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De Flores ya sabemos que se reúne con varios amigos en su casa y que discute gran parte de
sus actividades con su mujer, que habla acerca de ello por teléfono cuando él no está en casa.
Con respecto al Gobierno, Deán quiere que intensifique mi trabajo con Pablo Maldonado, el
Director de Inmigración, y que trabaje en torno a una amistad coordinadora con Manuel
Córdova, el Subsecretario de Gobierno, y con Jaime del Hierro, Ministro de Gobierno. Hasta la
techa he evitado el contacto con Córdova y del Hierro (bajo las instrucciones de Noland, del
año pasado), pero no será difícil retomarlo ahora.
Deán esgrime como razón para ello, el descubrir y controlar el manejo de la información que
entregamos y poder determinar así, qué información traerá acción cuando sea pasada a los
agentes de policía como Pacifico De los Reyes y Oswaldo Lugo.
Con todo este quehacer necesitaré agentes nuevos para la trascripción, trabajo fotográfico y
las funciones de guía. El equipo de procesamiento de las intervenciones telefónicas será Edgar
Camacho y Francine Jácome será el guía. Haré que Francine venga a mi casa todas las
mañanas a las 8 para que deje las transcripciones y reciba instrucciones para los otros.
Otro esfuerzo que se inicia y que puede ser importante: he dado dinero a Jorge Gortaire para
que compre un Land Rover usado para hacer un viaje a las guarniciones militantes de la sierra
y de la costa. El objetivo de este viaje será sondear a los líderes militares acerca de los
rumores de una movida en contra de Arosemena, predisponiendo al mismo tiempo, a los
militares con respecto a dicha acción, aún cuando los rumores no sean verdad.
QUITO
MARZO 1 DE 1963
Los periódicos de la mañana cubren, en forma destacada el testimonio de Mr. Me Cone,
entregado ayer en el Senado de Washington, sobre el entrenamiento de guerrillas en Cuba. El
Director mencionó al Ecuador como uno de los países que tiene la mayor cantidad de personas
reclutadas para el entrenamiento, y explicó cómo la Embajada Cubana, en Ciudad de México,
trata de ocultar el viaje a Cuba, otorgando la visa en un pedazo de papel, sin timbrar el
pasaporte. Su informe continúa con otros antecedentes de la Jefatura, publicados el mes
pasado por el Departamento de Estado, que informa que de 1.000 a 1.500 jóvenes
Latinoamericanos recibieron entrenamiento guerrillero en Cuba, durante 1962.
En un comentario sobre los artículos de prensa de esta mañana, Deán me contó que una de
sus operaciones en Ciudad de México, era el equipo de control de viajes en el Aeropuerto. Ahí,
los pasaportes de los viajeros a Cuba son timbrados por los inspectores mexicanos de
inmigración con "Llegado de Cuba" o "Salida a Cuba", para asegurarse que el viaje quede
registrado en el pasaporte. La Estación fotografía también todos los pasaportes de los viajeros
con máquinas fotográficas similares a las de Prensa, mientras se embarcan o desembarcan los
pasajeros.
Los resultados de la operación de control de viajes en Ciudad de México se combinan, para
procesarlos junto a otras informaciones de viajes, a través de rutas más importantes como
Praga o Madrid.