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montana esta: que hacian su noviciado
con los otros monjes en el Monasterio,
y quedaban siempre sujetos á él; eran
conventuales suyos, y de él recibian
todos los auxilios espirituales y corpo
rales, en salud y enfermedad, en vida
y despues de muertos.
Pues bien ; para que no hubiesen de
bajar al Monasterio é interrumpir su
silencio, aislamiento, recogimiento y
ejercicios de oracion y labor de manos
á que estaban dedicados todo el ano
(exceptuados cinco 6 seis dias de los
mas solemnes, que bajaban y se incor
poraban con la Comunidad cenobítica),
para socorrer sus necesidades, cada se
mana el Monasterio les proveia de lo
temporal, y para lo espiritual les tenia
destinado un Monje sacerdote, que con
el título de Vicario del Abad y Vicario
de la montafia , estaba todo el ario no
che y dia junto á ellos.
Este monje Vicario de ordinario tenia
su morada en esta arruinada ermita,
que por su posicion céntrica servia de
parroquia para todos los ermitanos, y
por lo mismo su iglesia era mayor que