El legado de los inmigrantes - Publicaciones Periódicas del Uruguay
El legado de los inmigrantes - Publicaciones Periódicas del Uruguay
El legado de los inmigrantes - Publicaciones Periódicas del Uruguay
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
-En lo doco, estoy -contestaba el seudo enfermo-<br />
refiriéndose a que hacía las veces <strong>de</strong> gallina<br />
clueca, cuado ésta daba calor a sus pollueles"<br />
(ROSSI, 1926, n, 67-68).<br />
<strong>El</strong> cronista apunta un dato importante. Si <strong>los</strong> vecirios<br />
saludaban al "buen engendrador", y ésta era,<br />
al parecer, una f6rmula consagrada por la tradición,<br />
se reconoda -quien sabe <strong>de</strong>s<strong>de</strong> qué profundida<strong>de</strong>s<br />
en el tiempo- el papel genésico y jurídico<br />
<strong>de</strong>l hombre, señalando su <strong>de</strong>recho a la <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>ncia<br />
patrilineaI. <strong>El</strong> zorro-doca, por su parte, era solamente<br />
el doco, el clueco. La en<strong>de</strong>blez anecdótica<br />
<strong>de</strong>l relato <strong>de</strong> Rossi no autoriza a sacar ningún<br />
otro tipo <strong>de</strong> conclusiones; no obstante sirve para<br />
revelar la indudable presencia <strong>de</strong> la covada en<br />
<strong>los</strong> pagos canelonenses.<br />
<strong>El</strong> mismo Rossi, en el citado libro (n: 82),<br />
da cuenta <strong>de</strong> otra costumbre canaria trascuIturada:<br />
"Entre <strong>los</strong> canarios <strong>de</strong> las «idas» fue norma, como<br />
<strong>de</strong>claración <strong>de</strong> amor, que el hombre provisto <strong>de</strong><br />
un «tolete» (macana o bastón, generalmente <strong>de</strong><br />
membrillo) lo arrojase al pasar al interior <strong>de</strong>l rancho<br />
<strong>de</strong> SU adorado tormento, a la vez que gritaba<br />
a todo pulmón: «Tolete aentro». Pero a veces<br />
resultaba que el e",amcraoo galán no era persona<br />
grata a la madre <strong>de</strong> la pretendida; y entonces ésta,<br />
recogiendo el palo, 10 arrojaba lo más lejos posible<br />
<strong>de</strong> <strong>los</strong> ranchos al grito «Tolete ajuera». Esta actitud<br />
no significaba otra cosa que el rechazo <strong>de</strong><br />
la <strong>de</strong>manda <strong>de</strong> amor <strong>de</strong>l pretendiente."<br />
La voz tolete, aunque no registrada en el V0<br />
cabulario Rioplatense <strong>de</strong> Daniel Granada o el<br />
Diccionario <strong>Uruguay</strong>o Documentado <strong>de</strong> la Aca<strong>de</strong>mia<br />
Nacional <strong>de</strong> Letras, tuvo vigencia en nuestro<br />
campo. Se le utilizó con sentido picaresco en la<br />
<strong>de</strong>signación <strong>de</strong> un basto imaginario, el "recadotolete",<br />
traviesamente fraguado para que <strong>los</strong> maturrangos<br />
se mantuvieran a caballo. <strong>El</strong> tolete es<br />
un palo corto, <strong>de</strong> cabeza redonda, utilizado para<br />
asegurar el remo en la borda <strong>de</strong>l bote. Según CO<br />
ROMINAS, 1961, viene "<strong>de</strong>l francés tolet, ,que<br />
lo tomó <strong>de</strong> una lengua germánica agregando el<br />
sufijo -et, probablemente <strong>de</strong>l escandin