Así vemos que losmétodos críticos de Reuss, Kuenen y Wellhausen, en su tratamiento de la literatura del A.Testamento parecen basados, no tanto en un examen ingenuo de todo el contenido de los librossagrados de Israel, <strong>com</strong>o sobre la aplicación de la filos<strong>of</strong>ía de la historia humana a los libros. Unestudio desapasionado de las obras de estos críticos induce a creer que .los argumentosdetallados con que pretenden sostener sus posiciones, no son los verdaderos pasos del caminoandado para alcanzar sus primeras conclusiones. Los varios ataques a la autoridad mosaica delPentateuco se ve claramente que ha sido una sucesión de arreglos. Una teoría crítica ha dadolugar a otra <strong>com</strong>o en los ataques a la credulidad de los evangelios; y los métodos empleados sonespecialmente de la naturaleza de un alegato especial para mantener una teoría preconcebida.Reuss, en el prefacio de su gran obra acerca de la Historia de las Escrituras Judías nos dice quesu punto de vista no es el de historia bíblica sino uno inferido de la <strong>com</strong>paración de los códigoslegales y <strong>com</strong>enzando con una "intuición" él se propuso "hallar el hilo de Ariadna que guiasefuera del laberinto de las hipótesis corrientes acerca del origen de los libros mosaicos y otroslibros del A. Testamento, a la luz de un curso psicológicamente inteligible de desarrollo para elpueblo israelita". Por consiguiente, su procedimiento es una tentativa ingeniosa para hacer que sufilos<strong>of</strong>ía de la historia en general explique los registros de la historia de Israel; y, lejos deinterpretar de acuerdo con principios legítimos los registros escritos, él los re-arregla de acuerdocon su fantasía y, de hecho, fabrica una nueva historia notablemente inconsistente con elsignificado obvio de los antiguos registros.Los ataques escépticos y los racionalistas contra las Escrituras han hecho surgir unmétodo de interpretación que podemos llamar apologético. Se propone defender, a toda costa, laautenticidad, genuinidad y credibilidad del sagrado canon, y sus puntos de vista y métodos sontan semejantes al de la Exposición Dogmática de la Biblia, que presentamos los dos juntos. <strong>La</strong>fase más criticable de restos métodos es que ellos, de hecho, parten con el objeto ostensible desostener una hipótesis preconcebida. <strong>La</strong> hipótesis puede ser correcta, pero ese procedimientosiempre está expuesto a conducirnos al error.Trata constantemente de descubrir deseados significados en las palabras y de desconocerel objeto y propósito general del escritor. Hay casos en los que está bien que se adopte unahipótesis y se la emplee <strong>com</strong>o un medio de investigación; pero en todos esos casos la hipótesissólo se adopta tentativamente, no la afirma dogmáticamente.En la exposición de la Biblia, la apología y el dogma tienen su puesto legítimo. <strong>La</strong>correcta apología defiende los libros sagrados contra la crítica desenfrenada o capciosa ypresenta sus derechos a ser considerados <strong>com</strong>o la revelación de Dios.Pero esto sólo puede hacerse siguiendo métodos racionales y por medio del uso de unalógica convincente. Así también las Escrituras son provechosas para el dogma, pero es necesariaque se demuestre que el dogma es una enseñanza legítima de las Escrituras y no una simple idea
- Page 1 and 2: La HermenéuticaPor M.S. TerryPrefa
- Page 3 and 4: Se espera que la lectura y estudio
- Page 5 and 6: Un intelecto vigoroso no estará de
- Page 7 and 8: significado obvio de las principale
- Page 9 and 10: que él titulaba "la Ciencia de las
- Page 11: momento oportuno, halló confirmada
- Page 15 and 16: CAPÍTULO IIILA HERMENÉUTICA EN GE
