Lenka21Mag 2014/03/21 - Lenka21

GASTRONOMÍA
CALÇOTS
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Calçotada en horno
Beatriz Botero Ordoñez 14/04/2014
No crean que me he vuelto forofa de la cocina, pero
hay veces que algunas cosas me salen bien, y la misma
alegría me impulsa a compartirlas, por si a alguien le
sirve.
Me invitaron a una calçotada. Son esa especie de
cebollas largas y muy densas, que no son cebolletas.
No me entusiasman, pero el escenario de las brasas,
ese humo con buen olor, y ese aspecto a medio
quemado, me hace gracia.
Lo que más me gusta de estas reuniones, además de la
compañía, es la salsa romesco con la que se untan,
para engullirlas luego, con un babero largo, que hace
todo muy cómico. Esa salsa me pierde. Y ahora les
explico cómo hago los calçots en el horno (ya sé que
parece una aberración, pero ya me perdonarán,
porque yo no tengo barbacoa), y luego les diré sobre el
gran descubrimiento de la salsa.
Los calçots los venden en Carrefour, aunque se pueden
comprar también por Internet, y por supuesto, en
Catalunya, que ahora es la época. Si se dan una vuelta
por allá, no dejen de probar la experiencia de
comerlos, y si pueden, de comprarlos, que envueltos
en papel de diario les aguantan unos días sin
problemas.
Lo suyo, ya es sabido, que es hacerlos en el campo, con
una fogata con llamas o con brasas, pero vamos a por
la alternativa, es decir. Calçots al horno
Un manojo de calçots (suelen venir 25 unidades en
cada manojo).
La Salsa Romesco.
Preparación
Cubrir de papel la encimera, porque traen tierra y se
mancha la cocina muchísimo, y cortamos muy poco la
parte de arriba del calçot.
Quitamos la “primera camisa” y los lavamos bien de la
tierra que traen, secándolos con papel de cocina.
Precalentamos el horno a 180 º, por arriba y por abajo,
y untamos la bandeja del horno con aceite de oliva.
Ponemos los calçots, y echamos un pequeño chorro de
aceite por encima.
En media hora estarán, tiempo para hacer la salsa. Se
sirven en una fuente o plato alargado. Se comen
quitando más “camisas” de las cebollas tiernas
(calçots), de hecho lo que se come son las capas más
internas y más jugosas.
Se mojan, calientes, en la salsa romesco , y a comer.
Venden salsas ya envasadas, pero les explicaré cómo
hago yo la mía, que tiene un punto especial.
Los ingredientes:
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