por tengo que hablar, llego con el autobús por llego en el autobús, máquina a vapor por máquina <strong>de</strong> vapor (MEO ZILIO, ~964-(5). Existen a<strong>de</strong>más influencias fonéticas y seudoitalianismos léxicos -non parla ma si fka, se non te vedo piu feliche morte, buon giurno por la matina, cueli pochicuyo análisis no correspon<strong>de</strong> en este lugar. Ya DE MARSILIO, 1969, ha efectuado en el vol. 24 <strong>de</strong> NUESTRA TIERRA una contribución que ofrece al lector un panorama <strong>de</strong>l campo lingüístico que por razones <strong>de</strong> espacio nos está vedado <strong>de</strong>sarrollar. Nuestros hábitos culinarios <strong>de</strong>ben muchas contribuciones a <strong>los</strong> <strong>inmigrantes</strong> italianos que no se resignaron al acatamiento <strong>de</strong> la monocor<strong>de</strong> dictadura <strong>de</strong>l mate y <strong>de</strong> la carne. De la Italia piamontesa y lombarda nos¡ ha l<strong>legado</strong> la polenta, hermana <strong>de</strong> la mamaliga rumana, nieta <strong>de</strong> la vieja polenta romana e hija <strong>de</strong>l maíz importado <strong>de</strong> América. Génova nos ha trasculturado la fainá; Nápoles, la pizza, la figazza y el calzonoe; <strong>los</strong> fríos contrafuertes <strong>de</strong> <strong>los</strong> Apeninos la minestra labradora y la bUsecca al<strong>de</strong>ana. Y <strong>de</strong> la tradición vegetariana <strong>de</strong> las ciuda<strong>de</strong>s y pueb<strong>los</strong> peninsulares proviene el innumerable ejército <strong>de</strong> las pastas: spaghetti, ravioli, cappelletti, gnocchi, agnellotti, lasagne, tagliateUi, macarroni, vermicelli, fettuccine. A este arsenal se suman el cálido risotto <strong>de</strong> la llanura paduana, que aculturó el arroz traído por <strong>los</strong> árabes a la huerta valenciana; el milanés y proletario ússobuco; la familia <strong>de</strong> <strong>los</strong> quesos: ricoUe labradas como encajes, mozzarelle nacidas <strong>de</strong> la tierna cuajada, g01'gonzole <strong>de</strong> agresivo aroma, piacentini <strong>de</strong> áspero paladar, parmesani <strong>de</strong> amarilla y dura entraña. Con <strong>los</strong> quesos al<strong>de</strong>anos arriba el inevitable cortejo <strong>de</strong> vinos: el carlón, ordinario y popular, lo~ <strong>de</strong> <strong>los</strong> contrafuertes alpinos, <strong>los</strong> <strong>de</strong> las lavas <strong>de</strong> Nápoles, <strong>los</strong> <strong>de</strong>l soleado Salerno, <strong>los</strong> <strong>de</strong> las granjas <strong>de</strong> Toscana, <strong>los</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> castil<strong>los</strong> romanos. Todos estos productos <strong>de</strong> la gastronomía y el folklore alimenticio itálicos se <strong>de</strong>rraman en las pampas, cuchillas y pueb<strong>los</strong> <strong>de</strong>l carnívoro Río <strong>de</strong> la Plata y confun<strong>de</strong>n sus caudales con <strong>los</strong> <strong>de</strong> la refinada cocina francesa y la violenta cocina española pro-· vacando una mescolanza <strong>de</strong> las áreas <strong>de</strong>l aceite, la grasa, la manteca y la salsa blanca cuyas consecuencias fisiológicas no han sido investigadas todavía con rigor científico. En el terreno <strong>de</strong> la religión la influencia italiana es perceptible en el acendrado culto a <strong>los</strong> santos, rasgo que comparte con el catolicismo popular español. Santa Lucía y San Genaro han instalado en el Río <strong>de</strong> lá Plata todo su cortejo folklórico, entreverando elementos cristianos con paganos. Entre estos últimos milita la jettatura meridional que pier<strong>de</strong> en estas latitu<strong>de</strong>s su halo siniestro para convertirse en la yeta, una entidad frustrante, una parcá en tono menor que se abate sobre nuestras cotidianas esperanzas en el juego o en el amor, dos evasiones individualistas al mortecino <strong>de</strong>stino colectivo <strong>de</strong>l homo uruguayensis. Otra característica popular italiana que irrumpe en toda peña discutidora o en el diálogo vehemente es la gesticulación abundante, la costumbre <strong>de</strong> complementar la palabra con <strong>los</strong> <strong>de</strong>dos enfáticos y <strong>los</strong> brazos expresivos, amén <strong>de</strong> múltiples visajes faciales. Se trata <strong>de</strong> la herencia <strong>de</strong> la personalidad básica mediterránea, forjada a cielo abierto en <strong>los</strong> embarca<strong>de</strong>ros minoicos, en las factorías <strong>de</strong> comerciantes fenicios, en el ágora griega, en el mercado romano, en <strong>los</strong> puertos levantinos, en la plaza pública <strong>de</strong> las ciuda<strong>de</strong>s renacentistas, en <strong>los</strong> zocos <strong>de</strong>l África berberisca, en <strong>los</strong> litorales soleados que se abren sobre las rutas <strong>de</strong>l M are N ostrum. Hay una psicología y una sociología <strong>de</strong>l gesto. Los gesticuladores revelan una extroversión <strong>de</strong> eternos cabildantes que para algunos intérpretes traduce una expresividad biológica primitiva, reacia a <strong>de</strong>- 34
Dibujo <strong>de</strong> Mingo La "guapperia" <strong>de</strong> <strong>los</strong> camorristas napolitanos <strong>de</strong>cora la heráldica <strong>de</strong> <strong>los</strong> compadritos criol<strong>los</strong>. cantarse en la palabra breve y el a<strong>de</strong>mán esquemático, y para otros supone milenios <strong>de</strong> convivencia discursiva, <strong>de</strong> estentórea militancia social. Para <strong>los</strong> anales <strong>de</strong> la música popular restan otras características que necesariamente soslayamos, oportunamente tratadas por uno <strong>de</strong> nosotros (VI DART, 1967). <strong>El</strong> tango rioplatense ha sido creado, a<strong>de</strong>rezado y servido en gran parte por <strong>los</strong> italianos <strong>de</strong> Montevi<strong>de</strong>o y Buenos Aires: compositores, letristas, músicos y cantores, toda una legión <strong>de</strong> per- 35