- Page 17 and 18: al llegar a su casa. Menos aún hub
- Page 19 and 20: Isaac (25:19), Esaú (36:1) y Jacob
- Page 21 and 22: Algunos maestros religiosos gustan
- Page 23 and 24: La verdadera interpretación de las
- Page 25 and 26: piedra fundamental escogida y preci
- Page 27 and 28: conociesen los acontecimientos de
- Page 29 and 30: profeta experimentaba al lamentar l
- Page 31 and 32: cuidar al traducir. Es esencial pre
- Page 33 and 34: El paralelismo sintético o constru
- Page 35 and 36: Porque fuego se encenderá en mi fu
- Page 37 and 38: debiéramos olvidar que las porcion
- Page 39 and 40: sus camellos eran innumerables, com
- Page 41 and 42: por mí como ilustraciones, repito
- Page 43 and 44: cierto que fueron "por el bautismo
- Page 45 and 46: Existe un elemento enigmático en e
- Page 47 and 48: de hallar su significado, a ir más
- Page 49 and 50: alcanzar valor práctico mediante s
- Page 51 and 52: han hecho algunos, como el sueño d
- Page 53 and 54: interpretación correcta. Así vemo
- Page 55 and 56: de entrar a mi servicio. No es el m
- Page 57 and 58: grave error de que hay que guardars
- Page 59 and 60: sois, edificio de Dios sois". Luego
- Page 61 and 62: las acciones y palabras de aquellos
- Page 63 and 64:
de Sara, pero él jamás, ni por un
- Page 65 and 66:
En el paralelismo antitético de Pr
- Page 67 and 68:
plenitud de los tiempos se proponí
- Page 69 and 70:
alfarero y el observar cómo trabaj
- Page 71 and 72:
Jesucristo, la dádiva gratuita de
- Page 73 and 74:
mismo, los higos buenos representan
- Page 75 and 76:
como poderes mundiales conquistador
- Page 77 and 78:
porque todo lo que su pueblo puede
- Page 79 and 80:
vestiduras sagradas, primeramente o
- Page 81 and 82:
notable, no existe objeción a su o
- Page 83 and 84:
Sin embargo, el haber realmente ocu
- Page 85 and 86:
al mismo tiempo, todos los ensueño
- Page 87 and 88:
que para que un hombre mortal recib
- Page 89 and 90:
los hombres adoraban de una manera
- Page 91 and 92:
otras profecías del Cristo y del r
- Page 93 and 94:
enemistad permanente entre la serpi
- Page 95 and 96:
notable, quizá, es que Ezequiel ti
- Page 97 and 98:
Miqueas a Isaías (Vitringa, Lowth)
- Page 99 and 100:
Y está por parir un hijo,Y llamar
- Page 101 and 102:
Y llamaráse su nombre Pele-yo'ets'
- Page 103 and 104:
casa (1 Sam. 10:2-7) y el método e
- Page 105 and 106:
devora (v. 4) hasta que toda vegeta
- Page 107 and 108:
de los teólogos evangélicos puede
- Page 109 and 110:
con seguridad que las conquistas de
- Page 111 and 112:
Daniel tanto valor como a las de lo
- Page 113 and 114:
La revelación final contenida en D
- Page 115 and 116:
Jesús mismo les había dicho: "Des
- Page 117 and 118:
Nueva Jerusalén (21:2). Sería con
- Page 119 and 120:
persecuciones (comp. Act. 8:1) pero
- Page 121 and 122:
del ángel intérprete, aun cuando
- Page 123 and 124:
no hagamos a un lado toda idea dogm
- Page 125 and 126:
suplantados por la muchedumbre innu
- Page 128 and 129:
las Escrituras. Es peor que contrar
- Page 130 and 131:
362. New York, 1879). Las Escritura
- Page 132 and 133:
una alusión o referencia, no una c
- Page 134 and 135:
en los Profetas y en los Salmos" (L
- Page 136 and 137:
oyentes; es decir, condescendió a
- Page 138 and 139:
podido dar lugar a discrepancias (x
- Page 140 and 141:
Al lector moderno puede parecerle q
- Page 142 and 143:
transformó en "el apóstol de los
- Page 144 and 145:
CAPÍTULO XXARMONIA Y DIVERSIDAD EN
- Page 146 and 147:
Lucas, el compañero de Pablo, regi
- Page 148 and 149:
desarrollos de vida nacional. Para
- Page 150 and 151:
falibilidad de todos los hombres, s
- Page 152 and 153:
theon) y se añade la declaración
- Page 154 and 155:
su más amplio sentido) no habló a
- Page 156:
ambos Testamentos son, esencialment