Descarga Manual del Curso (PDF) - Acción Juvenil

“Introducción a la JODCA”
FÓRMULAS PARA EL INICIO
Frase célebre, dando el crédito al autor.
Refrán.
Estrofa de un poema.
Pregunta abierta.
Frase propia.
Suceso personal.
Anécdota.
Presentación de un objeto.
Historia.
Dato estadístico.
Cita de una obra literaria.
Frase incompleta.
Juego de palabra
DESARROLLO DEL DISCURSO
Lo que distingue a la oratoria de otros géneros es su fin: la persuasión. La mejor forma de
persuadir es hacerlo conforme a la naturaleza humana, aludiendo a la razón, a los
sentimientos, de manera estética.
El que utiliza argumentos enfocados únicamente a los sentimientos, podrá ser poeta, pero no
orador; quien realiza una disertación y únicamente hace referencia a la razón, podrá ser
filósofo, pero no orador. Orador sólo es aquella persona que persuade con razones a la
inteligencia, con emociones a la voluntad y en forma bella, agradable.
Cabe apuntar que no existen, propiamente, partes específicas o aisladas que estén
destinadas a la razón o a los sentimientos en un discurso; más bien, en todo momento es
posible conmover y convencer. Ante un auditorio reducido es preferible un discurso más
racional que emotivo, pero ante un auditorio numeroso es aconsejable un discurso más
apasionado que argumentativo. Sin descuidar ninguna e las partes.
No se debe olvidar que el discurso es la parte más importante de la oratoria, porque contiene
el mensaje que se quiere trasmitir.
Existen tres zonas que deben manejarse dentro de un discurso, aunque el exceso o la
reducción de una u otra dependen del auditorio:
Zona azul. Comprende argumentos racionales, implica manejar datos, estadísticas y
definiciones.
Zona roja: Mueve a la pasión a través de imágenes y anécdotas. Tiene como objetivo
despertar sentimientos en el auditorio.
Zona verde: Utilizar palabras que conmuevan al auditorio sobre del problema que se
está exponiendo. Dicha zona se puede suavizar con una reflexión positiva al final del
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