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Edición a careo dc Jordi Amat Fusté, Blanca Bravo y Ana Díw-Plaja ...

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y de la admiración que sentía por la cultura republicana ("era<br />

un intelectual liberal que nunca se dejó captar por la misera-<br />

ble propaganda del régimen fascista").<br />

Una carta siempre insinúa el perfd de quien la escribe. No<br />

se trata aquí de defender su posible literariedad, indiscutible<br />

en ocasiones, sino de que la forma de una carta revela un pen-<br />

samiento y una actitud gestados en la alteridad, es decir, naci-<br />

dos por y para el otro, a quién se escribe. Si se trata además de<br />

la carta de un escritor o de un intelectual tenemos la ocasión<br />

de comprobar como se recurre a un instrumento, el lenguaje,<br />

ya consolidado previamente, sin que exista ninguna preocupa-<br />

ción por la novedad del mismo, como sí ocurriría si el mismo<br />

escritor, o intelectual, en lugar de una carta concibiera un tex-<br />

to orgánico, pensado para la publicación. De modo que leer<br />

cartas de escritores es como ver la maquinaria de un oficio<br />

desprovisto de sus tensiones y exigencias artísticas. Así, cada<br />

corresponsal genera sus propias rutinas, sus pautas expresivas,<br />

su forma de concebir un espacio comunicativo que prefigura<br />

ya una determinada respuesta (la carta cordial recibe cordiali-<br />

dad, mientras que la carta hostil será devuelta probablemente<br />

con otra dosis de hostilidad).<br />

En una carta el lenguaje se desliza sobre un tapis roulant,<br />

recuperando realmente la condición primera que tuvo el arte<br />

clásico: la instrumentalidad. El lenguaje alcanza el estado de<br />

una ecuación pura, que diría Uarthes, sin m6s espesor que un<br />

álgebra frente al hueco de un hombre que no está (y por eso se<br />

le escribe). Ese hueco aquí tiene un nombre: se llama Guiller-<br />

mo Díaz-<strong>Plaja</strong>. Y cuántos hemos colaborado en este proyecto,<br />

que puede ver la luz gracias a la generosa colaboración de la<br />

Academia de Bones Lletres y la Universitat de Barcelona, aspi-<br />

ramos a recuperar con él la memoria de lo que fue y de cu8n-<br />

to trabajó.<br />

ANNA<br />

CABALLE<br />

Unidad de Estudios Biogrdficos de la UB

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