El Avisador Malagueño REVISTA HISTÓRICO-CULTURAL ONLINE
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2 9 | E L A V I S A D O R M A L A G U E Ñ O<br />
mas relacionados con la propiedad, sus instalaciones se fueron<br />
deteriorando hasta llegar al abandono total. Ya en 1860 el director<br />
de aquella temporada, el Dr. Martín Yébenes, decía: “…<br />
pues los Baños de las Rozas o Vilo, eficacísimos y muy favorecidos<br />
por la naturaleza, se encuentran abandonados…y este deplorable<br />
abandono reconoce por causa principal el no tener dueño que lo<br />
mejore”.<br />
Un año más tarde, el mismo doctor escribe sobre un dueño<br />
que vivía en Periana, y de una tardía reivindicación de la propiedad<br />
por parte del Ayuntamiento de Vélez, en disputa con el<br />
de Periana, los veleños aducían que la ciudad de Vélez, desde<br />
la conquista, tenía señorío sobre todas las aguas que nacen en<br />
la comarca y, además había costeado todas las obras ejecutadas;<br />
Periana se defiende argumentando que era cierto lo expuesto,<br />
pero que la independencia del municipio en 1761 llevaba consigo<br />
la propiedad de todos los bienes públicos.<br />
Tras algunos tiras y aflojas, el conflicto se solventó en 1866<br />
con la intervención del Gobierno de la Provincia, que concedió<br />
a Periana el derecho de la propiedad, aunque no dejaron<br />
de aparecer quienes pretendían ser sus legítimos propietarios,<br />
incluso de forma fraudulenta; tras esto y sin haber constancia<br />
de cómo llegó a ser su legítimo propietario Rafael Zamora,<br />
este vende al doctor Antonio Álvarez en la temporada de 1875<br />
la propiedad, que consistía en una extensión de 18 áreas, 15<br />
centiáreas y 6.779 cm 2 (1.840 metros cuadrados) donde se encuentran<br />
dos albercas de aguas minerales y ”un departamento<br />
contiguo a ella con varias oficinas para tomar baños templados y<br />
una casa ermita de un solo cuerpo”.<br />
Aparece un nuevo comprador de la propiedad en 1887, el<br />
Dr. don Miguel González Gosálvez, que lo vende en el año 1896<br />
a don Emilio de San Martín y Villa, quien realizó en la propiedad<br />
una serie de mejoras. Años más tarde, en 1907, el mismo<br />
de la famosa riá de Málaga, una tormenta arrasó las instalaciones<br />
del edificio termal, llegándose, como indicaba líneas más<br />
arriba a su abandono total.<br />
Es ya a partir de los años 90 cuando el Ayuntamiento de<br />
Periana se interesa por su recuperación convirtiéndolo en un<br />
lugar de relax y disfrute de sus aguas curativas y de la riqueza<br />
paisajística de su entorno, poniendo en el año 2006 en funcionamiento<br />
los cinco apartamentos rurales ejecutados por iniciativa<br />
municipal. •