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RENTAS DE LA CORONA.
Consisten estas en la imposición y cobranza de ciertos
tributos ó impuestos , cuyos rendimientos sean
suficientes á mantener el decoro y dignidad de la Real
Persona y Familia, yá cubrir todas las cargas indispensables
del Estado.
No siendo del caso tratar en este lugar de quales
fueron los primeros que se conocieron en España:
con qué nombres se distinguieron entonces: orden progresivo
con que después han sido substituidos por otros
de diferente naturaleza ; ni la forma y reglas que se
han observado en su administración, porque esto está
tratado extensamente en otras obras ya publicadas, no
lo permite la reducida esfera de la presente , y el execrarlo
como por continuación á ellas , teniendo á la
vista las variaciones hechas después de su publicación,
exige un trabajo separado, capaz por si solo de ocupar
un tomo de bastantes páginas , que no dexo de tener
adelantado, ni perderé de vista hasta concluirlo y publicarlo,
me limitaré á designar las Rentas cuya administración
, manejo y cobranza está encargada á la
Dirección general por el Real decreto de 16 de abril
de 1816 , e Instrucción aprobada por S M. con la propia
fecha ; y quales son, según esta misma,su autoridad
, facultades y obligaciones.
Las Rentas encomendadas á su cuidado son las de
aduanar y lanar, conocidas con el título de Rentar genera'.er
, las provincialer , tabaco , ral, papel reliado , terciar
Reales , excusado y noveno , salitre , pólvora , pío •
tno , azogue, azufre y demás comprehendldas baxo la
denominación de siete rentillas ; y las fábricas y minas
que pertenecen á varios de estos ramos.
La Dirección general de rentas, con subordinación
al Sr. Secretario de Estado y del Despacho universal
de Hacienda Superintendente general de este ramo,
es la autoridad superior, directiva, económica y administrativa
de las rentas Reales, y de las fábricas,
factorías y minas , á no ser que por especial mandato
de S. M. esteu algunas al cargo de otros Cuerpos