11.08.2016 Views

MESA 012

En la próxima edición de MESA ABIERTA celebramos nuestro primer aniversario, por lo que será el número más especial del año. Además, coincide con el comienzo de Carnavales, así que... ¡no se pierdan todas las sorpresas que tenemos preparadas para los amantes de la gastronomía!

En la próxima edición de MESA ABIERTA celebramos nuestro primer aniversario, por lo que será el número más especial del año. Además, coincide con el comienzo de Carnavales, así que... ¡no se pierdan todas las sorpresas que tenemos preparadas para los amantes de la gastronomía!

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

| COCINA ÉTNICA |<br />

Luchas por coger tu<br />

equipaje de mano y<br />

salir cuanto antes del<br />

avión, pasas largas<br />

colas en inmigración,<br />

recoges tu maleta de la cinta transportadora, pasas el<br />

último filtro de seguridad... Y, por fin, sales a la calle.<br />

El calor es sofocante y te envuelve una pegajosa sensación<br />

de humedad, ese raro olor que lo inunda todo, los<br />

gritos de los taxistas intentando llamar tu atención. En<br />

ese preciso momento, sonríes y te dices a ti mismo, ¡ya<br />

estoy en Bangkok!<br />

La puerta del Sudeste asiático se abre ante ti, ofreciéndote<br />

infinidad de experiencias, sabores, olores, cultura,<br />

una ciudad vibrante, todo aquello y más, que venías<br />

imaginando por el camino.<br />

Tras estar unos minutos asimilando la nueva situación,<br />

te decides a coger un taxi.<br />

El trayecto en taxi hasta el hotel es desesperante, más<br />

de hora y media para llegar, el tráfico de Bangkok es<br />

cosa seria. Pero también te permite tener una buena<br />

perspectiva de lo que te espera. La vista de la ciudad<br />

desde las autopistas elevadas deja al descubierto la<br />

inmensidad de esta urbe asiática, a lo lejos se divisan<br />

algunos rascacielos y templos. A medida que nos<br />

acercamos al centro el tráfico es más denso, las calles<br />

más estrechas, motos, Tuk Tuk, bicicletas, gente por<br />

todos lados, chiringuitos de comida callejera en cada<br />

esquina, puestos que venden desde ropa hasta cualquier<br />

cosa que imagines... El camino aunque es largo,<br />

se hace entretenido.<br />

De repente, el taxi se para justo delante de un puesto<br />

callejero que vende fruta y que está en la entrada<br />

de un callejón un tanto sospechoso. Bajas del taxi<br />

y miras a tu alrededor y no hay ningún cartel con<br />

el nombre de tu hotel. Preguntas al taxista y él, con<br />

una sonrisa y con gestos, te indica que entres en el<br />

callejón, estrecho, sucio, oscuro y maloliente. Dentro<br />

había puestos de comida, lavanderías, mecánico de<br />

motos, una obra de reparación de tuberías, peluquerías...<br />

¡Y, por fin, el hotel!<br />

ATERRIZANDO<br />

EN BANGKOK<br />

Khao San Road<br />

Tres aviones, dieciséis horas de vuelo y<br />

otras tantas de espera en las terminales<br />

de los aeropuertos, cuatro películas,<br />

seis horas de pegar cabezadas contra la<br />

fría y dura ventanilla del avión, dos<br />

revistas de gastronomía, unas páginas<br />

sueltas de un libro y tres insípidas<br />

comidas aéreas… Por fin, aterrizas.<br />

Una ducha rápida y<br />

empieza el día, ¡He<br />

venido a comerme<br />

Bangkok!<br />

Tras salir del hotel por ese pintoresco callejón y caminar<br />

unos 300 metros te tropiezas con el primer sitio para<br />

desayunar que parece interesante, un pequeño restaurante<br />

indio que se llama Roti-Mataba, que se encuentra<br />

a orillas del río Chao Phraya, cerca de la calle Khao San<br />

Road. La especialidad de este lugar son los rotis-paratas,<br />

unos deliciosos creps rellenos de huevo que pueden<br />

llevar distintos ingredientes; verduras, pollo, pescado,<br />

marisco o ternera, aderezados con cebolleta, chiles<br />

frescos, cilantro y especias. Como acompañamiento se<br />

sirven pepinos encurtidos en vinagre de arroz, azúcar,<br />

salsa de pescado y chiles verdes. La masa de este crep<br />

es muy elástica y con bastante contenido en grasa, casi<br />

hojaldrada, que al cocinarse en una plancha circular de<br />

hierro queda crujiente a la par que suave.<br />

Mientras sigues tu caminata por la ciudad te vas encontrando<br />

una oferta gastronómica descomunal en plena<br />

calle; zumos de frutas recién exprimidas apilados<br />

en hielo picado, puestos de tallarines y sopas, bolsitas<br />

transparentes rellenas de guisos de curry, ensaladas,<br />

pescados secos y fermentados, satays, pollo marinado y<br />

frito con harina de arroz, rollitos de primavera, brochetas<br />

de salchichas, pescados enteros cocinados a la barbacoa,<br />

pollo a la parrilla envuelto en hojas de plátano....<br />

Y mientras vas picando algo, como por ejemplo unos<br />

curiosos snacks de cacahuetes; la masa está hecha con<br />

harina de arroz y agua, en la que se sumergen pequeños<br />

cacahuetes sin repelar, se colocan en un molde de<br />

metal, previamente calentado en el aceite, se retira el<br />

exceso de masa semilíquida y se introducen en el aceite<br />

muy, muy caliente; se fríe hasta que la masa cuaje y<br />

flote, a continuación se pone en otro wok con aceite a<br />

menor temperatura para terminar la cocción. Se dejan<br />

escurrir y se envasan en pequeñas bolsitas de plástico.<br />

El resultado, una especie de galleta muy crujiente y sabrosa.<br />

Se acerca el mediodía y después de tanto caminar empieza<br />

a apretar el hambre. Al final de la calle, en una esquina,<br />

te topas con el Restaurante Hong Kong Noodles,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!