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poder dar paso a la iniciación de nuevas etapas en los cursos de transmisión de
energías que vamos a llevar a cabo dentro de un corto espacio de tiempo.
6. A todos aquellos hermanos que de un modo u otro, en el sentido
de consciente o inconsciente, están esperando la iniciación que sepan que les
acogemos como verdaderos hermanos que son, que sois, y celebramos juntos un
nuevo día, una nueva etapa para ir sumando personas, espíritus, en este
proceso de regeneración, en este proceso de cambio, que definitivamente nos va
a llevar a consolidar las tan ansiadas o esperadas sociedades armónicas. Este es
un proceso que está previsto que así sea.
7. Es un gran cuadro que se está dibujando o pintando para llevar a
todos el convencimiento de que todo es de todos. Y de que formamos parte de
un gran mosaico, y de que todos y cada uno somos necesarios para rellenarlo. Y
si falta uno tan solo de esos puntos mágicos del mosaico, el mosaico quedará
incompleto.
III. A NADIE DEBEMOS EXCLUIR
8. Esto quiere decir que debemos dar la bienvenida a cada uno, sin
exclusión. En todo caso será uno mismo el que se excluirá, y entonces ya no
formará parte de dicho mosaico. Por lo tanto, será el mosaico de todos y cada
uno de aquellos que así habrán querido que sea.
9. Eso mismo pasa en los grupos, en los equipos de trabajo, a nadie
debemos excluir, ya es suficiente con que cada uno se auto-excluya, ¿para qué
vamos a propiciar el hecho de una salida, cuando no nos corresponde tal misión
u obligación, sino que le corresponde al individuo por su libertad de ejercer él
tal derecho?
10. Ahora mismo estamos consolidando una nueva etapa en Tseyor,
es una etapa muy importante. Cada vez lo es más porque cada vez el grupo vibra
con más intensidad. Y esto puede llevar también a que muchos abandonen el
proceso por mil y una circunstancias. Esto es normal, será normal que así se
produzca. Es la propia selección cósmica que actúa de ese modo.
11. Aquí nada podemos ni debemos hacer. Porque en este grupo, en el
Grupo Tseyor, a nadie se obliga, aunque sí se invita a todos. Pero a nadie se le
obliga a permanecer en tal o cual departamento, equipo de trabajo o labor, sea
la que sea.
IV. LAS SOCIEDADES ARMÓNICAS NO TIENEN CONTROL
PIRAMIDAL
12. Precisamente las sociedades armónicas de este futuro ya tan
próximo en el tiempo, se distinguirán por no tener un control piramidal. Ni se
ejercerá ningún derecho por parte de nadie, sino que el derecho partirá de
todos, y la obligación también.
13. Es difícil poder plasmar ahora, en estos momentos, algo que
obedece a un planteamiento muy mucho de intuición y creatividad. Pero se
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