Untitled

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al pié del trono, cuando hé aquí que
oye á Maria que le dice:
« ! Feliz y bendito representante de
mi h?jo Jesus y del pueblo catalan ! Tú
has sido el predestinado para sacarme
•de este secreto lugar, y colocarme en el
públioo y eterno trono que me ha de
signado mi Hijo ; llégate ya, y lléva
me...»
Y el pobre Obispo... ! ah I ( yo no sé
porque he llamado pobre á tan feliz
criatura) y-el Obispo lleno de un gozo
inefable, se acerca, se postra, con lá
grimas adora el suelo que sustenta la
santa Imágen, le besa primero los piés
y luego las manos, y cogiéndola sin sen
tir su peso, y haciéndose propias las pa
labras de Simeon, empieza. la proesion
entonando el cántico : Nunc
quesiguieron inspirados los paltorcillos
y demás de la comitiva, y repitieron los
ecos de los mil ángeles, que acompa
nándolos á , los libraban de ofen
der sus piés en los guijarros y malezas,
y luego continuaron alternando elcán
tico Magnificqt por el mismo camino que
habian traido hasta llegar á lo alto del