Edición a careo dc Jordi Amat Fusté, Blanca Bravo y Ana Díw-Plaja ...

guerra civil y, después, las intrigas y tejemanejes de la posguerra
no fueron ajenos a que no pudiera recuperarlo pese a sus intentos.
En ese sentido, la carta de Ferrer-Cajiga1 de 1935, animándole
a presentarse a las oposiciones universitarias, una vez
conseguida plaza como "Profesor Secundario': contrasta con las
cartas de Joaquín Entrambasaguas, fechadas el 7 de diciembre
de 1939 y el 13 de noviembre de 1941, o el comentario de Castro
y Calvo recogido por Blecua en una carta fechada el 4 de
mayo de 1943, que dejan entrever mucho más de lo que dicen.
Por el contrario, y una vez sufrida la correspondiente depuración
como cursillista del 34 por parte del Régimen, desde
su cátedra del Instituto Balmes de Barcelona supo compensar,
al menos en parte, aquel quebranto. Una carta de 1945 o
1946 de Antonio Vilanova recoge una de las premisas fundamentales
del magisterio de Diaz-Plaja: "airoso equilibrio entre
la erudición y la retórica'' y el reconocimiento de que son
muchos los estudiantes que "deben su formación literaria a
las lecciones que han recibido en su clase': mientras él, que
no ha sido su alumno, ha tenido "en sus libros un sabroso
aprendizaje de buen gusto"; formación y buen gusto que, salvo
contadísimas excepciones, brillaban por su ausencia en el
ámbito universitario. Quizás, la filiación dorsiana, apuntada
por Ana Dia~-Plaja,~'~ sea un factor a tener en cuenta para
explicar el método pedagógico que subyace en su manera de
dar cuenta del fenómeno literario, esto es, captarlo, encajarlo
en su contexto y cotejarlo con lo que ocurría fuera de nuestras
fronteras. Objetivo que realmente consiguió al sistematizar,
de manera ordenada y coherente, la literatura hispáiiica,
en sus innumerables libros de texto, y sobre todo en su magna
Hisloria General de las Literaturas Hispánicas, aludida
tambiéii en difcrentes misivas.
En las cartas encontramos taiiibién testimonios de su dilatada
actuación como director al frente del entonces "Instituto
del Teatro': Por estas sabemos que la lección inaugural del cur-
314. Ana Díar-Plaja, art. cit.. p. 21.